Watracio Walpurgis, la berenjena vampiro, llegó en el primer el primer capítulo de Baobabs Mausoleum a un extraño pueblo, Flamingo's Creek, en el que se adentra en la segunda parte de la trilogía, llamada Baobabs Mausoleum Ep.2: 1313 Barnabas Dead End Drive, que se convierte en "el corazón del juego, en el que exploras el pueblo libremente. El primer capítulo era lineal, aunque había minijuegos en forma de sketches; en el segundo te lo puedes montar como quieras", explica el autor del juego, Jacob Jazz momentos antes de la presentación del juego en el Showroom de Nintendo en Madrid.
Influencias de The Legend of Zelda y Twin Peaks
Esto supone explorar el pueblo, conocer a sus gentes, desentramar lo que sucede en él. Es en este capítulo donde más se aprecia la influencia de la serie de televisión "Twin Peaks" en la serie, aunque también hay una clara inspiración en juegos como The Legend of Zelda: Majorah’s Mask: "los personajes tienen sus propios horarios, tú decides con quién hablas, algunos te dan pistas y otros simplemente te marean", dice Jazz.
Baobabs Mausoleum "es un juego muy personal, lo que llamo un ZZZ, es mi propio
Una ventana abierta al pueblo
En el segundo capítulo el juego se acerca más a una aventura gráfica que se entiende en sí misma en la que hay una historia troncal -relacionada con una camarera que desaparece- aunque hay relativa libertad para ir descubriendo más subtramas por el pueblo, como si se abriera una ventana para ver lo que se cuece en Flamingo’s Creek. "El protagonista no es Watracio, sino el pueblo", explica Jazz .
Pese a que el humor está presente de múltiples maneras en los dos primeros capítulos, su creador sostiene que el juego es un drama que se revelará en el tercer episodio: "a veces digo que es autobiográfica, que no se queda solo en la locura y los chistes", dice, y define ese último capítulo de la trilogía como "una locura, casi experimental" que tiene previsto el lanzamiento también este año.
Una valoración de casi 7 en Metacritic
Jazz comenzó la creación de la trilogía Baobabs Mausoleum hace casi cuatro años, aunque el primero estuvo trabajando en él a tiempo parcial ya que formaba parte de otro estudio. Los últimos tres años se ha dedicado por completo a desarrollar casi todos los aspectos del juego en lo que describe como un proceso "entre increíble y horroroso, de una forma equilibrada. La respuesta al capítulo 1 era indispensable para saber si terminaba, pero a la gente le ha gustado"; de hecho, tiene una valoración de 6,9 en Metacritic.
El trabajo en los dos últimos capítulos se ha desarrollado casi a la vez "aunque a veces tengo bajones, porque trabajo solo y a veces esto afecta un poco al coco, pero los bajones me dan cuando no estoy trabajando, cuando estoy con el juego me siento vivo, sobre todo con la parte creativa, no tanto con la programación", admite Jazz. Al igual que en la música, en la programación ha tenido apoyo externo;en el caso del port a Switch, a cargo del estudio Western Egg.
El primer juego editado por Zerouno
El primer capítulo de la trilogía, Baobabs Mausoleum Ep. 1: Ovnífagos Don't Eat Flamingos fue el primer juego editado por Zerouno Games. Dos años después la editora ha pasado de tener cinco empleados a 15 gracias a una subvención de Red.es y ha creado una línea, Forsaken Games, con títulos rápidos y de jugabilidad adictiva con un precio inferior a cinco euros. Como Zerouno ha editado juegos como Eternum Ex o Bleep Bloop.