Durante los últimos años nos hemos acostumbrado a los grandes movimientos económicos en el mundo de los videojuegos, con diferentes compañías comprando (o absorbiendo) estudios más pequeños que pasan a formar parte de una empresa mucho mayor.
Una de las compañías más activas en este sentido desde hace ya mucho tiempo es SEGA, el gigante japonés que tras decir adiós al mercado de las consolas ha reforzado de lo lindo su papel como desarrolladora y distribuidora de videojuegos adquiriendo todo tipo de grandes estudios como Atlus, Creative Assembly o Relic Entertainment.
SEGA va a por los creadores de Angry Birds
Ahora el nuevo movimiento de la emblemática compañía japonesa pasa por adquirir Rovio, creadores de Angry Birds, una compra que según el Wall Street Journal está muy cerca de materializarse por la que SEGA pagaría unos 1000 millones de dólares para hacerse con el estudio finlandés y todas sus licencias.
Si las negociaciones van por bien camino y nada se retrasa o se rompe a última hora, la operación se cerraría la semana que viene y daría a SEGA mucho peso en el mercado de videojuegos para móviles en el que los japoneses ya han mostrado sus deseos de expansión en el pasado.
Además, debido a las grandes licencias que posee SEGA, bajo su mando Rovio podría convertirse en un estudio encargado de llevar estas grandes marcas a dispositivos móviles con distintos videojuegos o experiencias.
Sega statement on this: "No formal decision has been made regarding a deal. Sega continues to consider how to best enhance its corporate value." https://t.co/8DIvlaxUvX— Stephen Totilo (@stephentotilo) April 15, 2023
Eso sí, después de que Wall Street Journal sacase esta información, SEGA ha emitido un breve comunicado en el que no la niega pero apunta a que aún "No se ha tomado ninguna decisión formal con respecto al acuerdo. SEGA continua evaluando como mejorar su valor corporativo".
Además, hay que aclarar que pese al éxito inicial de Angry Birds, Rovio no ha podido replicar más ese triunfo y los finlandeses se han encontrado en más de una ocasión con graves problemas financieros e incluso este mismo año negociaron con Playtika Holding Corp. para una posible compra, con esta empresa con sede en Israel dispuesta a pagar unos 800 millones de dólares, acuerdo que se acabó rompiendo en marzo, momento en el que parece que SEGA entró en acción para hacerse con Rovio.