En los albores de la actual generación, Avalanche Studios sorprendió a propios y extraños con un título bastante fresco, lleno de buenas ideas y muy original. Nos proponía viajar a un paraíso tropical para desencadenar una revolución militar y política contra los señores del lugar. En el papel del agente Rico Rodríguez, nos veíamos envueltos en una tortuosa aventura llena de ritmos caribeños, playas de ensueño, selvas densas, armas y vehículos militares y coches de los años cincuenta. Sobre el papel, la primera entrega de Just Cause prometía mucho. Pero todo quedó en agua de borrajas. El control no era todo lo sensible que se requerría, las misiones podían resultar demasiado abiertas y repetitivas y adolecía unos cuantos problemas técnicos, haciéndolo poco jugable al cabo de unas horas.
Avalanche Studios, consciente de ello, ha estado tomando buena nota de las críticas y los posibles fallos y se ha propuesto enmendarlos todos en la secuela.
¿Estarán por la labor de hacerlo? ¿Estarán en el buen camino? Sin más, camaradas revolucionarios, os presentamos Just Cause 2.
Si algo puede definir a Just Cause 2 es el cambio. Si bien no cambiamos de protagonista (seguimos encarnando al agente de la CIA, Rico Rodríguez), si lo hacemos de localización, de motor gráfico y de inteligencia artificial. Dichos cambios son los pilares básicos de esta nueva entrega. El argumento del juego nos llevará a viajar a una pequeña isla del sureste asiático, llamada Panau. Tras la llamada de una ex-compañera de oficio, nos veremos envueltos una vez más en evitar una revuelta popular, asesinando al terrible dictador Baby Panay, intentando así no derramar más sangre civil. Muerto el perro, se acabó la rabia. Aún así, la CIA no respaldará la operación, considerándola peligrosa para la política internacional de la zona. Pero no pasará nada, pues Rico Rodríguez es un hombre de recursos. Y de mundo. Por eso, contaremos con la ayuda de varios amigos y compañeros de la Agencia, así como la de los lugareños, que desde la sombra, nos guiarán entre los más de 1000 objetivos repartidos durante el juego.
"Just Cause 2" promete muchísima más variedad que su anterior entrega a todos los niveles. Como os comentábamos, uno de los principales errores del primer juego era la excesiva reiteración de objetivos. Dicha repetición acababa hastiando al jugador en los primeros compases, haciendo injugable el título para la gran mayoría. Por eso, se ha hecho especial hincapié en elaborar objetivos y misiones secundarias divertidas, amenas y que logren complementar la oferta argumental del juego, haciéndolo más grande y coherente con la historia (y el jugador). Por ejemplo, tendremos que llevar cargamentos de un lugar hacia otro, llevar mensajes entre diferentes grupos revolucionarios o movernos entre las turbulentas aguas del pacífico para llevar "surtidos" del mercado negro a sus compradores.
Y es que el surtido de armas y objetos será enorme; así como el de vehículos. En el primer grupo, tendremos el consabido garfio (que tantas alegrías nos dio en la primera parte), y los ya clásicos paracaídas. Aparte, tendremos sub-fusiles, metralletas de alto calibre, lanzacohetes...todo un arsenal a nuestra disposición. Además, haciendo uso del nuevo sistema de calibración y apunte de objetivos, podremos seleccionar a qué parte del enemigo queremos disparar. Dicha revolución jugable nos permitirá elaborar complejas estrategias a la hora de enfrentarnos a ciertos enemigos que están parapetados o van cubiertos con planchas metálicas o chalecos antibalas. El método de apuntado (denominado como "Hybrid Locking System") está a medio camino del apuntado automático visto en muchos juegos y el manual visto en otros tantos.
Con respecto a los vehículos, hemos de decir que estamos realmente impresionados. Just Cause ponía a nuestra disposición una amplia gama de vehículos (militares y civiles) por todo su mapeado. Aquí la cosa no irá a menos, como es obvio. Controlaremos los típicos vehículos utilitarios, jeeps, camiones, autobuses, motos, tanques, tanquetas o helicópteros y lanchas. De todo un poco. Pero aparte, la principal novedad reside en el alto grado de personalización de los transportes que usaremos en el juego. Tendremos a nuestro alcance miles de piezas y recambios con los que personalizar y modificar nuestros vehículos. Podremos elaborar complejos blindajes anti balas, reforzar las llantas para hacerlo más apto para todo tipo de terrenos, o trucar el motor para aumentar la velocidad de nuestro vehículo. Sin duda, Avalanche Studios tiene algo grande entre manos en este aspecto, y dicho elemento de "tuneo" promete dotar de una variedad casi inagotable a la jugabilidad del juego.
