Análisis de Tortugas Ninja (Game Boy Advance)
En los años 80, un fenómeno mediático que comenzó en forma de cómic independiente se gestaba en Estados Unidos con el nombre de Teenage Mutant Ninja Turtles… Unos años después, la explosión surgió a raíz de la serie de animación, gracias a la cual la mayoría de los que éramos niños por aquél entonces conocimos a los cuatro héroes. El hecho de que la serie de animación estuviera dirigida exclusivamente al público infantil fue el causante de que la misma fuera una versión bastante edulcorada respecto al cómic original, con lo que perdió bastantes adeptos dentro del sector más adulto aficionado al género. Y después de varios años de capítulos y más capítulos, nuevos cómics basados en la serie de animación, figuras articuladas y álbumes de cromos, un buen día desaparecieron del mapa y nunca más volvió a saberse de ellas (bueno, sí, en algunos canales de televisión se continuaban emitiendo episodios de la serie, pero ya no era lo mismo).
Después de casi quince años desde el auge de las Tortugas Ninja, surge de nuevo una serie de animación (ésta vez con más similitudes respecto al cómic original), con su correspondiente merchandising y, cómo no, la película en la pantalla grande.
Pero nada que ver con las películas producidas por la factoría del genial Jim Henson de aquél entonces, en las que una serie de actores de segunda (sin ánimo de ofender a nadie) intentaban parecer ninjas dentro de unos trajes de cartón piedra con los cuales parecía prácticamente imposible moverse… ¡Y lo más fuerte es que hicieron hasta tres películas con los dichosos trajes! (y con algunos peores: algunos de los que las vieron en aquél entonces recordarán lo ortopédicos que parecían los trajes de los que hacían de malos en aquellas películas… ¡qué tiempos aquellos!). Esta vez la película es de animación por ordenador: según los trailers en circulación parece que esta vez lo de ser ninjas va en serio. Esta vez la cosa tiene pinta de ser, francamente, espectacular. Todo se verá.
Y, cómo no: el sector de los videojuegos tiene su réplica inmediata. Bueno, eso no es del todo cierto: en la Game Boy Advance, sin ir más lejos, ya llevábamos dos títulos en los que las Tortugas Ninja eran los protagonistas… Parece que éstas nunca han dejado la memoria popular y siempre han tenido su rinconcito dentro del corazón del público. Pero en esta ocasión no hay excusa: el nuevo juego de los héroes mutantes para la veterana de Nintendo merece la pena, y mucho.
¡Cowabunga!
Ciertamente, el nuevo juego de las Tortugas Ninja para la GBA ha sido un tiro muy preciso, y éste ha dado en el blanco. Por un lado, pensemos que seguramente será de los últimos títulos de novedad que aparezcan para la veterana portátil, al menos en el mercado europeo. Por otro, nos encontramos un juego que no es más que una revisión de los míticos ‘yo contra al barrio’ de finales de los ochenta y principios de los noventa… Encontramos guiños a varios juegos de acción lateral de esa época, sin ir más lejos a las grandes recreativas de las Tortugas Ninja: Teenage Mutant Ninja Turtles y la genial Teenage Mutant Ninja Turtles 2: Turtles in Time.
Este cóctel de emotivos recuerdos, añadido al hecho de que el juego está muy conseguido tanto técnicamente como en cuanto a su diversión y rejugabilidad, hacen de él un título muy a tener en cuenta y un competidor loable de las versiones para plataformas de mayor potencia… De hecho, podríamos decir que, salvando las distancias a nivel técnico de las diferentes plataformas, nos encontramos ante el mejor juego basado en la nueva película de nuestros héroes de todos los editados en las diferentes plataformas, y seguramente el mejor juego de las Tortugas Ninja hasta la fecha, claro competidor del ya mencionado Turtles in Time.
La clave del éxito es la sencillez.
Hay dos razones por las que Teenage Mutant Ninja Turtles es un buen juego: su jugabilidad y el hecho de que sea divertido jugarlo, tanto que es casi imposible no querer rejugarlo una y otra vez. Su sistema de movimientos, ataques y combos es extremadamente sencillo (sólo utilizaremos la cruceta y los botones a y b para el manejo de nuestros héroes), pero funciona a la perfección y nos hará disfrutar de lo lindo. El botón A para saltar y el botón B para golpear: ése es sólo el principio.
A partir de ahí, lograremos combos apretando varias veces B, combinando el botón B con las diferentes direcciones de la cruceta haremos puñetazos aéreos, lanzaremos de una patada delantera o trasera a nuestros adversarios contra las hordas de enemigos, agarraremos a nuestros enemigos y los lanzaremos, combinando A y B saltaremos y golpearemos con las rodillas o con una potente patada, rebotaremos en las paredes… En fin, un sinfín de movimientos que harán de la experiencia de juego todo un placer en la que nos veremos enfrascados en la divertida tarea de combinar los diferentes golpes entre sí para realizar combos de más de veinte golpes.
Y enemigos a los que golpear no nos faltarán: habrá momentos en los que tendremos media docena de enemigos en la pantalla, y deshacernos de todos será todo un reto… Además, a pesar de que el género se fundamenta en enemigos clónicos unos de otros, la variedad de adversarios y situaciones es suficiente como para que no nos aburramos de abofetearlos una y otra vez. Tendremos enemigos normales, armados, robustos, con armadura, robots… Y además, los enemigos finales que, sin llegar a la categoría de Rocksteady, Bebop o Shreeder (los enemigos originales de la serie y de las primeras recreativas), sí que serán lo suficientemente resultones para enfrentarnos a ellos y pasarnos unas cuantas decenas de minutos intentando derrotarlos. Además, los escenarios son rompibles por casi todas partes, y podremos coger muchos de los objetos dispersos por los mismos y utilizarlos como armas, así como podremos usar también las armas que nuestros enemigos dejen caer al ser derrotados.
