A principios de los años setenta, cuando la televisión aún tenía el poder de congregar a toda la familia frente a la pantalla, Un, dos, tres... Responda otra vez no solo entretenía, sino que hacía soñar. Bajo la dirección de Chicho Ibáñez Serrador, este icónico programa se convirtió en un fenómeno cultural por su mezcla de humor, tensión y, sobre todo, sus espectaculares premios.
De entre todos ellos, las famosas “casitas en la playa” destacaban por ser el símbolo más tangible de un sueño cumplido: el acceso, casi imposible para muchos en la España de la época, a una vivienda vacacional junto al mar. Estas casas, que se entregaban a los concursantes ganadores, estaban ubicadas en enclaves costeros privilegiados. En los años del desarrollismo tardío, cuando el turismo comenzaba a transformar el litoral español, ganar una casa en la playa era algo más que un premio: era una promesa de modernidad, libertad y progreso.
Una vivienda de concurso que vuelve al mercado
Representaban una nueva forma de vida, asociada al ocio, el verano y la esperanza de una clase media emergente. Muchas de ellas eran modestas, pero funcionales y soleadas, y hoy siguen en pie como testigos de aquella ilusión colectiva. Uno de estos inmuebles ha vuelto a captar la atención del público gracias a las redes sociales. La inmobiliaria Marhen compartió un vídeo mostrando una de estas casas en La Manga, en el litoral murciano, que había salido al mercado por apenas 73.000 euros.
Reformada, pero aún conservando parte del encanto original, la vivienda despertó una oleada de nostalgia y curiosidad. Usuarios de TikTok y otras plataformas no tardaron en preguntar por su disponibilidad, e incluso fantasear con la posibilidad de vivir en una casa con historia televisiva.
La estructura de esta vivienda es sencilla: planta baja, salón abierto, cocina independiente, un dormitorio con armario empotrado y dos pequeños patios —uno delantero, ideal para cenas de verano, y otro trasero, más funcional. La casa comparte espacio con un bungalow superior, pero ofrece privacidad y amplitud, algo muy valorado en los años en que fue construida.
@inmotiktok Al final no se vendió y se alquiló. ¿Sería por el precio? #inmobiliaria #marhen #casa #houseoftiktok #housetour #hometour #murcia #marmenor #sanpedrodelpinatar #piso ♬ Suspenseful and tense orchestra(1318015) - SoLaTiDo
Una memoria colectiva hecha ladrillo
Para los estándares actuales, puede parecer modesta, pero en su día era sinónimo de lujo accesible, y hoy se ha revalorizado gracias a su aura de nostalgia pop. Lo interesante de este redescubrimiento no es solo la curiosidad inmobiliaria, sino cómo conecta con la memoria colectiva de un país. Un, dos, tres no solo regalaba premios: ofrecía un pedazo de futuro, un respiro en tiempos difíciles.
Hoy, cuando el acceso a la vivienda vuelve a estar en el centro del debate social, estas “casitas de la playa” recuerdan una época en la que la televisión pública podía cambiar vidas de verdad. Y tal vez, también, una forma más amable de soñar.