Dreamcast fue una consola adelantada a su tiempo en muchos aspectos, y uno de ellos fue la fuerte apuesta por la estandarización del internet. No fue la primera en hacerlo, pero tanto a nivel de diseño como a nivel de catálogo las intenciones de Sega eran claras. Dentro de las limitaciones lógicas de un ciclo de vida tan corto, Dreamcast consiguió tener varios que, en cierto modo, fueron pioneros de esta democratización del juego en línea, con ChuChu Rocket! siendo, quizás, uno de los más populares.
¿Hacia dónde iba el cohete?
ChuChu Rocket! fue un pequeño pero exitoso experimento del Sonic Team con el que probar las funciones de red de Dreamcast, y lo que se aprendió durante su desarrollo al respecto se aplicó en títulos posteriores. De hecho, este era el primero de una serie de juegos del estilo, diseñados en torno al multijugador tanto local como online, y tras su lanzamiento Sega comenzó a trabajar en otros proyectos similares.
En este caso, el Sonic Team estaba centrado en otros proyectos, y sería dori dock quien se encargaría del siguiente título. La verdad es que no hemos sido capaces de encontrar mucha información sobre este desarrollador, por lo que quizás fue un pequeño equipo interno creado para este título en concreto. ¿Qué título? DeeDee Planet; que, aunque hayamos hecho la broma, no es disparatado pensar que buscase crear esa conexión en el título que compartirían todos los títulos de la serie.
De manera similar al juego de Yuji Naka, DeeDee Planet también ofrecía un estilo gráfico muy personal, pero a la vez opuesto, centrándose en colores oscuros que dominaban sobre los más brillantes, que servirían para identificar a los jugadores. De igual modo, también tenía este aire surrealista y experimental, dejando atrás a los ChuChu en favor de los DeeDee, unas criaturas igualmente extrañas, pero robóticas en esta ocasión.
Una fórmula conocida
A nivel jugable no parecía ser nada revolucionario, con una propuesta similar a la de Worms, aunque con un pequeño giro. Además de ser en tiempo real, pudiendo movernos y disparar constantemente, cada planeta –es decir, cada escenario– tenía unas propiedades diferentes. Uno se destruiría con cada impacto de nuestras bombas, otro se regeneraría bajo nuestros pies, otro sería líquido...
Aunque estaba diseñado para, principalmente, jugarse a través de internet y potenciar esta característica de la consola, gracias a los cuatro puertos de Dreamcast, DeeDee Planet también podía jugarse de manera local, que es como se demostró en el Tokyo Game Show del año 2000. La versión que se llevó al evento estaba prácticamente terminada, ya que el juego tenía una fecha de lanzamiento prevista de 2001.
El cohete vuelve a la tierra
DeeDee Planet se terminó a tiempo, pero un error de red descubierto a última hora hizo que no se llegara a comercializar. Según explicó uno de los desarrolladores, el problema no era del juego, por lo que se supone que podría tener algo que ver con los servidores o el servicio de red de Sega. Al final, por una razón u otra, la compañía nipona decidió que no merecía la pena solucionar el problema, y el título de dori doki cayó en el olvido.
Por suerte, la incansable comunidad que lucha por preservar la historia de los videojuegos, ha conseguido recuperar una beta completamente funcional, que nos permite, 20 años después de su cancelación, disfrutar de otro de esos títulos tan originales que han hecho de Dreamcast una de las consolas más queridas y recordadas. Para más información o para descargar este título, podéis pasaros por The Dreamcast Junkyard.