Tras largas colas, hemos podido probar en el E3 alguno de los juegos de PlayStation 3 que Sony está desarrollando, mostrados en la conferencia previa al evento, y luego en versión jugable en el propio show.
Uno de ellos fue Resistance: Fall of Man, anteriormente conocido como I8, un juego de acción en primera persona de Insomniac Games ambientado en una línea temporal alternativa, donde el mundo ha sido invadido por aliens (o mutantes), no ha habido Segunda Guerra Mundial, y Gran Bretaña es el único lugar libre en esta Europa alternativa de 1951.
Resistance es un juego de primera persona clásico en su planteamiento, donde tendremos que hacer frente a una serie de enemigos monstruosos, algunos de ellos con puntos débiles, acompañados por otros soldados sobre los que no tendremos control, pero sí cierta decisión sobre su destino, pudiendo salvarles de la muerte en algunas ocasiones cuando estén a punto de ser eliminados por un enemigo.
El repertorio de armas será aparentemente extenso y consiste en armas normales modificadas, como una escopeta capaz de atravesar obstáculos, o una pistola con la que podremos marcar objetivos para que luego las balas les impacten automáticamente. Las armas eran un tanto "ciencia ficción", como si a partir de cierto punto en la historia alternativa del juego la evolución del armamento hubiese ido por otro camino, y son uno de los puntos fuertes del juego.
Visualmente el juego luce muy bien, mostrando grandes escenarios destruibles por la acción del juego; nada tremendamente impresionante, como podría esperarse del juego, aunque sí sólido técnicamente, sin ralentizaciones en el motor gráfico, y con ciertos detalles de física bien conseguidos. Contará también con un modo multijugador que se podía probar en la demo, y que en la versión final, prevista para salir con la consola en noviembre, soportará hasta 32 jugadores.
