Análisis de Maldita Castilla EX (Xbox One)
Hace ya unos años el desarrollador independiente Locomalito, cansado de que no salieran al mercado propuestas similares a uno de sus juegos favoritos (Ghosts'n Goblins), decidió por su cuenta y riesgo crear uno él solito. Y lejos de ser un título mediocre, la verdad es que Maldita Castilla se convirtió en una grata sorpresa para los amantes de los juegos retro. Y más cuando dicha producción fue distribuida de manera totalmente gratuita.
Bien, pues años más tarde y, ésta vez sí, a cambio de una pequeña cantidad de dinero (unos pocos euros) podemos hacernos con una versión expandida y mejorada de dicha producción de PC, la cual aparece en exclusiva en esta oportunidad para Xbox One. Hablamos de Maldita Castilla EX, una versión remozada del clásico de culto que nos ha dejado unas sensaciones realmente buenas.
La vida de un caballero de Castilla
La ambientación que rodea a la aventura es realmente magnífica, y más para nosotros, los españoles. Sí, porque en este caso el título se basa en obras como Don Quijote de la Mancha o Amadís de Gaula para confeccionar una historia bastante sugerente y crear una iconografía realmente llamativa.
El protagonista es Don Ramiro, un tipo que se parece muchísimo a nuestro añorado Sir Arthur y que tiene la misión de acabar con la plaga de criaturas monstruosas que se ha adueñado de sus tierras, Tolomera. Y todo para servir con lealtad a su rey, Alfonso VI, personaje que es quien le asigna dicha tarea.
Para realizar su misión el protagonista no va solo o, al menos, no siempre. De vez en cuando goza de la compañía y ayuda de otros tres caballeros más (Quesada, Mendoza y don Diego), los cuales aportan más gracia al desarrollo de las ocho fases de las que consta el título. Y más teniendo en cuenta que… suceden ciertas "cosas" a lo largo del juego.
¿Y cuánto podemos tardar en superar dichos niveles? Pues si se nos da bien, una hora, pero ya os avisamos que muy probablemente esta cantidad de tiempo se alargue bastante debido a que no es un título fácil de superar, más bien todo lo contrario.
Acción y desafío retro
Efectivamente. Maldita Castilla EX es una de esas aventuras que, como sucedía antaño, suponen un duro reto para nuestra habilidad. Eso sí, no se trata de una de esas obras difíciles por capricho o por contar con un diseño mejorable. Lo es por espíritu y por tradición, más allá de seguir la misma pauta que Capcom instauró en la producción en la que se basa esta aventura de desarrollo 2D que ya os hemos citado, Ghosts'n Goblins.
La mayoría de los niveles tenemos que recorrerlos de izquierda a derecha deshaciéndonos (o esquivando, que también podemos hacerlo) de todos los rivales que salen a nuestro paso. La variedad de ellos es considerable y cada uno tiene su patrón de movimientos y ataques básicos, lo que añade más diversidad a la acción y nos obliga a mantenernos siempre concentrados.
Pero lejos de repetir una y otra vez la misma fórmula en cada nivel, esta producción nos permite disfrutar de más variedad jugable de la que pudiera parecer en un principio. Y es que tan pronto nos encontramos esquivando barriles al más puro estilo de lo vivido en la versión original de Donkey Kong como, más tarde, debemos permanecer en un carro acabando con multitud de rivales voladores que nos acechan sin parar o, de postre, nos toca enfrentarnos a un jefe final de enormes proporciones.
Una tarea para nada sencilla que, como ya os hemos comentado, pone a prueba nuestra habilidad con el mando de manera continua. Por fortuna el control es sólido y tremendamente preciso. La inercia del personaje provoca que calcular algunos saltos suponga un esfuerzo más elevado de lo deseado pero, más allá de esto (que ni tan siquiera es un defecto, es una simple elección de diseño), el control del protagonista es inmejorable. Un botón nos permite saltar y otro más disparar nuestras armas, tan sencillo como eso. Pero claro, conforme vamos avanzando es posible ir obteniendo nuevos poderes y aumentar nuestro arsenal, así como conseguir unas botas especiales que nos permiten efectuar un doble salto de manera temporal.
Una jugabilidad no demasiado original que repite una fórmula aplicada hasta la extenuación durante las décadas de los 80 y 90 pero que, a fin de cuentas, funciona. Plataformas y acción tradicional 2D para un tipo de público muy concreto que, seguramente, sabrá extraer todo el potencial que esconde el título, incluyendo los diversos finales que esconde y que se revelan en función de cómo juguemos y de la cantidad de secretos que seamos capaces de encontrar.
Además esta edición presenta varias mejoras en relación al original. Dos nuevos niveles, enemigos inéditos (varios de ellos finales), un par de armas de nuevo cuño y una mejora sustancial técnica dan forma a una versión más cuidada que la que disfrutamos en PC hace unos años.
Estética de antaño
Pasando a analizar sus bondades técnicas, lo cierto es que dentro de su sencillez nos ha gustado mucho lo que nos ha brindado esta producción en dicha materia. Lo más destacable es su notable línea artística, que funde de manera muy llamativa la estética disfrutada en el clásico de Capcom del que tanto os hemos hablado a lo largo de este análisis (es inevitable) con el folclore nacional.
Particularmente, nos han gustado bastante la recreación de los abundantes medium y final bosses que nos dan su particular bienvenida en momentos puntuales de cada fase. Los hay de todo tipo y más o menos inspirados pero, en líneas generales, muestran un aspecto muy trabajado.
Centrándonos ahora en los escenarios, su variedad no es muy elevada por la sencilla razón de que el título únicamente incluye ocho niveles. Pero a pesar de eso su disposición y aspecto están bastante conseguidos, siendo una delicia atravesar llanuras, bosques, montañas y demás paisajes que nos depara el título.
Como curiosidad, el juego nos permite elegir entre ocho filtros y formatos diferentes para seguir la acción (pantalla completa, bordes, gráficos pixelados, etc.), adaptándose así a todo tipo de jugadores. Lo suyo es jugar en formato 4:3 con bordes negros y píxeles como castillos, pero cada uno puede elegir la apariencia gráfica que más le apetezca visualizar.
En cuanto al sonido, Gryzor87 nos ha regalado una banda sonora realmente estimable que, como era de esperar, recupera las chiptunes tan añoradas de antaño que se adaptan magníficamente al desarrollo del título. Además esta versión incorpora algún que otro tema inédito en relación a lo escuchado en el juego original, esfuerzo que desde aquí agradecemos.
Conclusiones
Entretenimiento y desafío puramente retro es lo que nos ofrece esta producción. Sin querer caer en el chovinismo, lo cierto es que se trata de un grandísimo homenaje a una de las aventuras side scrolling de acción y plataformas más queridas de los 80, Ghosts'n Goblins. No se trata por cuestiones evidentes ni del título más original del mundo ni, tampoco, del más extenso o duradero. Pero para tratarse de un juego creado por un programador y un músico, bastante ha dado de sí. Diversión de antaño para los usuarios más veteranos y habilidosos.
Este análisis ha sido elaborado utilizando un código de descarga proporcionado por la agencia Jaleo Comunicación.