A finales de abril se lanzó El puñal de Dunwall, el primer contenido descargable de peso para Dishonored, tras Dunwall City Trials, un pack de desafíos y pruebas contrarreloj que no estaba nada mal, pero que no era lo que estábamos esperando. Si Dishonored nos pareció uno de los mejores juegos del año pasado, y que seguro estará en las quinielas de los mejores de toda la generación, fue por diversos motivos, como su exquisita ambientación, el complejo y fascinante universo que nos planteaba y una historia muy interesante, todo enmarcado en una aventura de acción y sigilo en primera persona que daba mucha libertad al jugador para resolver las situaciones como quisiese.
El acierto de El puñal de Dunwall, como ya os contamos, fue ofrecer una nueva aventura con la misma calidad del título original, uno de esos contenidos descargables por los que merece la pena pagar, ya que por 10 euros tenías entre 5 y 8 horas más de juego, dependiendo de cuánto lo exprimieras, la longitud de algunos títulos completos. Una oportunidad irresistible de volver a este apasionante mundo, pero esta vez desde una perspectiva muy distinta, la del villano Daud, el asesino de la emperatriz, crimen del que era acusado Corvo Attano y que desencadenaba todos los acontecimientos vividos en Dishonored. Un punto de partida muy interesante, el hecho de encarnar al villano de la aventura original, y que era llevado con gran inteligencia por Arkane Studios, haciéndonos ver que no todo es lo que parece.
Por poner alguna pega a El puñal de Dunwall, la historia quedaba incompleta, ya que se trataba de la primera parte de dos DLC, una continuación que se ha hecho esperar varios meses, pero que por fin está aquí: Las brujas de Brigmore. La historia continúa justo donde lo dejamos, y sin dar demasiados detalles por si todavía no lo jugasteis, solo contaros que nos tendremos que ver las caras con Delilah, la líder del aquelarre de las brujas de Brigmore. Para llegar hasta ella, volveremos a la prisión de Coldridge, la cárcel de donde nos escapábamos al principio de Dishonored con Corvo Attano, visitaremos por primera vez el barrio de Drapers Ward, donde están enfrentadas dos bandas, los Sombrereros y las Anguilas muertas, y por último llegaremos a la mansión Brigmore, el lugar donde se encuentra Delilah y su aquelarre de brujas.
Respecto a El puñal de Dunwall, apenas se incluyen novedades jugables en Las brujas de Brigmore, y se mantienen las que vimos en el primer DLC. Esto eran nuevos poderes como la posibilidad de invocar asesinos, agarrar enemigos a distancia y suspenderlos en el aire para después lanzarlos como si fuéramos un Jedi, nuevas armas, como la Mina fulminante o la Nube tóxica, y la posibilidad de comprar favores antes de las misiones, una serie de ventajas y atajos que podíamos adquirir por un módico precio. Todo esto se mantiene en Las brujas de Brigmore, y lo que es muy interesante, podemos cargar la partida que tengamos de El puñal de Dunwall, y así mantener las mejoras de poderes, armas y objetos, el nivel de Caos y las decisiones que hubiéramos tomado. Esto es importante, ya que algunas de las acciones que realizamos en el DLC de abril, tienen ahora su reflejo.
Entre las pocas novedades de Las brujas de Brigmore, tenemos los Talismanes de hueso corrompidos, unos talismanes que como el resto nos otorgan ventajas si los equipamos, pero en este caso también inconvenientes. Por ejemplo Escultural, cuyo beneficio es que si te quedas inmóvil los enemigos no pueden verte, pero por el contrario el maná no se regenera, Tajo potente, con el que causas más daño con la espada, pero la blandes más despacio, o Tanque, que recude el daño recibido, pero reduce la velocidad de movimiento.
Junto a esto, tenemos nuevos tipos de enemigos, principalmente las brujas, con un diseño genial y la capacidad de teletransportarse, y las amenazas que estas pueden invocar, como plantas encantadas o unos peligrosos perros del averno, que volverán de entre los muertos incluso una vez hayamos acabado con ellos. Al igual que ocurrió en El puñal de Dunwall, visitaremos varios escenarios enormes, aquí principalmente dos, que están a la altura en cuanto a trabajo, mimo y dedicación de los del título original.
Es muy curioso volver a la prisión de Coldridge, ya que desde que escapara Corvo Attano, han endurecido las medidas de seguridad, e incluso seremos testigos de cómo algunos funcionarios pagarán muy caro este error. El barrio de Drapers Ward está dividido en varias zonas, desde los callejones donde están luchando encarnizadamente los Sombrereros y las Anguilas muertas, el embarcadero, el telar o incluso las cloacas, donde nos llevaremos algunas sorpresas. Como tanto nos gustó en Dishonored y en su primer DLC, podremos resolver esta misión de diversas maneras, alguna muy curiosa. Y por último la mansión de Brigmore es un lugar enigmático y lleno de secretos, desde sus embriagadores a la par que peligrosos jardines, hasta el interior de la mansión, repleta de trampas y runas.
Una vez hayamos finalizado este contenido descargable, quedaremos muy satisfechos por cómo se atan todos los cabos, y lo bien que encaja con la historia original de Dishonored. Además a través de numerosos textos conoceremos nuevos detalles de este interesante universo, cada vez más profundo, rico y complejo, al que ya estamos deseando volver en una hipotética secuela, ya que en un principio, no se esperan más DLC.
Un excelente motivo para dejarnos atrapar otra vez por Dishonored
No son pocos los jugadores que han demonizado los contenidos descargables de pago en los últimos años, y no sin motivos. A veces caros, escasos, injustos, este no es el caso de Las brujas de Brigmore, que nos ha encantado, como ya pasó con El puñal de Dunwall, un ejemplo de cómo hacer un buen DLC. Por 9,99 euros en PlayStation 3 y PC, 800 Microsoft Points en Xbox 360, tendrás entre 5 y 8 horas más de juego, con una calidad a la altura del título original, que nos retrotrae a cuando este tipo de contenidos eran conocidos como expansiones y no DLC, y a nadie molestaban, porque tenían un buen equilibrio calidad/precio. Si te atrapó Dishonored tanto como a nosotros, y te apetece volver a su fascinante universo, te lo recomendamos con gran entusiasmo.
