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FromSoftware se ha convertido en la última década en todo un sello de calidad. Aunque el estudio tiene más de 30 años a sus espaldas y nos ha dejado juegos y sagas tan recordados como King's Field, Otogi o Armored Core, el auténtico reconocimiento internacional no lo obtuvo hasta 2009, cuando sorprendió a medio mundo con Demon's Souls, un éxito que repetiría en años posteriores con Bloodborne, la trilogía Dark Souls y Sekiro: Shadows Die Twice.
Para celebrar que ya tenemos a Elden Ring entre nosotros, su nueva obra maestra, hemos querido actualizar nuestro ranking de nuestros juegos favoritos de FromSoftware para incluirlo en la lista, donde tal y como podréis comprobar, ocupa un privilegiado lugar.
Dicho esto, ¡comenzamos!
7. Dark Souls II (2014)
Dark Souls II suele ser visto como el patito feo de la saga, siendo esta la única entrega no dirigida por Hidetaka Miyazaki, su creador. Sus principales problemas radicaron en una dificultad peor medida y más artificial, un diseño de niveles que se quedó lejos de lo visto en su primera entrega, jefes poco memorables y una historia mucho menos interesante y peor contada, lo que no quita que, a pesar de sus carencias, siga siendo un juego realmente bueno y muy recomendable, especialmente con todas sus expansiones, por no hablar de que también cuenta con el que es, probablemente, el mejor multijugador competitivo de toda la serie.
6. Demon's Souls (2009)
Nacido como una especie de sucesor espiritual de la saga King's Field, Demon's Souls fue una de las mayores sorpresas de la generación de PS3 y Xbox 360. Una aventura de rol y acción que iba en contra de las modas de la época al plantearnos una dificultad elevadísima que no tenía clemencia con el jugador, ausencia total de tutoriales y un multijugador único y extremadamente original que nos permitía colaborar con otros jugadores para superar los retos más complicados, ya sea luchando juntos o a través de breves mensajes escritos en el suelo, aunque si lo preferíamos, también podíamos invadir sus partidas para intentar acabar con ellos.
A todo esto tenemos que sumarle un diseño de niveles fantástico que nos dejó para el recuerdo algunas de las mejores fases de la historia de los videojuegos, como la torre de Latria, multitud de posibilidades a la hora de desarrollar a nuestro personaje, espectaculares y sorprendentes batallas contra jefes finales y una enorme cantidad de secretos y mecánicas crípticas que consiguieron juntar a toda la comunidad para desentrañarlos. A destacar también su sobresaliente remake para PS5 desarrollado por Bluepoint.
5. Dark Souls III (2016)
El cierre de la trilogía Dark Souls difícilmente pudo ser mejor, ofreciéndonos una aventura completísima que recuperaba lo mejor de la saga y pulía todos sus apartados hasta cotas insospechadas, con un sistema de combate mucho más refinado y satisfactorio, jefes finales inolvidables y con numerosas fases, una de las mejores bandas sonoras de los últimos tiempos y un diseño artístico que consiguió dejarnos con la boca abierta numerosas veces con sus escenarios y enemigos. Por supuesto, el diseño de niveles volvió a sobresalir y sus dos expansiones terminaron de ponerle la guinda a un producto redondo como él solo.
4. Sekiro: Shadows Die Twice (2019)
En cierto sentido, la comparación de Sekiro: Shadows Die Twice con el resto de juegos de esta lista resulta un poco injusta, ya que se trata de una aventura muy distinta y sin multijugador que desecha casi todos los elementos de rol para centrarse en la acción, el sigilo y el plataformeo mientras encarnamos a un ninja que debe recorrer una oscura versión del Japón feudal repleta de elementos fantásticos y sobrenaturales.
El diseño de niveles ganó en verticalidad gracias a la alta movilidad de nuestro personaje, los combates se volvieron mucho más intensos y espectaculares que nunca al obligarnos a aprender a esquivar y desviar los ataques de los enemigos como auténticos expertos espadachines, y la dificultad se disparó al hacernos totalmente dependientes de nuestra habilidad con el mando para derrotar a sus numerosos jefes y minijefes, encontrando aquí algunas de las mejores batallas jamás diseñadas por FromSoftware. Sin duda, todo un imprescindible.
