¿Qué tienen en común las cartas Pokémon y el coronavirus? En este acontecimiento tan particular que os traemos hoy, más de lo que parece a simple vista. La fiebre por el coleccionismo de las cartas Pokémon no tiene límite, y es a los fans de los monstruos de bolsillo no los detiene ni la pandemia a la hora de acercarse a su centro comercial favorito para comprar una nueva baraja de cartas. Sin embargo, la noticia que nos llega desde Gizmodo no es menos surrealista, y es que según informan un ciudadano de Dublin (Georgia) acaba de ser acusado por haber cometido un delito federal de fraude al tesoro público. El motivo no tiene desperdicio.
Vinath Oudomsine, el hombre en cuestión, solicitó uno de los créditos que ofrecen en EE.UU. a los empresarios para paliar las pérdidas por el coronavirus y se lo gastó en una carta de Pokémon. Sí, tal y como lo podéis leer. Oudomsine solicitó el préstamos EIDL (Economic Injury Disaster Loan) el año pasado.
Como os hemos destacado al principio, esta se trata de una iniciativa tomada por el gobierno estadounidense para ayudar a las pequeñas empresas a cubrir sus gastos cotidianos durante los meses más complicados de la pandemia. Oudomsine consiguió el préstamo tras asegurar que tenía una pequeña empresa con diez trabajadores a su cargo; le concedieron un crédito con un valor de 85.000 dólares.
Desconocemos de qué carta se trataba
Según una reciente investigación, el individuo no es dueño de ninguna pequeña empresa e invirtió 57.789 de esos 85.000 dólares en una única carta de Pokémon. Es por ello que ha sido acusado de fraude y, en caso de que la demanda prospere, se enfrenta a una pena máxima de 20 años de cárcel y a una multa de 250.000 dólares. ¿De qué carta se trataba? Por desgracia, la información sobre esta no ha sido revelada, aunque seguramente se tratará de una edición muy limitada y exclusiva con ese precio tan desorbitado.