Sony ha presentado ante inversores los resultados de su tercer cuarto fiscal de 2020, un período que terminó el 31 de diciembre por lo que incluye el lanzamiento mundial de PS5 -que a España llegó el 19 de noviembre- y que refleja tanto las ganancias como las pérdidas que la compañía ha tenido durante ese tiempo en sus principales departamentos, incluyendo el de videojuegos.
Uno de los datos más interesantes que podemos extraer de este informe es que Sony está perdiendo dinero con la venta de PS5. Esto es el resultado de haber marcado el "precio estratégico por debajo de los costes de fabricación", según el propio documento que podéis ver en la página oficial de la compañía. Es decir, cuesta más la fabricación de una PS5 de lo que Sony obtiene por venderla, algo que ya apuntaron algunos inversores como Michael Patcher.
No se han dado cifras concretas al respecto de estos datos, por lo que no sabemos cuánto vale la fabricación de la consola de nueva generación de la compañía: podemos hacernos una idea, por su precio de venta recomendado, de que el coste de producción estaría por encima de los 499 € en la versión estándar y de los 399 € en la Digital Edition, el modelo que no incluye lector de blu rays por su enfoque a los juegos digitales.
Aun así, Sony ha obtenido "el mejor trimestre" en su división de videojuegos
Sin embargo, y aunque la compañía también haya perdido dinero de los costes "generales y administrativos" derivados del lanzamiento de PS5, el déficit apena se ha notado porque Sony ha recibido ingresos provenientes de otros servicios: ha aumentado el número de juegos y contenido digital para PS4 y PS5, han subido las suscripciones a servicios de PS Network (sobre todo PS Plus, donde ya hay 47,4 millones de miembros) y la venta de consolas PS4 tiene ahora un margen de beneficio mucho más amplio.
De este modo, y pese a haber vendido 4,5 millones de PS5 con pérdidas, la compañía ha obtenido un "incremento significativo" en sus ingresos con respecto a los del mismo trimestre del año anterior. Como decía el analista Daniel Ahmad, "ha sido el mejor trimestre de Sony para su división de juegos. El año fiscal será el mejor de Sony por ingresos y beneficios. Sus previsiones también han aumentado para el año fiscal, principalmente por las fuertes ventas de juegos y servicios".
