Durante los últimos días supimos que los chicos de Nintendo habían pensado en caballos y delfines como la posible "secuela" de Nintendogs en 3DS. Esto nos da a pensar en las ideas que pudieron plantearse en ese momento con respecto a la jugabilidad con un delfín, algo bastante diferente de lo que estábamos acostumbrados. Finalmente se decantaron por lo más usual y común en los hogares de todo el mundo: perros y gatos.
En primer lugar, en la breve demostración mostrada en el Nintendo World, no pudimos realmente probar las novedades más interesantes que el juego plantea y que comentaremos más adelante. Aun así, lo primero que llama la atención es que los modelados de los perros y los gatos siguen teniendo un realismo y un detalle magnífico. Especial mención merecen las animaciones de los animales, que continúan siendo completamente calcadas a los de sus referentes en la realidad. Tras elegir una combinación de bulldog francés y gato común rubio, pudimos ver como el can campaba a sus anchas rodeando y mirando al gato con curiosidad mientras éste se encogía, su pelo se erizaba y comenzaba a emitir unos bufidos a su desconocido compañero.
Mediante la pantalla táctil podíamos llamar a cualquiera de los dos animales en pantalla, aunque suponemos que el control de voz funcionará exactamente igual que sus versiones anteriores, pudiendo así llamar a nuestro animal por su nombre o mediante algunos sonidos. Eso sí, como novedad, mientras que con el sistema de reconocimiento de voz cualquier persona podía llamar a los animales, las funciones de la cámara integrada en la nueva Nintendo 3DS permiten también un reconocimiento de la cara del dueño o los jugadores habituales. Con este sistema los animales se podrán comportar de una manera más desconfiada cuando un desconocido quiera jugar con ellos.
En la demostración llamamos a nuestro gato y comenzamos a acariciarlo mediante la pantalla táctil mientras él ronroneaba de placer. El uso de las tres dimensiones no sólo está presente en los escenarios y los animales sino que también tiene su referencia en este tipo de funciones. Cuando acariciamos al minino podremos hacerlo en todo su cuerpo, con una diferente sensación de profundidad cuando acariciamos su cara o su cola. Las animaciones tan realistas vuelven a sorprendernos cuando queremos acariciar su pata y el animal la encoge y se escabulle como lo haría un verdadero gato.
Además de esto pudimos poner algunos objetos como gafas de sol o sombreros a nuestros animales y verlos deambular con estos complementos puestos en nuestra habitación. Como en su predecesor en DS, podemos jugar con ellos lanzando algunos objetos de goma, los cuales se comportan muy bien en relación con la física y aprovechando nuevamente el componente tridimensional. En la demostración vimos a nuestro can corriendo tras el objeto y detrás de él un desconfiado y adorable gatito que miraba con interés.
Aunque no se mostró mucho más, la mecánica del juego será calcada a la de Nintendogs en DS, teniendo que educar, bañar, alimentar y jugar con nuestras mascotas. Además, suponemos que seguirán existiendo las competiciones donde podremos ganar algo de dinero para comprar nuevas mascotas.
Una de las dudas que nos surgió hace referencia al trabajo en la personalidad de los gatos. Cada animal puede tener diferentes personalidades, ser más juguetón, arisco, vago, etc. Sin embargo los felinos son normalmente menos dóciles y más independientes a la hora de recibir órdenes o enseñar modelos de comportamiento y no sabemos cómo se reflejará esto a largo plazo en el videojuego.
Con respecto a esta versión, también se incluirán otras novedades como es la posibilidad de tomar fotos (en tres dimensiones) de nuestras mascotas y compartirlas mediante el Street Pass. Además, gracias a las tarjetas de realidad aumentada, podremos ver a nuestros animales en diferentes localizaciones, como encima de nuestro escritorio, en la mesa de una cafetería, etc... y tomar las oportunas fotos tomando un café con nuestro amigo.
En términos generales el planteamiento es el mismo que en las diferentes versiones de Nintendogs publicadas en DS, pero esa vez se añaden mininos y ciertas novedades muy bien adaptadas a las posibilidades que ofrece el nuevo soporte. El 3D luce especialmente bien en los animales y los objetos con los que podremos jugar con ellos, los diseños y animaciones siguen siendo muy realistas y se ofrece un reconocimiento facial del dueño entre los principales nuevos detalles. Lo que queda claro es que para los amantes de las mascotas virtuales, son añadidos que hacen aún más interesante este título. Llegará a las tiendas en tres diferentes versiones y a un precio de 4800 Yenes (43 euros aproximadamente) el 26 de febrero junto al lanzamiento de la consola en Japón.