Hace algunos años apareció en el mercado uno de tantos juegos que trataban de seguir la estela de Diablo. Sin embargo, en esta ocasión el título poseía méritos propios para apartarse de la sombra de su inspiración y hacerse merecedor de buenas críticas, tanto de los medios como del público. Este juego era Sacred, desarrollado por la alemana Ascaron, que fue distribuido en multitud de países consiguiendo muy buenas ventas.
Después de varios años donde tan sólo la salida de una expansión del juego vino a alegrar a los seguidores del título, se anunció la segunda parte del título, Sacred 2: Fallen Angel. Aunque su desarrollo lleva ya un tiempo, lo cierto es que los detalles se han ido desvelando poco a poco, quedando aún muchos secretos por descubrir. El juego, al que aún le quedan bastantes meses para salir pues su lanzamiento inicial se ha retrasado hasta septiembre, promete recoger el testigo de la primera parte y mejorar todos sus apartados.
Como hemos dicho, Sacred se inspira en el juego Diablo, y al igual que este el jugador puede elegir de entre una serie de personajes aquel que más se adapte a su forma de juego y a partir de ahí avanzar en la historia resolviendo misiones, derrotando enemigos y mejorando sus habilidades. En esta ocasión Sacred 2: Fallen Angel nos ofrece, por el momento, seis personajes entre los que encontramos a la seraphin, la alta elfa y el guerrero sombrío, Esperamos que como en la primera parte las diferencias entre los distintos personajes hagan que la experiencia de jugar con cada uno de ellos sea realmente diferente, aunque de momento prácticamente al único personaje que hemos podido ver en acción es a la seraphin.
Una vez hemos escogido a nuestro héroe, la historia nos contará como 2000 años antes del primer juego el mundo de Ancaria está en peligro debido a que la energía T se ha descontrolando, haciendo que incluso los animales se vean afectados y se conviertan en bestias. Nosotros decidiremos si queremos solucionar las cosas o queremos acrecentar el caos, pudiendo elegir con nuestras acciones como avanzar a lo largo del juego. Esto tendrá importancia ya que dependiendo de nuestro alineamiento moral los personajes del juego nos tratarán de una forma u otra, e incluso veremos como las misiones que se nos ofrezcan dependerán de cómo seamos. Para avanzar en la historia deberemos completar las misiones principales y, opcionalmente, podremos realizar hasta 400 secundarias que nos ofrecerán información extra, objetos especiales o, en la mayoría de las ocasiones, simplemente enemigos a los que matar para poder subir de nivel. Pero derrotar a la cantidad de enemigos con los que tendremos que enfrentarnos no será fácil. Afortunadamente podremos ir aprendiendo ataques especiales, que nos darán ventaja frente a nuestros enemigos, y configurar las características de nuestro personaje como deseemos, ya que podremos subir aquellos atributos y habilidades que prefiramos.
El sistema de control de la versión PC es muy sencillo, apuntando con el ratón sobre el objeto con el que deseemos interactuar y pulsando el botón izquierdo para llevar a cabo la acción. Además, si pulsamos en un punto del escenario, nuestro personaje se desplazará hasta allí. Sin embargo, debido a que X360 no cuenta con ratón, el control para ella se ha modificado, usándose el stick izquierdo para moverse, el derecho para rotar la cámara y asignando las armas, conjuros y objetos a los distintos botones. Otro aspecto que se ha cambiado en la versión de consola es el inventario, que se ha simplificado para ofrecer un acceso sencillo y acorde con la forma de control.
Como vemos, hasta aquí todo parece tomado de la primera parte, pero pasemos a hablar de alguna de las novedades. Sin duda, la primera que nos ha llamado la atención es la evolución gráfica, ya que en esta ocasión se ha optado por un motor 3D, a diferencia del 2D que lucía Sacred. La verdad es que el cambio le ha venido muy bien y, aunque durante la mayor parte del tiempo usaremos una cámara más alejada del personaje que nos permita ver nuestro y entorno y a los enemigos mejor, cuando acercamos la cámara vemos como se han cuidado todos los detalles. Sin duda algo que hay que destacar en cuanto los gráficos, son los efectos que posee el juego, de los cuales Ascaron nos ha mostrado un aperitivo, siendo alguno de ellos realmente impresionantes. Un par de ejemplos de esto son el agua, que es una delicia y parece real, y los efectos de luces y sombras, que hemos podido ver en un espectacular ciclo día-noche. De momento y por lo que hemos visto, parece que Ascaron está esmerándose en el apartado gráfico y desde luego los que se sintieron algo decepcionados con el aspecto visual de la primera parte con Sacred 2: Fallen Angel verán sus expectativas cubiertas.
Los personajes cuentan con un buen modelado, teniendo multitud de detalles cada uno de ellos. Los enemigos lucen también estupendamente, pero de momento hemos visto poca variedad de ellos, algo que esperamos que se subsane para no tener que enfrentarnos continuamente a goblins, esqueletos y escorpiones. De momento no se han mostrado demasiados escenarios, pero lo que hemos podido ver hasta ahora tiene muy buena pinta, tanto los escenarios naturales como las construcciones, conteniendo multitud de detalles que harán que pasear por los caminos de Ancaria sea una delicia para los ojos.
Otra novedad es la incorporación de nuevas monturas. Ya en la primera parte del juego podíamos conseguir un caballo y subirnos en él, pudiendo incluso pelear desde allí, pero en esta ocasión este concepto se amplia, pues aparte de equinos, cada personaje tendrá una montura especial según su clase. De momento se han desvelado dos de estas monturas especiales, un tigre para la seraphin y un sabueso infernal para el caballero sombrío. Desde luego estas monturas serán imprescindibles, pues el enorme tamaño del mundo haría que tardásemos horas en recorrerlo a pie.
Por último, algo que sin duda nos parece un gran acierto, es la incorporación de un interesante modo online, en el de momento pueden jugar hasta cuatro jugadores en la versión de X360 y hasta 16 en la de PC. En él, cada uno de los jugadores se verá transportado a una zona del escenario donde tendrá que derrotar a los enemigos que vayan surgiendo. De esta forma, cuantos más enemigos haya vencido, más subirán sus estadísticas o más probabilidades tendrá de conseguir objetos, algo que necesitará pues una vez acabado el tiempo en solitario, el jugador aparecerá en una arena donde se enfrentará a los otros jugadores. Este modo promete ser muy divertido, y es un buen complemento al resto de las opciones multijugador incluidas, ya que además de este modo, podremos jugar de manera cooperativa a la aventura principal, ya sea a través de Internet o, en el caso de X360, permitiendo también a dos personas jugar en la misma consola.
Lo que hemos visto de momento de Sacred 2: Fallen Angel nos ha gustado mucho y creemos que se puede convertir en un nuevo referente del género, especialmente en X360, donde hay menos títulos similares. Aún queda por ver si se cumplirán todas las expectativas, pero esperamos que el último retraso que ha sufrido el juego dé tiempo a Ascaron a pulir el juego al máximo y ofrecernos un gran título. A faltar de varios meses para su lanzamiento, seguiremos este juego con mucho interés.