Este juego de acción en primera persona que Ubisoft está desarrollando para Wii se ha ganado una bien merecida fama al combinar armas de fuego y espadas de manera que pueda aprovechar múltiples funciones del mando remoto de Wii, y puede ser uno de los títulos más importantes del lanzamiento de la consola, por no decir de su catálogo, aunque parece que la compañía ha tenido algunos problemas aquí y allá afinando el control.
En la nueva demo que hemos podido jugar en Londres (que corrige múltiples fallos que fueron extensamente comentados en su momento con respecto a la del E3 2006), Ubisoft ha mejorado notablemente el control, principalmente incluyendo tres niveles de sensibilidad que buscan adecuarse al estilo de cada jugador.
El menos sensible hace que el puntero se mueva tan poco a poco que sea como jugar a un título de pistolas (como Time Crisis); el más sensible, lo equipara a un ratón de ordenador bien afinada en el que con un sutil movimiento de muñeca acaparemos todo el campo visual; el de en medio, como indica su nombre, se queda a medio camino de ambos.
Quizás por las prisas, ninguno de los tres sistemas me resultó del todo convincente, aunque desde luego para mi estilo de juego el que mejor me funcionó fue el de mayor sensibilidad; otros jugadores se lucían con el menos sensible, así que el espectro de jugadores que quedará satisfecho (aunque sea con un poco de práctica) es amplio. Por desgracia, los gráficos siguen sin lucir como en algunas de las imágenes distribuidas (diría que en esta demo se han centrado únicamente en las mejoras del control, lo que, por otro lado, me resulta completamente satisfactorio), y tiene una tasa de imágenes por segundo algo lenta comparado con títulos como Call of Duty 3 o Metroid Prime 3, aunque a nivel visual no está necesariamente por encima de estos.
Había, asimismo, varios fallos que hacían que el control se volviese loco por unos segundos, pero esto es debido a que estamos hablando de una versión incompleta, que nos dejaba vendidos en algunos puntos del juego (como al matar a unos cocineros, por ejemplo). Esperamos que sean, como decimos, problemas de la demo que se puedan corregir de cara a la versión final del título.
Jugamos una sección en la que empezábamos en una especie de almacén industrial que ofrecía buen nivel de interactividad, y que nos llevaba a la cocina con los hosteleros asesinos, aunque lo más divertido era cargarse el entorno, como con unos barriles explosivos o tirando de metralleta hecha de oro (dañaba la vista, pero qué bien se disparaba). Con el pad digital del mando remoto de Wii podemos cambiar de arma fácilmente, accediendo a la Uzi en segundos, por ejemplo.
Pudimos jugar en un entorno de aire más japonés, donde optamos por usar la espada, que respondió muy bien a los movimientos del mando de Wii. Desde luego, parece que funciona mejor que el tema de las pistolas, aunque, eso sí, con movimientos predefinidos, aunque ahora que hemos jugado por extenso (dentro de las posibilidades de un evento de este tipo) a Red Steel podemos afirmar que eso no le resta espectacularidad ni mucho menos.
Con algunos elementos todavía por resolver, Red Steel muestra un enorme potencial en Wii. De sus desarrolladores dependerá el resolver satisfactoriamente los obstáculos y ofrecernos, finalmente, un gran título de acción. Confiamos en ellos.