Netflix está aprendiendo de sus errores. La plataforma de streaming ha confirmado que dejará de hacer contenidos y películas como estaba haciendo hasta la fecha, intentando ahora priorizar la calidad y no la cantidad. La compañía de entretenimiento, el portal de vídeo bajo demanda que más éxito y volumen de suscriptores tiene en nuestros días, ha evaluado los resultados obtenidos por una estrategia que intentaba ofrecer novedades originales constantes al abonado, sin importar la calidad o el impacto mediático de las mismas. La compañía ha visto cómo esto ha repercutido en su imagen y la percepción de los suscriptores y desea cambiarlo.
Netflix quiere copiar el modelo de Apple TV+ en el cine: menos producciones, más calidad
Netflix, informan en Variety, quiere dejar de ser un contenedor de películas y proyectos cinematográficos de dudosa calidad. Desde hace meses, plataformas como Apple TV+ decidieron cambiar el modelo de negocio visto a hasta la fecha en el streaming, intentando primar la calidad, el prestigio y las oportunidades de conseguir premios de prestigio.
A la vista están las películas Coda, Los asesinos de la luna y la esperada Napoleón de Ridley Scott. Todas ellas han llegado o llegarán a los cines, han entusiasmado a la crítica y se han convertido en éxitos de una forma u otra.
En este ámbito ha sido Scott Stuber, director de Netflix Film, el que ha explicado los ajustes en la producción cinematográfica, explicando también por qué estos años han hecho justo lo contrario. Los tiempos cambian y la competencia existente en el modelo de streaming ha modificado el panorama de Hollywood. "Al principio estábamos desarrollando un nuevo estudio: llevábamos pocos años y nos enfrentábamos a compañías centenarias. Así que nos preguntamos: '¿Cuál es su modelo de negocio?' Y durante un tiempo, simplemente nos aseguramos de que tuviéramos suficiente volumen", indica Stubber.
"En este momento, no tratamos de alcanzar un número determinado de películas. Se trata de hacer proyectos en los que creemos y presentar una lista que podamos respaldar y decir: 'Esta es la mejor versión de una comedia romántica. Esta es la mejor versión de un thriller. Esta es la mejor versión de un drama'", concluye. Sin ir más lejos, El agente invisible, podría no contar con una segunda parte tras el ajuste de políticas creativas pese a luz verde dada en su día y la enorme promoción que se hizo del filme de los hermanos Russo. Se dice que Netflix reducirá su volumen de producción de películas hasta la mitad, una reducción considerable, pasando de las actuales 50 películas actuales a una media de 25 o 30 producciones cinematográficas.
El nuevo modelo no entrará en vigor hasta el año que viene, pero los frutos como El asesino o Nyad ya han comenzado a notarse en la plataforma.