Valve ofrece a los desarrolladores independientes una plataforma digital como es Steam para que puedan ofrecer sus productos a los jugadores. Si bien es cierto que esta es una vía ideal para que aquellos equipos de desarrollo más pequeños puedan dar salida a sus juegos, hay que señalar que algunos consideran que la compañía debería cambiar su enfoque.
La mayoría de los desarrolladores ha expresado cierto grado de "frustración" ante la política de Valve de "no intervención" cuando se trata de ayudar a promocionar juegos para que encuentren una audiencia.
Valve en el punto de mira
Desde Polygon, Tim Colwill ha hablado con unos 20 desarrolladores acerca de sus experiencias con Steam. La mayoría se siente insatisfechos con las prácticas de la compañía... llegando a cuestionarse si la plataforma de Steam merece realmente la pena.
"Parece que Valve espera que los juegos menos populares simplemente dejen de existir", dijo un desarrollador a Colwill.
"Pero no les importa cobrar su parte de esas pequeñas ganancias cuando fracasan".
Y es que Valve se queda con un 30% de las ganancias que generan estos juegos. Por otro lado, los desarrolladores también se quejan de que descubrieron que algunos de sus juegos se venden en ciertos mercados con un descuento del 30% al 60% del precio establecido en dólares. Si bien es cierto que pueden reajustar los precios manualmente, es complicado monitorear las variaciones de 40 monedas diferentes. Se quejan de que eso podría acarrear pérdidas de ventas si se equivocan al actualizar los precios.
Otros desarrolladores se quejaron de que el sistema de algoritmo que se basa en los análisis de Steam es injusto. Este mecanismo ayuda a los jugadores a encontrar títulos que merecen la pena o que encajan con sus gustos. Sin embargo, los juegos tienen que mantener una puntuación del 70% como mínimo para que el juego se considere "positivo". Señalan que Valve no hace nada contra aquellas reseñas que son un evidente trolleo o solicitudes de apoyo técnico.
En este sentido, los desarrolladores creen que, a cambio de ese 30% que retiene Valve, cabría esperar un respaldo más sólido por parte de la empresa.
Sin embargo, no todos los desarrolladores piensan igual. Morgan Jaffit, que trabajó en la creación de Hand of Fate, señaló que el sistema de análisis es "generalmente justo"; Paul Turbett, de Battlestar Galactica: Deadlock añadió que tanto las críticas positivas de Steam como las negativas son útiles a la hora de determinar en qué trabajar para mejorar los juegos.