David Grusch, uno de los altos cargos de inteligencia en el ejército del Aire de EE.UU, ha declarado bajo juramento que el gobierno de su país tiene restos de naves extraterrestres, así como cuerpos de seres no humanos, en su poder. Como os adelantábamos hace unas semanas, EE.UU ha visto cómo distintas personalidades y antiguos miembros del Pentágono desclasificaban información sobre OVNI y fenómenos aéreos no identificados (UAP en inglés) tras la publicación de cientos de vídeos de encuentros con el ejército. Según Grush, en una sesión que se ha vuelto viral en redes sociales, EE.UU. tiene desde hace décadas un programa secreto con el que captura, recupera y estudia la tecnología extraterrestre.
EE.UU llevaría años con tecnología alienígena en su poder e incluso habrían recuperado varios cuerpos no humanos
Ha sido un caso muy sonado. Los miembros de la subcomisión de Seguridad Nacional, Frontera y Asuntos Exteriores del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes han observado, durante más de cuatro horas, y con el amparo de los partidos Demócrata y Republicano, como tres testigos -calificados como valientes por ambos partidos- relataban con todo lujo de detalles sus experiencias con objetos no identificados.
Hablamos del citado David Grush, ex oficial de inteligencia de la Fuerza Aérea que afirma que el Pentágono tiene en su poder restos de naves alienígenas; David Fravor, un experimentado comandante retirado de la Marina; y Ryan Graves, un reputado expiloto de la Armada.
"Mientras estamos hablando, nuestro cielo está lleno de UAP, cuya existencia no se denuncia lo suficiente. Los avistamientos no son raros, ni aislados. Son la rutina. El estigma de los UAP es real, y plantea un desafío poderoso a la seguridad nacional", explicaba Graves, que afirma que las personas que hablan de esto con sus superiores pueden ser retirados de sus puestos de trabajo o sufrir estigmas. Graves, que fue piloto de F-18 durante años, afirma que vio uno de estos objetos en una de sus misiones, a la altura de Virginia Beach. "Era un cubo gris oscuro o negro dentro de una esfera transparente que se acercó a 15 metros del avión que encabezaba la flotilla. Calculamos que tenía entre 1,6 y 3 metros de diámetro", relata.
"Estos encuentros son tan frecuentes que ya discutíamos el riesgo de encontrarnos con ellos cada vez que salíamos a volar", añade Graves. "Creo que se tendría que permitir a los pilotos, tanto militares como comerciales, que denuncien lo que ven sin temor a las represalias", afirma. Grush, por su parte, fue más contundente si cabe. Según él, como ya habían denunciado otros compañeros y miembros de la CIA, el Gobierno de EE.UU. está en posesión de objetos y cuerpos extraterrestres accidentados en la Tierra, insinuando incluso la existencia de una serie de fuerzas, comités y organismos gubernamentales ocultos a los ojos del contribuyente. Una especie de gobierno en la sombra. El país habría estado aplicando la llamada ingeniería inversa para desfragmentar la tecnología extraterrestre y aplicarla a la nuestra.
"¿Estamos en posesión de los pilotos que manejaban estos objetos?", preguntó uno de los diputados. "Sí, se han encontrado restos de biologías no humanas", afirmaba Grush, que ya había explicado en el pasado este asunto, pero la diferencia es que, en esta ocasión, lo ha hecho delante de los congresistas y en una comparencia pública, por lo que estaba bajo juramento. Este alto cargo respondió a muchas preguntas de los congresistas, aunque destacó que mucha de la información de la que atesora es clasificada y solo se podría desvelar o responder en sesiones cerradas al público y con diputados con permisos especiales. Alertó de los equipos de rastreo y vigilancia del Pentágono para estos temas, así como también hizo hincapié en la presión de la opinión pública y las distintas cámaras de la política estadounidense de cara a la desclasificación de material sensible al respecto.
El testimonio de Fravor, piloto y jefe de la Armada, también fue muy importante. Afirma que vio en 2004 un objeto extraño en la costa de California, que se movía como una bola de ping pong, ejecutando trayectorias a velocidades imposibles para la tecnología humana. "Lo que presenciamos era algo que va más allá de la ciencia material que conocemos y de las capacidades que teníamos entonces, ahora o que consigamos en los próximos diez o veinte años", explicaba de forma rotunda. Este capítulo en el Congreso de EE.UU es uno más a la hora de destapar información clasificada sobre OVNIS y extraterrestres desde que, en 2017, The New York Times publicase innumerables vídeos de estos misteriosos fenómenos aéreos a la opinión pública.
Ambos partidos, Demócrata y Republicano, han reclamado a las autoridades mayor transparencia sobre el controvertido tema y aseguran que están dispuestos a llegar lejos. El Congreso ya accedió a muchos documentos clasificados en el pasado, pero no habría podido corroborar esta información de primera mano, algo que con estos testigos, comienza a cobrar mucho más peso. Si se confirman las declaraciones de estos altos cargos, se demostraría por primera vez que la humanidad no está sola en el universo Es cuestión de tiempo que alguien de con la prueba definitiva.