Sony ha revelado sus datos financieros correspondientes al último trimestre -terminado el 30 de junio- y durante la sesión de preguntas y respuestas apareció la posibilidad de subir el precio de PlayStation 5, que se mantiene el mismo que en su lanzamiento -noviembre de 2020-, es decir, 499,99 euros para la PlayStation 5 con lector de discos y 399,99 euros en la Digital Edition, sin lector.
La duda tiene sentido porque Sony ha subido los precios en Japón de varios de sus productos electrónicos, como cámaras, reproductores Blu-ray, auriculares y más. Todas las compañías electrónicas sufren la presión económica de fabricación, distribución y la escasez de suministros, por lo que en lugar de bajar el precio de una consola -que es lo habitual después de cierto tiempo- podría incluso subir. Meta Quest 2 anunció por ejemplo esta semana que subiría su precio 100 dólares.
"Sobre la posible subida de precio de PlayStation 5, en este momento no hay nada específico que pueda compartir sobre precios" respondió el director financiero de Sony, Hiroki Totoki, sobre planes de la compañía para subir su valor. No responde afirmativamente, pero tampoco queda descartado.
Los analistas creen que los productos electrónicos subirán de precio
Varios analistas creen que el precio de los productos con semiconductores experimentarán una subida por el incremento de los costes de chips, y aunque algunas compañías han soportado la subida durante un tiempo, la perspectiva de una crisis larga provocará que el coste se traslade a los consumidores. Glenn O’Donnell de la firma Forrester estima que los precios de los chips crecerán entre un 10 y un 15 % durante el próximo año.
"Los fabricantes de chips sufren su propio incremento por los problemas de suministro que se han agravado por la guerra en Ucrania -un país que exportaba materiales- y la demanda se mantiene alta mientras que los componentes son escasos. Los precios de la energía también suben, incluyendo la electricidad. La fabricación de chips requiere una enorme cantidad de energía", dice O’Donnell. Al final, ordenadores, vehículos y multitud de dispositivos electrónicos subirán de precio: "Los márgenes ya están ajustados en estos productos, así que no tienen otra elección".
Totoki señaló que hay dos grandes problemas para producir tantas consolas como desearían. Uno es el de los componentes y su disponibilidad, y el otro la cadena de suministros. "Con la disponibilidad de piezas y componentes hay muchas mejoras, por lo que estamos esperanzados y somos bastante optimistas al respecto.
En cuanto a la interrupción de la cadena de suministro fue un impacto en el primer trimestre [del año fiscal]. El volumen de ventas de hardware fue bastante menor de lo que esperábamos a principios de año, por lo que la interrupción de la cadena de suministro es algo que esperamos que se solucione por completo".
