Se ha descubierto un nuevo dinosaurio herbívoro de la familia de los titanosaurios de 18 metros de largo y un peso de 14 toneladas. El animal, un saurópodo como informa El País, se trata de un animal que ha sido hallado en el Pirineo catalán y del cual se ha publicado su descripción en la revista Nature Ecology & Evolution. ¿Su nombre? Abditosaurus kuehnei.
Un enorme saurópodo que vivió en el Cretático superior y que era muy grande para la época
Este saurópodo vivió en el Cretácico superior hace 70,5 millones de años, y lo hizo en un paisaje muy distinto al paraje montañoso donde se hallaron los restos, justo en el célebre yacimiento Orcau-1, en el municipio de Isona i Conca Dellà, en la comarca del Pallars Jussà (Lleida).
Hay que destacar que en esta época tan lejana, Europa era un conjunto de islas con mares interiores, un vasto archipiélago en el que los Pirineos apenas empezaban a formarse y en el que el mar llegaba hasta la zona en la que se han encontrado los fósiles de este gigantesco dinosaurio. Un dinosaurio que habitó y se desplazaba por un enorme conjunto de playas, deltas y humedales con abundante vegetación y bosques.
Según los paleontólogos, el Abditosaurus kuehnei era un animal excepcionalmente grande para la zona y la época. Sus descubridores, miembros del Institut Català de Paleontologia Miquel Crusafont (ICP), el Museo de la Conca Dellà (MCD), la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), la Universidad de Zaragoza (UNIZAR) y la Universidade Nova de Lisboa (UNL), creen que este "reptil olvidado", es una auténtica rareza. La historia de este dinosaurio, y así lo indica su nombre, hace referencia a la larga historia de la investigación que ha conducido a la descripción de la nueva especie, remontándonos al 1954, año en el que el paleontólogo alemán Walter Kühne (1911-1991) excavó los primeros restos y los envió al Instituto Lucas Mallada, en Madrid.
El yacimiento se olvidó, los fósiles permanecieron archivados y estuvieron perdidos hasta en 1986, cuando se intentaron recuperar nuevas muestras. ¿Qué ocurrió? Pues que una gran tormenta hizo cancelar la extracción. Hasta 2012, no se volvieron a reabrir los yacimientos. Tras años sin nombre, el titanosaurio de Orcau recibía su espacio en la historia. Estos titanosaurios, últimos representantes de los saurópodos, vivieron en el Cretácico tardío (hace 100-66 millones de años) de lo que hoy es la península Ibérica y según los paleontólogos, fueron muy comunes en diferentes partes del planeta y ha destacado por tener grandes representantes como el como los argentinosaurios o los patagotitanes del más antiguo Cretácico inferior (hace 140-100 millones de años).
En comparación a otros saurópodos de la época, el Abditosaurus kuehnei es prácticamente un coloso. Es más grande y voluminoso que otras especies. "Los titanosaurios que solemos encontrar en el Cretácico superior de Europa tienden a ser pequeños o de tamaño medio como consecuencia de haber evolucionado en condiciones de insularidad", ha explicado Bernat Vila, paleontólogo del ICP que firma el artículo A titanosaurian sauropod with Gondwanan affinities in the latest Cretaceous of Europe junto a Albert Sellés, Miguel Moreno-Azanza, Novella Razzolini, Alejandro Gil-Delgado, Iñaki Canudo y Àngel Galobart.
Abditosaurus, subrayan los investigadores, supone un gran avance en el conocimiento de la evolución de los dinosaurios saurópodos al final del Cretácico, aportando una nueva perspectiva al rompecabezas filogenético y paleobiogeográfico de estos animales que ya afrontaban su extinción. La ciencia no para de descubrir especies de dinosaurios y restos de todo tipo, destacando carnívoros muy rápidos encontrados en nuestro país.