El principal leitmotiv jugable, sin contar las misiones de la historia principal, se verá reflejado por el modo o el medidor de "Caos" de las zonas que visitemos. Dicho medidor, auspiciado por la mejorada y reformada inteligencia artificial, nos ayudará a saber qué nivel de levantamiento tienen los habitantes de una determinada zona. Cuanto más facciones del ejército del dictador controlemos, mejores serán nuestros apoyos armamentísticos o logísticos. Es decir, si controlamos más zonas y auspiciamos revueltas en otras, podremos pasar con mayor seguridad y apoyo que si son zonas controladas por los afines al gobierno dictatorial. Y es que la inteligencia artificial de Just Cause 2 ha sido mejorada a marchas forzadas. Nuestros enemigos responderán a nuestras tácticas, y se amoldarán a la situación en la que nos encontremos, llamando refuerzos específicos y elaborando complejas artimañas para darnos cazas. Sin ir más lejos, veremos cómo utilizan helicópteros y grupos de exploradores para rastrear la zona en la que nos encontremos y luego atacar con la artillería pesada una vez nos descubran.
Como es obvio, volveremos a tener una isla (y una serie de pequeños archipiélagos colindantes) para movernos como queramos. La libertad conseguida en el género "sandbox" o como dicen muchos usuarios, "tipo GTA" ha ido aumentando con la potencia de las consolas. Si Just Cause ofrecía un terreno a cubrir enorme, la segunda parte de la franquicia de Avalanche Studios será mayor. Sin ir más lejos, la segunda entrega de "Just Cause" ofrecerá más de 1000 km cuadrados de terreno jugable. Pero la mayor extensión de terreno no es la única novedad que Avalanche Studios se trae entre manos.
Ahora, dejaremos atrás las selvas de Sudamérica y nos internaremos en los diferentes entornos y lugares asiáticos. Una de las principales novedades de Just Cause 2 será la diversidad y variedad de entornos, dejando a un lado la monotonía de su primera parte. En el presente juego, veremos selvas, bosques, cumbres nevadas o escenarios semidesérticos. Será impactante ver que podemos pasar en pocas horas de una frondosa y tupida selva a un enorme y desolados desierto. Aparte, tendremos un nuevo motor climático que nos permitirá ver la evolución de la meteorología durante nuestra partida, con tormentas torrenciales, días soleados o parcialmente nublados.
Aparte de reforzar el diseño y la jugabilidad se ha cambiado el motor gráfico. Dicho motor, denominado "Avalanche 2.0", es una evolución natural completa de su predecesor. Mejorando a niveles de texturas, modelados e iluminación, Just Cause 2 no tendrá el lastre y la carga de ofrecer versiones para otras consolas distintas o anteriores a las de la generación actual (PS3, Xbox 360), ofreciendo así un apartado gráfico más pulido. La empresa desarrolladora, sin dejar de lado el apartado gráfico, ha puesto especial hincapié en mejorar las condiciones del motor de físicas y daños de su juego. Ahora, tendremos explosiones y tiroteos más realistas, consiguiendo mejores respuestas de daños en todo el entorno, así como daños y modelados deformables en nuestros vehículos. Todo este tipo de mejoras, afectarán positivamente a la jugabilidad en general, provocando una mayor responsabilidad al jugador a la hora de enfrentarse a según qué situaciones. El cambio en el apartado técnico, es notable. Sin ir más lejos, solo hace falta echar un vistazo a las capturas que acompañan a este avance para ver que la evolución gráfica es palpable.
En definitiva, Avalanche Studios parece tenerlo todo claro. Ha tomado nota de los fallos de la primera entrega y parece que los está arreglando. Just Cause 2 promete todo lo que prometió su primera parte, y ha aumentado la apuesta. Tendremos mejores gráficos, mejoras jugables y una mejor presentación en general. La pregunta que nos hacemos a día de hoy es si será suficiente. Para saberlo, habrá que esperar a su lanzamiento. Eso sí, tristemente, Just Cause 2 no tiene una fecha concreta para su salida al mercado. Habrá que esperar un poco.