La historia es la de la película, con algunos elementos del cómic por en medio… Pero con una diferencia respecto a las versiones homólogas para otras plataformas: la historia está contada como si ya hubiera pasado, es decir, las tortugas, con el maestro Splinter y su amiga April, cuentan la historia como si fuera ya parte de sus recuerdos. A partir de ahí, la acción empieza en los diferentes escenarios en los que se desarrolla el juego, que no son pocos.
Lo que sí resulta un poco corta es la historia en sí: en total, siete capítulos en forma de misiones que, al final, se nos harán demasiado cortos. De hecho, el juego podemos acabarlo en apenas tres horas. Pero tenemos tres niveles de dificultad; tres niveles de experiencia para las tortugas a conseguir a base de acumular puntos en cada nivel, derrotando enemigos, usando objetos… cosa que hará que nuestras tortugas sean más fuertes, más veloces, etc.; una serie de trofeos a conseguir a base de derrotar a un número determinado de enemigos, a base de conseguir un cierto número de objetos, monedas, etc. El juego, ya lo hemos dicho, no es muy largo, pero la verdad es que es rejugable hasta la saciedad. Además, después de cada misión podremos salir a la superficie desde nuestra guarida y comprar diferentes objetos y bonificaciones, además de jugar a varios minijuegos muy entretenidos ofrecidos por nuestros amigos Casey Jones, April o Splinter en varios niveles de dificultad.
Algunos defectos que podemos achacarle al juego, a parte de su escasa longitud, son la falta de un juego multijugador y la falta de un sistema de guardado más práctico. El hecho de que no tenga la posibilidad de un juego multijugador se entiende, ya que el despliegue técnico en todo el juego es notable, y seguramente el hecho de añadir la posibilidad de un segundo jugador hubiera ido en detrimento del conjunto. Por otro lado, tenemos la posibilidad de pedir ayuda a uno de nuestros hermanos ninja durante la partida, bien sea en forma de luchador de apoyo durante unos instantes como para darnos bonificaciones de salud que hará que recuperemos toda la vida. Esta ayuda la conseguiremos rellenando la barra superior derecha, a base de dar mamporros a diestro y siniestro (cómo no).
Por otro lado, el sistema de guardado es un pelín incómodo. La partida se guardará automáticamente después de acabar una misión, pero los progresos que hagamos después de esa misión (véase los que hagamos en los minijuegos, las compras que hagamos fuera de nuestra guarida, etc.) no los podremos guardar de ninguna manera, y si al enfrascarnos en una nueva misión perdemos todas las vidas, volveremos al punto de guardado anterior, con lo que deberemos realizar de nuevo los progresos posteriores a éste. Es un error perdonable, pero hubiera sido de agradecer poder guardar en algún punto entre misión y misión.
Apartado técnico
En lo que a gráficos se refiere, las Tortugas se debaten en escenarios de gran tamaño en dos dimensiones, con enemigos y personajes de sprites de un tamaño más que aceptable, muy buena definición en los mismos y un nivel de detalle general bastante alto. Veremos perfectamente las combinaciones de golpes, podremos destrozar casi todo lo que veamos a nuestro paso, y el resultado global alcanza un nivel de espectacularidad difícilmente visto en otros juegos de acción de la veterana portátil. En ocasiones, los escenarios se ven un poco desangelados, vacíos o faltos de elementos en los fondos, pero son pequeños errores compensados con la gran cantidad de enemigos que se despliegan en cada escena.
La música acompaña perfectamente al conjunto. Sin llegar a las cotas más altas del arte, cumple con mucha dignidad su función y, lo que es más importante, no aburre en ningún momento. Pensemos que a cada cambio de escenario durante cada misión se le corresponde un cambio de música, con lo que el conjunto es variado y fluido. En lo que respecta a los efectos de sonido, cada golpe que demos o recibamos tendrá su correspondiente respuesta sonora. También escucharemos lamentos, exclamaciones de nuestros héroes y el genuino Go! exclamado al final de cada escena de lucha, incitándonos a que continuemos con la aventura.
La jugabilidad es el plato fuerte del título. Sencillez, diversión y una curva de dificultad muy ajustada que ayudará a que nos enganchemos al juego desde el principio, que nos empeñemos en superar los retos más difíciles y que hará que deseemos jugar las diferentes misiones una y otra vez. Todo un lujo.
Conclusiones.
Las Tortugas Ninjas, como cualquier héroe mediático, han tenido siempre multitud de seguidores y detractores. En este caso, el asunto es un poco más complicado, porque se trata de héroes a los que se les ha dado un gran empuje dentro del público infantil, en detrimento del sector más adulto (a pesar de que en un principio eran héroes destinados precisamente a este tipo de público). Pese a todo, el nuevo juego para la Game Boy Advance sobre los famosos quelonios es un juego muy notable y muy recomendado para cualquier jugador que disfrute con los juegos de acción, sea fan de las Tortugas Ninja o no. Es un juego sin muchas pretensiones, sólo con el objetivo de divertir al público con su maravillosa jugabilidad y su loable sencillez. Y lo consigue, lo cual ya es mucho…