Las adaptaciones al videojuego de licencias del manganime parecen haberse quedado en los últimos años en dos tipos de títulos: musou, juegos de lucha y aventuras de acción de bajo presupuesto. Hace un par de años, Bandai Namco y CyberConnect2 cambiaron la tendencia poniendo en manos de los jugadores lo que algunos llevaban lustros pidiendo con Dragon Ball Z: Kakarot, un RPG de acción protagonizado por Goku y compañía. Este One Piece Odyssey tiene el mismo objetivo de poner sobre la mesa un juego de rol con enjundia del que para muchos es el mejor shonen jamás creado.
ILCA, quienes han participado en el desarrollo de títulos tan dispares como Dragon Quest XI S, Ace Combat 7: Skies Unknown y Pokémon Diamante Brillante / Perla Reluciente, llevan un lustro trabajando en una historia propia protagonizada por los Sombrero de Paja amoldada a la estructura de un JRPG clásico. Eso es, con combates por turnos, relativamente lineal y con distintas zonas a explorar en lugar de ser un mundo abierto. En la gamescom 2022 hemos podido probar una demo breve de la que destacamos el interesante sistema de sus enfrentamientos.
Una aventura en una isla desconocida
One Piece Odyssey nos contará la historia de cómo Luffy, Zoro, Nami y compañía naufragan en una isla extraña y deben reunirse para conseguir escapar de ella. Las cosas no serán tan sencillas, claro. El Thousand Sunny pasa por otra penuria más, y parece que el descalabro del barco no ha sido casualidad. Así, los piratas más famosos del cómic japonés tendrán que colaborar con personajes inéditos, combatir a monstruos nuevos y desentrañar un misterio, todo ello supervisado por el propio Eichiro Oda.
La demo, sin embargo, no ahonda mucho en lo narrativo, aunque queda claro que no transcurre al principio de la trama, pues el grupo ya está bastante nutrido a falta de Zoro y Brook. El objetivo de Luffy, Usopp, Sanji, Chopper, Robin y Franky es ayudar a Nami, quien ha sido raptada por una suerte de gorila gigantesco, uno de los muchos animales extraños que habitan en una isla tan exuberante y paradisíaca como peligrosa.
La historia se desarrollará de manera lineal a través de niveles sucesivos, como en los JRPG más clásicos. Aunque habrá mazmorras que recorrer y por las que previsiblemente perderse, la parte central de la exploración se basará en avanzar por los escenarios de combate en combate, y de secuencia narrativa en secuencia narrativa.
Sin embargo, cada personaje tendrá su propia habilidad para la exploración. En el caso de Luffy, utiliza los poderes de la fruta Gomu Gomu y usa sus brazos elásticos a modo de gancho. Es una acción automática al pulsar el botón: no podemos balancearnos con libertad por el entorno. Parece más bien una mecánica sencilla para añadir algo de variedad al avance de modo que no se base simplemente en inclinar hacia delante la palanca, aunque quizá los poderes de otros personajes o escenarios de secciones más avanzadas profundicen más en esto.
Un sistema de combate por turnos con jugo
Donde sí parece haber bastante enjundia es en el sistema de combate por turnos, incluso en estos primeros enfrentamientos que funcionan a modo de tutorial. Si bien no es nada rompedor, sí que tiene mimbres para, en compases más adelantados de la aventura, ofrecer batallas que nos hagan pensar nuestros próximos movimientos.
En el campo de batalla, sin importar el número de enemigos, siempre habrá cuatro miembros de los Sombreros de Paja. En el turno de un personaje podremos cambiarlo por alguno de los otros piratas que están en la reserva. Esto es útil para usar un cambio de estado o un ataque potente que tenga otro de los compañeros de Luffy, pero sobre todo se aprovechará para sacar partido del sistema a lo piedra, papel, tijera con el que funcionan los ataques básicos, para hacer el mayor daño posible al rival.
Esos ataques básicos rellenan el indicador de PT, los puntos que se necesitan para usar las habilidades. Las hay que golpean con contundencia a un mismo enemigo, que afectan a varios adversarios a la vez, que inflige algún cambio de estado como quemaduras (también hay debilidades y fortalezas elementales), y que incluso pueden afectar a las distintas zonas del campo de batalla.
Esto último es lo que nos hace decir que el combate de One Piece Odyssey puede tener más jugo de lo que aparenta. El campo de batalla, sobre todo en los enfrentamientos más multitudinarios, puede dividirse en varias áreas. Los ataques normales solo pueden dirigirse a los adversarios del mismo área, y si se elige como objetivo a un enemigo en otra zona, el personaje en cuestión cambiará a esa otra área.
No es difícil imaginar combates contra varios enemigos con distintas resistencias elementales, con una combinación interesante de ese "piedra, papel, tijera", y con algún que otro adversario muy poderoso, que nos obligue a prestar atención constantemente al movimiento entre zonas. La base la tienen, otra cosa es que se acabe poniendo en práctica. También nos gustaría, por cierto, que se retocara un poco la interfaz para que comunique de forma más clara el orden de los turnos y otra información clave.
Un acabado visual que no termina de convencer
Hablando de interfaces, no podemos cerrar el texto sin hacer un comentario, aunque sea breve, sobre el apartado artístico. De la música de Motoi Sakuraba (Dark Souls, Tales of) poca queja tenemos. El estilo visual elegido tendrá sus defensores y sus detractores; es algo subjetivo, claro, pero nos habría gustado un estilo cel shading más fiel al cómic o al anime en lugar de este look tan tridimensional.
Eso sí, los personajes son muy expresivos tanto en las secuencias como en los combates, sobre todo al realizar técnicas especiales que llenan de efectos vistosos la pantalla, que ya de por sí desprende colores muy vivos, al menos en el pequeño escenario que hemos podido recorrer. Sin embargo, al menos en la versión alfa para PS5 que hemos probado, la calidad de las texturas nos ha parecido bastante pobre incluso para un título intergeneracional, y ciertos efectos ambientales tampoco dan la talla. Pero como decimos, se trata de una versión en desarrollo del título.
One Piece Odyssey quiere adaptar una de las grandes sagas del manganime a un género tan profundo como el JRPG, de la misma manera que hace unos años hizo Dragon Ball Z: Kakarot con el RPG de acción. De lo más importante en este tipo de títulos, la historia, sabemos más bien poco; pero el otro pilar del género, los combates, tienen la base para ofrecer una experiencia cuanto menos interesante. Lo descubriremos (si no hay ningún naufragio por el camino) en algún momento de este año cuando Bandai Namco lance el título para PC, PS5, Xbox Series y PS4.
Hemos escrito estas impresiones tras probar una demo en PS5 en la gamescom 2022.
