Los Sims se convirtieron en un icono cuando el juego original salió en el año 2000, y desde entonces no han parado. A lo largo de sucesivas expansiones y secuelas han hecho de todo, y han reportado pingües beneficios a su editora, Electronic Arts, y elevado a la categoría de genio a su creador, Will Wright. Por el camino también han creado un género que se ha intentado imitar varias veces y han logrado ampliar el público de los videojuegos un poco más, calando particularmente entre el femenino. En unos meses, EA pretende continuar la historia de éxito de su saga más vendida con esta tercera entrega, secuela completa de Los Sims 2, que llega algo más temprano de lo que ésta tardó en suceder al juego original, pero no tan rápido como estamos acostumbrados a ver en otras sagas de éxito. Esta tercera parte, según pudimos ver en la Games Convention, amplía el mundo de Los Sims, introduciéndolos en un mundo vivo con el que podrán relacionarse de nuevas maneras.
Concretamente, Los Sims dan el salto a un vecindario abierto, a un mundo abierto donde formarán parte de una ciudad, y podrán interactuar con todos sus habitantes. El concepto de barrio se ha convertido en un mundo 3D por el que podremos movernos libremente, sin tiempos de carga, pudiendo hacer zoom inverso en nuestra casa y ver cada vez mayor extensión de terreno. Cada uno de los Sims que forman parte del mundo del juego hace su vida.
Tienen sus tareas diarias, sus trabajos, y se relacionan entre sí sin que el jugador intervenga, y no para hacer de decorado sino que esas relaciones serán simuladas y tendrán el mismo contenido que las de nuestro Sim con ellos, como siempre ha ocurrido en la saga, solo que ahora hay más posibilidades que nunca dado que el vecindario se ha convertido en una ciudad.
Del mismo modo, además de relacionarse el resto del mundo también hará su vida, como casarse, tener hijos, envejecer, progresar en sus carreras y mejorar sus casas. En este sentido, el mundo del juego estará más vivo que nunca, lo que permitirá mayores posibilidades.
Otra de las novedades de esta edición de Los Sims es el sistema de rasgos de los personajes. Cada uno de los Sims del mundo del juego tendrá su código genético, que determinará su aspecto físico, como en Los Sims 2, pero ahora hay un nuevo sistema de rasgos que, en combinación con factores aleatorios, determinará el comportamiento "psicológico" de los Sims, es decir, qué hacen cuando no se les ordena hacer nada, y qué necesitan para ser felices. Este complejo sistema de inteligencia artificial basado en rasgos combina hasta cinco rasgos por Sim, de un extensísimo repertorio que no se nos mostró al completo, pero por lo que pudimos ver en la demo, superaba el centenar. Haciendo sencillos cálculos matemáticos, hay cientos de miles de combinaciones diferentes de cinco elementos entre cien.
Los rasgos de nuestro Sim los conoceremos al momento, y pueden ser de todo tipo, toda característica que se le pueda "ver" a una persona. Desde la alegría o el mal humor, hasta el carisma, si es amante de las fiestas, si es gracioso, si le gusta el deporte o es vago, y otros rasgos como ser una maníaco o, directamente, ser malvado. Los rasgos que tenga el Sim determinarán cómo se comporta de forma estándar, como interactúa sin que nosotros actuemos, pero sobre todo cuáles son sus deseos. Ésta es aparentemente una de las características clave de esta tercera parte de Los Sims, escuchar los deseos de nuestros seres, y cumplirlos –o no. Satisfacerlos los hará más felices, pero un exceso de felicidad puede conducir a comportamientos extraños, como la cleptomanía.
Los rasgos de los otros Sims con los que interactuemos no serán transparentes y solo los conoceremos hablando con ellos o viéndolos actuar. Toda la información sobre Los Sims se mostrará en una pantalla inferior, con datos sobre el personaje en cuestión y qué es lo que sabemos sobre él. En el caso de nuestro personaje, en todo momento tenemos información sobre cómo está, desde las clásicas barras de comida, cansancio o "necesidades fisiológicas", hasta cómo se siente en el entorno en el que se encuentra. Información para hacer de nuestro ser virtual un Sim más feliz o más desdichado, todo a nuestro gusto.
En la demo que nos mostraron, controlábamos a un Sim político que había dado una fiesta en su casa con gente rica, para recaudar fondos para su campaña. Decidíamos a quién invitar y a quien no echando un rápido vistazo al vecindario y el nivel de cada casa, y luego en el sarao intentábamos hacer buenas migas con ellos para apuntarlos a nuestra causa. Luego, ya en el ayuntamiento, entrábamos y teníamos la opción de robar o no robar fondos de esa campaña; nos pillaban, y abandonábamos la política para entrar de nuevo en otra carrera profesional: el crimen.
Tras esta presentación, pudimos ver durante un rato el creador de Sims, que nos permite modelar nuestros seres virtuales a nuestro antojo, convirtiéndose ese modelado de nuestra factura en el célebre "código genético" de Los Sims. Podremos seleccionar de entre unos patrones prediseñados, o bien generar personajes de forma aleatoria, o bien variar los estereotipos. Por supuesto, también podremos configurar cada una de las partes de nuestro ser virtual, tanto modificando unos parámetros como, con algunas partes –en concreto, vimos la nariz-, de forma gráfica, con un interfaz bastante cómodo. Podíamos seleccionar los diferentes puntos de la nariz de nuestro Sim, y moverlos para ver cómo ésta iba tomando una forma u otra. Por supuesto, aparte de configurar el aspecto visual de nuestro ser virtual, podremos elegir qué rasgos tendrá para determinar su comportamiento social y sus anhelos vitales.
Los Sims 3 nos ha parecido una evolución natural de la mecánica de Los Sims, con cambios inferiores con respecto a los que tuvo la segunda parte en relación a la primera; sin embargo, son cambios acertados, prácticamente la única dirección en la que puede avanzar la saga, y el tener un mundo más abierto permitirá más posibilidades de juego. No nos mostraron otros detalles interesantes, como cuáles serán las posibilidades de configuración de la casa y, sobre todo y viendo las opciones online de Spore, que posibilidades multijugador tendrá este nuevo Los Sims. Por ahora parece seguro que revalidará su estatus de juego estrella.