Como ya contamos en el extenso reportaje que realizamos hace unos meses acerca de los videojuegos basados en el universo Star Wars, la estrategia ha sido uno de los géneros menos prolíficos a la hora de recibir títulos basados en esta franquicia, encontrándonos con algunas joyas como Star Wars: Rebellion, y otros títulos menos favorecidos como Force Commander. Tras éste, LucasArts apostó sobre seguro lanzando SW: Galactic Battlegrounds, un juego de estrategia desarrollado por los creadores de Age of Empires que mantenía un desarrollo de la acción calcado al título citado con anterioridad; lo que hizo que pese a la adicción y diversión que ofrecía no pasara a la posteridad por tratarse de un título demasiado poco original.
Ahora, tras varios años sin recibir ningún título de estrategia basado en este genial universo de ciencia ficción, LucasArts prepara el que será uno de los lanzamientos más importantes del año. En Petroglyph, estudio formado por algunos de los creadores de la saga Command & Conquer, se han propuesto ofrecer un título basado en Star Wars distinto a lo visto hasta el momento, ofreciendo al jugador la posibilidad de conquistar toda la galaxia, ya sea encarnando a las fuerzas Rebeldes o Imperiales, combatiendo sin cesar al enemigo en una serie de batallas en el espacio y en la superficie de algunos de los planetas más populares de la serie; disfrutando además de la presencia de los héroes y villanos más conocidos de la saga..
Gestión y Guerra
Nuestro objetivo principal en Star Wars: El Imperio en Guerra.consistirá básicamente en conquistar la gran mayoría de planetas de la Galaxia, ya sea encarnando a las fuerzas Rebeldes o Imperiales, intentando por todos los medios derribar los cruceros de combate enemigos en el espacio, o arrasar sus bases de operaciones en las superficies de sus planetas. De este modo, en Petroglyph han optado por diferenciar claramente tres aspectos fundamentales en el sistema de juego de El Imperio en Guerra para no complicar en exceso la conquista galáctica.
Así, en primer lugar, nos encontraremos con un mapa estratégico en dos dimensiones en el que aparecerán todos los planetas de la Galaxia, con su información correspondiente ya que el control de los mismos puede otorgarnos mejoras para el ejército; y el bando que los controla. Nosotros, lógicamente, tendremos que defender nuestros planetas e intentar por todos los medios que el resto caigan de nuestro lado. Así que en este punto entraría en juego la gestión de recursos, construcción de campamentos y la compra de unidades de combate. Como decíamos, cada uno de los planetas nos ofrecerá una serie de mejoras que tendremos que emplear sabiamente para eliminar a los enemigos, y a parte, dinero que emplearemos para comprar nuevas edificaciones o unidades de combate. Sin embargo, en cada uno de los planetas únicamente podremos construir un número limitado de edificaciones, por lo que podemos optar por crear un planeta "financiero" en el que las únicas construcciones disponibles sean las que nos otorgan más dinero; u optar por un planeta productor de cruceros y naves de combate en el que el número de créditos que obtendremos cada cierto tiempo sea muy bajo.
Este hecho, como os podéis imaginar, otorgará al El Imperio en Guerra un interesante componente estratégico ya que nuestras decisiones a la hora de expandir nuestro imperio definirán nuestras posteriores actuaciones en el campo de batallas. De ahí que podamos montar una serie de planetas en el borde exterior con varias fábricas de guerra trabajando a destajo para tener un buen frente de batalla, mientras que en la retaguardia recaudamos dinero sin cesar para mantener a la maquinaria de guerra viva. Por supuesto los planetas del borde interior se encontrarán más indefensos ante los ataques enemigos, por lo que también tendremos que trabajar mandando refuerzos, ya sean naves o unidades de infantería, para que protejan la zona.
Además, en cada uno de los planetas podremos destinar todo tipo de tropas de asalto que protegerán la superficie de cualquier ataque enemigo, siempre teniendo en cuenta el límite de unidades con el que nos encontraremos ya que, al igual que en lo referente a las edificaciones, habrá un número limitado de parcelas que tendremos que cubrir con las distintas unidades de infantería y vehículos de combate. Aparte, en el espacio podremos tener naves de transporte cargadas con tropas de infantería listas para descender a la superficie en medio de una batalla, siempre que las requiramos; y los ya citados cruceros y naves de combate que bombardearán la superficie planetaria si se lo ordenamos, o frenarán cualquier ataque enemigo combatiendo en el espacio.
