A principios de año, Bungie anunciaba que rompía su relación comercial con Activision. La noticia sacudió los mercados, causó una oleada de reestructuración interna dentro de la empresa de Call of Duty y puso de nervios a los inversores. Catalogada como una separación de muto acuerdo, ahora sabemos cuál fue el coste real de aquella decisión: 164 millones de dólares.
164 millones de dólares y los derechos de la saga Destiny
Ha sido Activision, a través de un documento proporcionado a los accionistas, la que ha reconocido la cifra exacta. La compañía detalla que ha recibido 164 millones de dólares como resultado de "la separación de mutuo acuerdo con Bungie". Según relata en el informe, esto se traduce en que "Activision ya no tendrá derechos comerciales ni obligaciones relacionadas con la saga Destiny, algo que ya comunicó la propia Bungie cuando comunicó la noticia.
"Una vez confirmado el acuerdo de terminación, la compañía reconoce una nueva cifra de 164 millones de beneficio", explicaba Activision. Por su parte, Spencer Neumann, jefe de operaciones financieras de Activision, ha confirmado que el ente ha ingresado aproximadamente 397 millones de dólares gracias a las compras in-game de videojuegos como Call of Duty: Black Ops 4 y Destiny 2: Los Renegados, un título que aunque no ha cumplido sus expectativas financieras, sigue ayudándolos a ingresar dinero.
La decisión en Bungie sentó muy bien. Cuando los directivos comunicaron al propio estudio la intención de finalizar el acuerdo con Activision, se recibió con aplausos y vítores. Curiosamente, Bungie también recibió con entusiasmo la separación de Microsoft. Ahora, con un horizonte distinto, el equipo quiere mantener su MMO con vida y cambiar el plan de lanzamiento y la estructura de actualización de Destiny, afianzándose en la comunidad que lo ha ayudado a ser uno de los títulos más jugados en consolas y PC.
