La Fundación de la Historia de los Videojuegos califica de "terrible" la situación de la no disponibilidades de muchos títulos y la compara con la disponibilidad de grabaciones de audio anteriores a la Segunda Guerra Mundial en un reciente estudio. Según ha reportado la fundación, los juegos publicados antes de 2010 no son lo suficientemente accesibles para los jugadores modernos, y es que sólo el 13 % de los lanzamientos están disponibles para su compra en cualquier formato, ya sea digital o físico.
Como decíamos, en el estudio se ha comparado la disponibilidad de los títulos con cierta antigüedad con la tasa de disponibilidad de las películas mudas, la cual se sitúa en torno al 14 %, y las grabaciones de audio anteriores a la Segunda Guerra Mundial, de las que solamente se puede acceder a un 10 % o menos. Es importante destacar que el estudio se ha centrado en los juegos lanzados en Estados Unidos antes de 2010, además de que en él se han incluido sistemas clásicos como PlayStation 2, Game Boy, Nintendo 64 e incluso el Commodore 64.
"Imagina que la única forma de ver Titanic fuera encontrar una cinta VHS usada y mantener tu propio equipo antiguo para poder verla", explica Kelsey Lewin, miembro de la Fundación de la Historia de los Videojuegos. "Y qué pasaría si ninguna biblioteca, ni siquiera la Biblioteca del Congreso, pudiera hacerlo mejor: podrían conservar y digitalizar ese VHS de Titanic, pero tendrías que ir hasta allí para verlo".
Algunos ejemplos del problema de disponibilidad
Entre otros ejemplos, el estudio cita el famoso shooter Goldeneye 007 de Nintendo, una obra que ha sufrido a lo largo de los años varios problemas -sobre todo relacionados con derechos de autor- que han dificultado su comercialización en sistemas modernos. Como bien sabréis, no ha sido hasta hace relativamente poco que se ha incorporado a la suscripción de Nintendo Switch Online + Paquete de Expansión. Otro ejemplo que se cita es el de No One Lives Forever, un FPS que tiene tres titulares de derechos de autor y que actualmente se encuentra en una especie de limbo porque no es´ta claro quién posee los derechos sobre la propiedad intelectual.