3. Dark Souls (2011)
Si Demon's Souls sentó las bases de la fórmula, Dark Souls fue el que terminó de definirlas, convirtiéndose en uno de los juegos más influyentes de todos los tiempos y en una auténtica obra maestra a la que pocos pueden mirar de tú a tú. Probablemente el mayor avance respecto a su predecesor lo encontremos en su diseño de niveles, con un gigantesco mapa que interconectaba todas sus zonas de maneras sorprendentes e inauditas, convirtiendo la exploración y el avance por la aventura en una experiencia tan gratificante como adictiva.
Su mundo también consiguió conquistarnos por completo, escondiendo una de las historias más interesantes y elaboradas que se puedan imaginar, jefes inolvidables, personajes tan carismáticos como Artorias y un apartado artístico que nos ha dejado multitud de imágenes grabadas en la memoria. Sin duda, uno de los mejores juegos de la historia.
2. Bloodborne (2015)
Hasta ahora, Bloodborne había sido nuestro juego favorito de FromSoftware y motivos no le faltaban. A pesar de seguir la fórmula vista en Dark Souls y Demon's Souls, el estudio apostó por darle un interesante giro a los combates para hacerlos mucho más ofensivos, ágiles y dinámicos al quitarnos el escudo y darnos armas transformables, lo que se acabó traduciendo en unas batallas considerablemente más frenéticas en las que teníamos que estar constantemente esquivando y atacando, por lo que tomar la iniciativa era fundamental para alzarnos victoriosos.
Otro de sus puntos fuertes fue su ambientación, abandonando la fantasía medieval para llevarnos de pleno a Yharnam, una oscura y perturbadora ciudad de corte gótico en la que viviríamos una infernal pesadilla que bebía directamente de la mitología y la literatura de Lovecraft para ofrecernos una historia tan fascinante como aterradora.
Uno de esos juegos que hizo absolutamente todo bien y que alcanzó la excelencia en cada uno de sus apartados: jugabilidad, diseño de niveles, duración, rejugabilidad, dificultad, multijugador, combates, jefes finales, ambientación, historia, gráficos, diseño artístico... Hasta su expansión fue una completa maravilla que nadie debería perderse.
1. Elden Ring (2022)
Y sí, Elden Ring ha llegado pisando tan fuerte que se ha colado directamente en lo más alto de nuestro top. Una obra colosal con la que el estudio ha llevado su exitosa fórmula al terreno de los mundos abiertos para crear un juego único y como nunca antes habíamos visto, combinando una jugabilidad familiar y reconocible con un mapa que hace de la exploración algo nuevo e inigualable.
Y todo ello aderezado por un diseño de niveles que deja sin habla y que consigue que cada paso que damos equivalga a encontrarnos con una nueva sorpresa o situación inesperada. Una fuente de ideas inagotable que nos invita a descubrir hasta su último rincón y que no deja espacio para el aburrimiento, pues siempre hay algo nuevo en el horizonte capaz de despertar nuestra curiosidad y nuestras ganas de aventura. Sumad unas mazmorras gigantescas que pueden medirse cara a cara con las mejores fases que ha diseñado jamás el estudio, unos combates tremendamente gratificantes, unos jefes sobrecogedores y desafiantes, un diseño de juego más accesible, la siempre agradecida posibilidad de saltar, emocionantes batallas a lomos de una montura, una ingente cantidad de secretos, libertad total para ir a donde queramos, una banda sonora de diez y una dirección de arte sin rival alguno.
Una obra a la que es imposible hacer justicia solo con palabras y que nos lleva a preguntarnos constantemente cómo Hidetaka Miyazaki y su equipo podrán superarla en un futuro. Por todo ello y mucho más, Elden Ring ya es no solo nuestra obra favorita de FromSoftware, sino también uno de nuestros títulos favoritos de todos los tiempos.
