La tormenta sigue sacudiendo las oficinas de Activision Blizzard. Esta semana un artículo publicado en The Wall Street Journal acusaba a Bobby Kotick, CEO de la compañía, de maltrato "dentro y fuera" de la firma. Se dice que el ejecutivo era consciente de los casos de abusos y acoso, y que los habría estado ocultando durante estos años. En el día de ayer vimos como Dan Bunting, veterano de Treyarch, dejaba las oficinas luego de que se conociera que abusó de una empleada en 2017. Las reacciones se han repetido por toda la industria. Jim Ryan, jefe de PlayStation, también ha abordado la situación en un correo electrónico enviado a sus empleados donde critica la postura y respuesta de Activision.
Desde PlayStation cargan contra Kotick y Activision
En Bloomberg señalan que el jefe de PlayStation, Jim Ryan, ha enviado un correo electrónico a sus empleados después de que se publicara el artículo de WSJ.
Ryan sostiene que tanto él como su equipo ejecutivo estaban "descorazonados y francamente asombrados" después de leer que Activision "no ha hecho lo suficiente para abordar una cultura profundamente arraigada de discriminación y acoso".
"Nos dirigimos a Activision de manera inmediata después de que se publicara el artículo, para expresar nuestra profunda preocupación y preguntar cómo planean abordar las afirmaciones realizadas en él", escribió Jim Ryan. "No creemos que sus declaraciones en forma de respuesta aborden adecuadamente la situación". Hay que señalar que desde PlayStation han mantenido una larga relación con Activision, gracias a sus sagas como Call of Duty o Crash Bandicoot.
El martes, la asociación de trabajadores Activision Blizzard King Workers Alliance afirmó que organizarían una huelga y exigió la renuncia de Kotick. "Hemos instituido nuestra propia Política de Tolerancia Cero", escribió. "No seremos silenciados hasta que Bobby Kotick haya sido reemplazado como director ejecutivo y continuemos manteniendo nuestra demanda original de poner en marcha una revisión de terceros por parte de una fuente elegida por los empleados". A la petición de la dimisión se han sumado también varios accionistas. La junta directiva, por su parte, ha mostrado su apoyo a Kotick provocando que las acciones se desplomen.
Lo cierto es que Kotick ya atraviesa una investigación paralela, aparte de las que se están realizando sobre los casos de abusos: la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), agencia del gobierno estadounidense, también está poniendo la lupa en si Kotick ocultó estos hechos también a los inversores. Una firma de abogados igualmente está realizando las indagaciones pertinentes.