Aparte de estas unidades, que se comportarán como en cualquier otro juego de estrategia en tiempo real, nos encontraremos con unidades especiales que podremos mandar a los planetas rivales para extraer dinero sin que se enteren, eliminar a unidades especiales enemigas; o pasar directamente a la exploración mandando sondas por todo el espacio en busca de bases de operaciones rebeldes, o estaciones de combate piratas, como ya hemos visto en las películas de la saga. Por último, en El Imperio en Guerra contaremos con la inestimable ayuda de algunos de los héroes más importantes de las películas, lo que hará que las batallas sean todavía más gratificantes. De este modo, por ejemplo, en una batalla espacial podemos ver como los cruceros rebeldes son escoltados por el Halcón Milenario mientras que en los asedios a las posiciones rebeldes el ejército imperial cuenta con la inestimable ayuda de Darth Vader.
Lógicamente cuando optemos por atacar las posiciones enemigas tendremos que tener en cuenta todas estas características. En primer lugar tendremos que crear un buen ejército, tanto terrestre como de naves de combate, para después lanzar una oleada de naves de transporte escoltadas por cazas y bombarderos a los planetas enemigos. Si en el espacio nos encontramos con las naves rivales abandonaremos el mapa galáctico y la acción nos trasportará a un campo de batalla en el que tendremos que eliminar a los enemigos aprovechando las ventajas de nuestras unidades. Así, por ejemplo, los cazas resultarán perfectos a la hora de eliminar a los bombarderos enemigos mientras que éstos destrozarán los grandes cruceros de guerra o las estaciones de combate.
A este efecto cabe destacar la posibilidad de poder destruir algunas de las naves más grandes del juego por "piezas", es decir; podemos ordenar a nuestros bombarderos que ataquen el hangar de una estación espacial para que no generen más cazas, o centrarnos en sus sistemas defensivos para que no puedan repeler nuestras ofensivas. La espectacularidad que se está consiguiendo al mostrar estas batallas resulta digna de elogio ya que al destrozar una nave de grandes dimensiones veremos como se parte en varios trozos mientras éstos se pierden en el espacio dejando un rastro de fuego y trozos de metal. Además, disfrutaremos de una vista cinematográfica que nos permitirá disfrutar de la guerra en primera persona; lo que unido a las habilidades especiales de nuestras unidades, como la posibilidad de crear grandes escudos protectores sobre las naves, harán que nos sintamos inmersos en una auténtica guerra intergaláctica.
Sin embargo, como decíamos, la acción no se quedará únicamente en el espacio ya que también tendremos que hacer frente al enemigo en más de 40 planetas distintos capturando puntos de control para poder pedir refuerzos, y construyendo todo tipo de estructuras sobre las plataformas pertinentes, lo que hará que podamos sanar nuestras heridas en medio del combate; o podamos montar un buen perímetro defensivo con torretas. En estos planetas disfrutaremos de todo tipo de efectos espectaculares tales como las explosiones o las ondas de calor que distorsionarán el calor; así como grandes bombardeos que arrasarán todas las estructuras que el enemigo pudiera tener construidas en el terreno. El modelado de las unidades y el grado de detalles conseguido en las mismas convierten a este título en uno de los más impactantes a nivel visual que hayamos visto en mucho tiempo.
Por último, y por si esto no fuera suficiente, en El Imperio en Guerra nos encontrarnos con la posibilidad de disfrutar de la campaña principal junto a un amigo que se encargará de encarnar al ejército rival. En este caso, podremos guardar la partida para continuar la guerra en otro momento ya que no hablamos de simples batallas en distintos escenarios, sino que tendremos que enfrentarnos a un amigo en pos de controlar toda la galaxia. También, como ya es habitual en el género, podremos disfrutar de las típicas batallas contra hasta ocho jugadores más, lo que hará que la experiencia de juego no decaiga en ningún momento.
Con todo esto, la nueva creación de Petroglyph se ha convertido en uno de los títulos más interesantes del año al ofrecer una original propuesta de juego en la que la gestión de recursos y las batallas en grandes escenarios serán una constante. Esperemos que esta vez sí LucasArts de con la fórmula adecuada para trasladar a la perfección el fantástico universo Star Wars porque El Imperio en Guerra puede convertirse en el mejor juego de estrategia basado en el universo creado por George Lucas.