Call of Duty es una de las sagas de shooters más conocidas del mundo que cuenta con millones de jugadores que, año tras año, llenan los servidores de la entrega de turno o que disfrutan de Warzone enfrentándose los unos contra los otros en intensas partidas que, por desgracia, en muchas ocasiones se ven alteradas por los tramposos, comúnmente conocidos como chetos, que se aprovechan de programas de terceros para ver a través de las paredes o mejorar su puntería.
Activision sabe que el de los tramposos ha sido un problema grave con las últimas entregas de Call of Duty y lleva un tiempo buscando y desarrollando una solución bautizada con el nombre de Ricochet, un nuevo sistema antitrampas que se estrenará durante las próximas semanas para mejorar las partidas multijugador y eliminar al mayor número posible de tramposos de los servidores.
Este sistema "antichetos" creado por un equipo especializado que se ha dedicado a desarrollar esta tecnología cubre varias facetas del juego, comenzando por una primera fase de integración en Call of Duty con nuevas herramientas del lado de los servidores para detectar con mayor facilidad a los tramposos con procesos de investigación mejorados para acabar con ellos y actualizaciones para reforzar la seguridad de las cuentas.
La primera fase de este sistema antitrampas se lanzará junto con Call of Duty: Vanguard y, más adelante, también llegará a Call of Duty: Warzone junto a la actualización del Pacífico con la que se estrenará un mapa totalmente nuevo para el battle royale.
Un controlador a nivel kernel que solo estará activo mientras se ejecuta Call of Duty
La "segunda fase" de Ricochet llegará en compañía de un controlador a nivel kernel que, para explicarlo de forma rápida es el "núcleo" del sistema operativo que comunica el hardware y el software de nuestro PC, por lo que el controlador está integrado en el "corazón" de nuestro sistema tal y como ocurre con otros antitrampas como, irónicamente, el Vanguard de Valorant.
Este controlador se encargará de comprobar el software y las aplicaciones que intentan interactuar y manipular Call of Duty para detectar posibles trampas en nuestro equipo y, para proteger la privacidad de los jugadores, este "driver" funciona sólo mientras se juega a Call of Duty en PC activándose cuando arrancamos el juego y cerrándose al salir de él, por lo que no estamos ante un controlador que funciona de forma permanente como ocurre con el juego de Riot.
El driver que forma parte de Ricochet llegará primero a Warzone a la par que la actualización del Pacífico y, a diferencia de la "fase 1", se integrará más adelante a Call of Duty: Vanguard en una fecha aún por concretar.
Como podéis imaginar este controlador solo se instalará en la versión para ordenadores de Call of Duty (mientras que la que hemos denominado como Fase 1 también está presente en consolas) aunque los jugadores de PS5 o XSX también podrán disfrutar de sus ventajas gracias a poder reducir con él el numero de tramposos en PC.
