Arkane Austin, el estudio responsable de Prey y codesarrolladores de Dishonored, continuaba trabajando en Redfall hasta el cierre de la empresa, junto a Tango Gameworks y otras compañías de Bethesda, comunicado por Microsoft el 7 de mayo internamente a sus empleados y difundido por varios medios. El equipo americano estaba desarrollando una actualización para permitir jugar sin conexión a internet además de varios contenidos adicionales, informa IGN.
La actualización que eliminaría la obligatoriedad de estar conectado a internet para jugar a Redfall estaba planificada para mayo.
Arkane Studios ha explicitado que los servidores del videojuego de disparos con vampiros permanecerán activos, pero sin un modo offline el título quedará inoperativo si en el futuro Bethesda Softworks decide tirar del cable.
En marzo del año pasado, el director Harvey Smith dijo en una entrevista con Eurogamer refiriéndose al modo offline: "Escuchamos. Ya hemos empezado a trabajar para abordar esto en el futuro. Tenemos que hacer algunas cosas como encriptar tus partidas guardadas y hacer un montón de trabajo de interfaz. Así que estamos estudiándolo (no puedo prometer nada), pero estamos estudiándolo y trabajando activamente para arreglarlo en el futuro".
El medio norteamericano añade que la actualización de pago que añadiría dos personajes jugables adicionales entre otras novedades incluidas en el Hero Pass estaba planeado para noviembre, un año y medio después del estreno original de Redfall, que nunca más recibirá contenido, funciones ni correcciones de errores. El estudio compensará por el DLC no publicado que estaba a la venta e incluido en la versión más cara del juego.
La única gran actualización: 60 FPS en consolas
La única actualización grande de Redfall se publicó en octubre del año pasado para permitir jugar con una fluidez de 60 fotogramas por segundo en Xbox Series X/S; también optimizaba la versión para PC y se realizaron varios ajustes de equilibrio. Sin embargo, no ha habido nuevo contenido relevante desde el estreno. Pete Hines, entonces vicepresidente de Bethesda Softworks, dijo en septiembre que apoyarían el título para convertirlo en un "buen juego".