A pesar de que muchos jugadores no habían escuchado hablar de la saga Ninja Gaiden hasta la pasada generación, cuando apareció una entrega en la primera Xbox, lo cierto es que la serie tuvo su origen en la primera Nintendo (también conocida como NES). Esto se debe a que la serie se mantuvo desaparecida durante muchos años y no fue hasta 2004 cuando Itagaki junto con el Team Ninja la recuperó, tomando como señas identificativas una gran dificultad y una buena cantidad de sangre y desmembramientos. Desde entonces hemos tenido tres entregas numeradas y alguna otra más que incorporada la coletilla "Sigma" y que eran versiones mejoradas de los originales.
Ninja Gaiden 3, que salió en marzo de este año se desarrolló sin Itagaki, y sea por esta razón o por otros motivos, lo cierto es que el juego fue recibido de forma bastante tibia, ya que a pesar de no tratarse de un mal juego, sí le faltaba algo de chispa y una mayor complejidad, pues se había visto demasiado simplificado respecto a sus predecesores.
Con las críticas de los jugadores en mente, sus desarrolladores han trabajado en la versión de Wii U que llegará junto con la consola y que trae algunas interesantes novedades.
Ayane se incorpora y trae otras novedades
La primera novedad es la presencia de Ayane como personaje seleccionable y que se sumará a Ryo. En la demo que jugamos podíamos seleccionar entre los dos, teniendo cada uno su propia fase, aunque no sabemos si esto será así durante el juego (es decir, que cada uno tendrá sus propios niveles) o podremos jugar con uno u otro indistintamente. Además de esta incorporación, se han mejorado ciertos aspectos, como el regreso de los desmembramientos de los enemigos (que no estaba presente en el Ninja Gaiden 3 original), seis nuevas armas, tres nuevos ninpos o mejoras en la inteligencia artificial de los enemigos.
Otra novedad es que en esta ocasión podremos acumular karma para poder gastarlo y así poder mejorar nuestras armas y ninpos, dotando al nuestro personaje de cierta progresión, algo que se echaba de menos en el original. En cuanto al uso de la pantalla táctil del mando de Wii U se limitan a poder cambiar de arma, activar el sentido ninja o poder ver las distintas habilidades, así como para poder activar el poder especial que podremos usar al recargar la barra, por lo que realmente no hace un uso intensivo de esta. A nivel jugable, se han hecho algunos cambios, como que la barra de vida ya no se recarga tras cada combate y diríamos que la respuesta del control ha mejorado, aunque tendríamos que jugar más a fondo para estar seguros.
Gráficamente el juego se ve igual de bien que en las otras versiones. Es muy rápido y con una gran cantidad de enemigos en pantalla sin que el juego se resienta en ningún momento. El diseño de personajes y escenarios, sigue siendo bastante genérico, aunque no era algo que esperásemos que cambiasen para esta versión. Os recordamos que es más sangriento que el original, ya que han regresado los desmembramientos.
Parece que Ninja Gaiden: Razor’s Edge mejora alguno de los aspectos que se criticaron del original y aunque no parece que vaya a suponer un cambio drástico, se agradece el esfuerzo por mejorar el juego. Por supuesto, hasta que no tengamos el juego en nuestras manos y no veamos como han integrado estos cambios dentro del juego no podremos valorarlo adecuadamente, pero creemos que en cualquier caso estas mejoras son bienvenidas y harán del juego una mejor experiencia.