Análisis de Tony Hawk's Pro Skater 3 (Game Boy Advance)

Que rápido pasa al tiempo. Al menos, eso parece. Parece que fuera ayer cuando se lanzaba GBA en Europa, ese 22 de junio de 2001, con sus 13 títulos de lanzamiento. Mario, F-Zero, Castlevania, Rayman, Krazy Racers,… y Tony Hawk’s 2. El gran Tony Hawk’s 2. Parece que, sin ir más lejos, fuera ayer cuando ese vídeo del conocido juego de skate adaptado a la flamante portátil de 32 bits dejara pasmados a propios y extraños, por su inusitada calidad gráfica e innovador sistema de control. Que fuera considerado el juego más impresionante del catálogo de lanzamiento. Que fuera considerado un prodigio a nivel gráfico y jugable, especialmente por tratarse de un juego de ‘primera generación’. Que fuera alabado por crítica, ventas y jugadores. Que Tony Hawk tuviera una conversión digna para una gran portátil.

Pues ya ha pasado un año, y Tony ha vuelto.

Y ahora, con Tony Hawk’s Pro Skater 3 ya en la calle, podemos afirmar que el predecesor fue sólo un experimento, una mera prueba para poner en práctica su avanzado motor gráfico y su arriesgado sistema de juego. Pero funcionó. (Vaya si funcionó.) Se convirtió como ya hemos comentado en uno de los mejores juegos de GBA durante sus primeros meses, y lo ha venido siendo hasta la llegada de su esperado sucesor, ya anunciado cuando apareció Tony Hawk’s 2, y que prometía llevar un poco más allá si cabe la experiencia de juego digna del campeón del mundo de skate; Tony Hawk’s Pro Skater 3 ya ha llegado, y, francamente, es sencillamente impresionante. Tony Hawk’s 3 supone una revisión y completa mejora del ya aparecido Tony Hawk’s 2, añadiendo nuevas pistas, nuevos personajes, así como modos de juego. Pero la esencia del juego permanecerá inalterable, como ha permanecido a lo largo de las tres entregas aparecidas en PC, Plasystation, y PS2 (con su última versión también para GameCube y Xbox), y como probablemente lo siga haciendo en el prometedor futuro. Esto es, recorrer amplios escenarios montados en un monopatín de cuatro ruedas, y completando objetivos (10 por cada nivel) o tareas requeridas para el avance en el juego. Como siempre, vamos. Pero lo cierto es que, cuando algo funciona, ¿para qué cambiarlo? Así lo han entendido los inefables chicos de Vicarious Visions, que tomando como punto de partida el grandioso debut de la saga en GBA, han ido mejorando todos y cada uno de los puntos fuertes del juego, consiguiendo realmente el juego de skate perfecto (por ahora) en una consola portátil; gráficos, sonido, control, modos de juego, opciones, movimientos, escenarios,… todo ha sido ampliado y mejorado hasta niveles insospechados. Digno de Vicarious Visions. Digno de Tony Hawk. Lo primero con lo que nos encontraremos durante el primer contacto con el juego será con un diseño de menús completamente nuevo y bastante original. El menú principal nos permitirá ante todo escoger al Skater que queremos utilizar (tendremos a 13 disponibles), usando los botones de izquierda y derecha de la cruceta de GBA, para posteriormente permitirnos escoger de la misma manera el modo de juego (entre los comunes en un Tony Hawk’s: Career, Free Skate, Single Session, y Multiplayer) y el nivel en el que participar (estando al principio solo disponible el primero, para a medida que vayamos avanzado desbloquear los otros. Por último, las ya usuales opciones y Skate shop, pero todo ello alejado del diseño de Tony Hawk’s 2, en una acertada decisión por parte del grupo desarrollador, puesto que la pantalla se puede vislumbrar claramente sin problemas de "oscuridad". Pero las mejoras no se quedan en el menú o en los modos de juego. También los gráficos han visto como su calidad aumentaba con creces, y hasta el sonido ha sido mejorado (aunque no hasta el grado que desearíamos). Esta vez la vista isométrica se mantiene, llegando al cenit gráfico de GBA hasta la fecha en dicha vista con sus detalladísimos personajes poligonales (que esta vez tienen cara, llevan gorras y hasta marcas en las prendas de ropa) y sus cada vez más extensos escenarios renderizados. La comunión entre render y polígonos otra vez resulta sublime, dando la impresión de que los escenarios son totalmente polígonales debido a la perfecta implementación de los corredores con sus skates en ellos. La velocidad vuelve a ser una de las grandes bazas del juego, siendo realmente alta sin ralentización ni pérdida de calidad alguna. Se han añadido nuevas animaciones a los personajes, y las caídas son ahora más espectaculares, y como novedad más superflua pero denotando detallismo podríamos destacar la inclusión de personas en los escenarios, que pasean por ellos (exactamente igual que en las versiones para las consolas domésticas) y que, aún y no tener trascendencia alguna, son una muestra del potencial gráfico que el juego y la consola desprende. Un adjetivo tan sólo se utilizaría para definir el trabajo de Vicarious Visions al respecto: chapeau chicos, y a seguir así. Seguramente uno de los mayores defectos achacables a la pionera versión de hará un año fue su corta duración, debido a sus seis únicos escenarios y la total ausencia de la opción multijugador. Pero como todo tiene remedio, y quien mejor que Vicarious Visions para demostrarlo, el número 3 de los Tony Hawk’s ofrecerá el esperado multijugador y, aunque solo ampliará en uno (y secreto) los skate-parks disponibles, éstos han aumentado ostentosamente de tamaño y conseguir todos su objetivos llevará mucho más tiempo que en el anterior juego de la saga.

