Los videojuegos y el anime siempre han estado muy unidos, y no son pocas las series que han dado el salto hasta los videojuegos, trasladando a los personajes animados en protagonistas de todo tipo de juegos. Uno de los animes más populares a nivel internacional y, que por tanto, ha tenido más apariciones en el mundo de los videojuegos, ha sido Dragon Ball. Sin duda son muchos los títulos de la saga que han aparecido en nuestras consolas, especialmente de su segunda parte, Dragon Ball Z, la mayoría de los cuales pertenecen al género de la lucha. Ahora nos llega para Wii un título ambientado en los inicios de la serie, cuando Goku era pequeño y buscaba las bolas de dragón. Hemos podido probar esta aventura con toques de plataformas y a continuación os contamos que nos ha parecido.
El juego nos cuenta el comienzo de la serie, cuando un Goku niño decidía salir en buscar de las bolas de dragón junto a su amiga Bulma. En su camino, se enfrentará al ejército Red Ribbon, que perseguirá el mismo objetivo que él y acabará luchando contra el malvado Piccolo. El juego promete ser muy fiel respecto al anime, ofreciéndonos momentos que resultarán muy familiares a los seguidores de la serie. Es cierto que habrá ciertas situaciones o localizaciones algo diferentes de cara a mejorar la experiencia jugable, así como enemigos que no aparecían ni en el manga ni en el anime, pero la historia del juego se mantendrá paralela a la del original.
La mecánica es bastante sencilla, presentando unos escenarios en dos dimensiones en los que podremos jugar con la profundidad (el llamado 2D y medio), muy similar a lo visto en el reciente Klonoa: Door to Phantomile. Según avanzamos por los niveles, deberemos ir acabando con los enemigos que saldrán a nuestro paso utilizando nuestros puños y nuestro bastón, así como ataques especiales de gran potencia. Aparte de los ataques cuerpo a cuerpo que realizaremos pulsando A, podremos saltar con B, recargar energía con C y engancharnos en ciertos elementos con Z, además de los mencionados ataques especiales de los que hablaremos algo más adelante.
En el rato que pudimos jugar, vimos que el juego es un "yo contra el barrio" sencillote con toques de plataformas. En estos momentos en los que deberemos saltar para alcanzar nuevas zonas, deberemos jugar además de con la profundidad, con nuestra habilidad para engancharnos sobre ciertos elementos que nos permitirán ir subiendo para alcanzar zonas más altas. Esto también será importante contra los enemigos, ya que en determinados momentos a estos les saldrán nos círculos azules (señal de que podemos engancharnos) y podremos lanzarnos contra ellos para golpearles. Esta mezcla de estilos funciona muy, mostrando un juego sencillo que nos pareció de lo más divertido. Hemos de decir que lo que jugamos fue el principio del juego, por lo que es posible que las mecánicas se compliquen o que haya nuevos movimientos.
Además de atacar con nuestros puños y nuestro bastón y saltar, tendremos ataques especiales que nos consumirán energía mágica. Esta energía se irá llenando poco a poco y nos permitirá lanzar potentes ataques, como la famosa onda vital. Para lanzar estos ataques (en la partida que jugamos sólo estaba disponible la mencionada onda vital) deberemos pulsar la cruceta, siempre y cuando tengamos suficiente magia. Tras esto, veremos como se sobrepone en la pantalla una viñeta de Goku preparando el ataque para, tras este guiño al anime, ver como nuestro protagonista lanza un potente ataque. A la hora de hacer este movimiento deberemos tener en cuenta que tendremos que estar bien orientados a nuestros enemigos, pues al poder jugar con las profundidades, es posible que el ataque pase por delante o por detrás del enemigo y no le acierte, con lo que habremos malgastado la energía mágica sin conseguir nuestro objetivo.
El juego se encuentra dividido en zonas o mundos que a su vez se dividen en fases. Estas fases tienen una duración relativamente corta y ocultarán en ellas varios tesoros, lo que sin duda animará a más de un a rejugarlas. Además, podremos recolectar dinero, aunque no pudimos llegar a ver para que servía. Al final de la primera fase que jugamos nos encontramos con un jefe final al que debimos vencer para avanzar, aunque no será el único con el que nos toparemos en nuestra aventura. Por lo que vimos, el truco para derrotar a estos enemigos finales será aprendernos sus rutinas y descubrir su punto débil, siendo bastante clásico en este sentido.
Gráficamente el juego es totalmente 3D, con un estilo muy cercano a la serie. La verdad es que el juego es muy agradable de verdad, con un estilo muy colorista y lleno de detalles. Puede que no sea ningún portento gráfico, pero encaja perfectamente con el estilo del inicio de la serie. Desde luego nos ha encantado lo que hemos visto, aunque tendremos que ir viendo como avanza en este apartado y la variedad que ofrece. También pudimos ver varias escenas de video que narrarán momentos de la historia con el motor del juego. Desde luego estas secuencias son todo un acierto, y recrean fielmente el estilo del anime.
La impresión que nos ha dado este Dragon Ball: Revenge of the King Piccolo a sido estupenda. Se trata de un juego sencillote (aunque quizás esta impresión cambie según avancemos por el juego) que promete gustar a cualquiera, especialmente si es seguidor de la serie. Su jugabilidad parece tremendamente divertida a pesar de su sencillez y esperamos que no acabe resultando repetitivo. Su apartado gráfico, aunque no es ningún prodigio técnico, encaja perfectamente con el estilo desenfadado y algo cándido del inicio de la serie, por lo que no podríamos estar más de acuerdo. Aunque no hemos podido probarlo tanto como nos hubiera gustado, ya estamos esperando poder probar más del juego, pues la primera impresión ha sido excelente.