Cabe añadir en cuanto a mejoras la inclusión del modo para crear un skater, a imagen y semejanza del de la versión doméstica, que tanto se echó a faltar en el anterior juego. Y es que gracias a la alta calidad gráfica que permite que los personajes lleven tatuajes, camisetas con logos, tengan pelo, cara, y demás, podremos crear un skater a nuestra imagen y semejanza. Con la ropa (camisetas, pantalones, zapatos,…) que queramos, el monopatín que deseemos, y los adornos que le otorguemos. Sin duda una curiosa opción que puede desembocar en skaters de lo más variopinto pero que sin duda le confiere un toque especial al título.

Como ya hemos dicho, en el modo monojugador el juego no va quedarse corto. Sus enormes niveles llenos de rampas, barandillas, half pipes, y cualquier cosa imaginable al servicio de la espectacularidad estará presente, en los seis (más uno secreto) escenarios extraídos directamente de la versión para consolas domésticas. Algunos de ellos serán hasta interactuables, pudiendo modificar alguna de sus secciones para tener acceso a zonas secretas (como, sin ir más lejos, en el primer nivel con la lava). Lo cierto es que podríamos considerar el primer nivel del juego igual de grande que el más extenso en THPS 2, así que haced cuentas e imaginaos que niveles nos esperarán más adelante. Su diseño, como siempre, impecable; parece destinado únicamente al gozo y deleite del jugador, realizando piruetas, combos, saltos, en todas partes, y con ello consiguiendo puntuaciones que dejan en ridículo las de Tony Hawk’s 2 (principalmente debido a la inclusión del movimiento "Revert", que permite enlazar los combos para así lograr puntuaciones mucho más importantes).

Pero su mayor atractivo y novedad reside en el multijugador, que ya anuncia el menú principal del juego y que se convierte en todo un estándar para la duración y diversión ilimitada que un juego puede ofrecer.

Y es que, alejándose del primitivo y rudimentario modo multijugador de juegos como Dave Mirra 2, THPS 3 presenta una verdadera opción, con modos para desde una hasta cuatro GBAs (conectadas mediante el cable link). Como ya comentamos en su momento el juego dividirá su multijugador en el basado en el cable link (en los que se requiere un cartucho por cada GBA participante) y el que se puede jugar en una misma consola. Éste último incluirá los modos más simples, en los que competiremos en un escenario para realizar un número determinado de puntos para después dejar paso a que nuestro compañero intente superarlo. Poco más por esta parte. Pero dónde sí reside la novedad y la adicción es en los distintos tipos de juego multijugador para Cable Link. A saber: Horse, Tag y King of the Hill, siendo estos dos últimos los más divertidos. El modo Tag consiste en recorrer los niveles escapando del que "la lleva", que debe perseguir y atrapar a los demás, mientras que el modo King of the Hill será el habitual "rey de la colina", en el que deberemos perseguir todos a quien pertoque a cada momento. Por último, encontraremos el común juego de conseguir cuántos más puntos mejor, el llamado "Horse", pero con la particularidad de que se trata de tan sólo un movimiento. Es decir, un jugador deberá, con un solo combo, establecer el record, que los demás deberán ir superando estableciendo nuevos records, y así sucesivamente. En vista de lo que Tony Hawk’s 3 proporciona, podríamos decir que su predecesor sólo era un avance de lo que nos esperaba. La nueva versión mejora la calidad gráfica, depura la jugabilidad, alarga su duración y presenta nuevos modos de juego (con el tan ansiado multijugador entre ellos). Toda una delicia visual, jugable, y sonora. La pregunta ahora sería, ¿cómo será posible mejorar el juego de skate perfecto en una portátil? ¿Gráficos en 3D? ¿Canciones cantadas? ¿Conexión con GameCube, e incluso online? ¿Editor de escenarios? Tony Hawk’s 4 nos contestará. Pronto en vuestras GBA, seguro. Pero de momento disfrutad de esta maravilla en forma de pequeño cartucho para la mejor portátil de la historia.