Análisis de Halo Wars: Definitive Edition (Xbox One, PC)
Nota: Halo Wars: Definitive Edition es una descarga gratuita en Xbox One y PC para aquellos que hayan reservado la edición deluxe Halo Wars 2. El año que viene también se venderá por separado.
Pocas sagas representan mejor el espíritu de Xbox que Halo. A día de hoy, y con varios éxitos, secuelas y adaptaciones variadas a sus espaldas, la serie de títulos de ciencia ficción ambientados en la lucha de la humanidad contra el Pacto y las amenazas más variadas tras la conjunción de alienígenas fanáticos que pusieron en jaque al ser humano, Halo es uno de los baluartes de Microsoft en el mundo de los videojuegos. Halo Wars supuso un hito, pues llevaba la mitología de la emblemática licencia a los títulos de estrategia, adaptándola inteligentemente a las consolas.
El trabajo fue, sin lugar a dudas, loable. Halo Wars era un videojuego notable, muy divertido, táctico e inteligente, que durante mucho tiempo, mereció una secuela. Las plegarias fueron escuchadas, y en febrero, nos llegará Halo Wars 2, una segunda parte que promete ir un paso más allá. Pero, ¿y aquellos jugadores que no disfrutaron del original? ¿Y aquellos que se quedaron sin jugar en PC? Microsoft, a día de hoy, nos ofrece un acceso anticipado a Halo Wars: Definitive Edition, una versión remasterizada que lleva por primera vez el título a compatibles y que ofrece un apartado gráfico actualizado sin dejar la sopesada y bien diseñada jugabilidad original en ninguna de las dos plataformas centrales de la compañía de Redmond.
Una remasterización más que correcta
Halo Wars: Definitive Edition llega con varias e interesantes caracterísitcas a Xbox One y PC. Aunque a día de hoy es un extra que se regala por reservar la edición deluxe de Halo Wars 2, el año que viene también se venderá por separado.
Además, es uno de los videojuegos baluartes del programa Xbox Play Anywhere, la política que que permite el juego unificado en PC y la sobremesa de Microsoft, invitándonos a canjear el videojuego de forma digital en cualquiera de las dos tiendas existentes.
Si no jugasteis al original -que os recordamos, también es perfectamente retrocompatible con Xbox One-, haremos un pequeño repaso por sus características antes de inmiscuirnos en las novedades -mayoritariamente técnicas- que nos ofrece esta puesta al día. Halo Wars: Definitive Edition es un videojuego de estrategia en tiempo real, que sabía adaptarse a las videoconsolas, ofreciendo un control muy depurado y sencillo para el pad de Xbox 360, exquisitamente pensado por la extinta Ensemble Studios y un ritmo de juego que se adaptaba a la dicotomía existente entre acción y reacción fuera del ámbito del teclado y el ratón.
Halo Wars: Definitive Edition nos presenta una campaña con 15 niveles, de muy variada índole, que nos llevará a combatir 20 años antes de los sucesos de Halo: Combat Evolved. De esta manera, viviremos las primeras escaramuzas y batallas contra el Pacto, llevándonos a las puertas de la guerra de los Anillos, y ayudándonos a conocer más del universo de ciencia ficción de la saga iniciada por Bungie. Desgraciadamente, uno de los problemas más grandes del título original, la ausencia de una campaña centrada en el Pacto sigue hoy vigente, quitándonos la posibilidad de comprender el punto de vista alienígena y de añadirle otras tantas horas a una duración media que puede alcanzar las 10 o 12 horas sin demasiados problemas.
Dirigir las tropas de UNSC contra las legiones extraterrestres del Pacto era una tarea ardua a veces, con múltiples objetivos, batallas muy frenéticas y situaciones de estrés, pero Halo Wars conseguía dar una de cal y arena, ofreciendo un ritmo muy comedido que ofrecía la dosis exacta de dificultad al usuario de consola en el ámbito de la estrategia. Es un juego de estrategia muy básico, basado en la recolección de recursos, la toma de puntos de control y la destrucción total del enemigo. La interfaz sigue siendo muy eficiente, y creemos que gracias al pad de Xbox One, incluso más cómoda. Podemos seleccionar, enviar y combatir a golpe de botón, stick y cruceta, mientras manejamos con la cámara con cierta soltura. En PC, donde también es compatible el juego con mando, se ha trabajado la traslación al teclado y el ratón, siendo muy óptima y como es habitual en dicha plataforma, completamente personalizable a los gustos del jugador.
Esta Definitive Edition es una puesta al día del citado videojuego, que además de ofrecer un actualizado apartado gráfico, incluye todo el contenido descargable que recibió el original en Xbox 360. No es mucho -un par de modos de juego y cuatro mapas en el clásico multijugador y en el llamado Escaramuza-, pero está todo ahí, algo que se agradece. Quizás el mayor atractivo de esta remasterización sea el evidente aumento de resolución y texturas. Ya en la vetusta consola de Microsoft encontrábamos un diseño visual y un apartado gráfico más que bueno, que se mantiene como base en esta adaptación y que ahora, sirve como el suelo en el que se basa la remasterización.
Halo Wars: Definitive Edition funciona a 1080p de resolución -el original lo hacía a 720p- y ofrece un aumento de definición en texturas, así como una tasa de frames por segundo más estable y sólida, incluso en los . Es impresionante que, un título de 2009 y diseñado para una consola inferior se vea de una manera tan decente, sobre todo gracias a su loable apartado artístico. En PC la cosa va incluso mejor, ya que al igual que otros videojuegos de Microsoft, podemos configurar la resolución a 4K.
No obstante, los años se notan. Halo Wars: Definitive Edition es, lógicamente, un título hijo de su tiempo, diseñado para una consola muy inferior en potencia a los estándares actuales, y a veces, su naturaleza -por mucha resolución y mejoras que se puedan observar- es imposible de ocultar. Por eso encontraremos modelados de unidades, vehículos y soldados muy justos o efectos gráficos y visuales un tanto desfasados. El título está traducido al castellano y cuenta con una sonorización muy notable -con un gran uso del audio multicanal- llena de matices y una banda sonora memorable, que ofrecía temas nuevos, sintonías reconocibles y un doblaje al inglés bastante bueno.
Conclusiones finales
Halo Wars: Definitive Edition es una edición que mejora lo suficiente la entrega original, un juego que sorprendió a propios y extraños en Xbox 360 y que supuso un verdadero cambio de registro para una saga que comenzaba ya a vislumbrar un futuro prometedor en géneros y ámbitos por aquel entonces, inexplorados. Conjuga todo lo bueno de la estrategia en tiempo real, pero la adecua con inteligencia a consolas y lo que es más difícil: la vuelve a llevar a PC.
Quizás resulte demasiado accesible para según qué aficionados, y puede que se quede falto en opciones -seguimos sin comprender la decisión de no incluir, tantos años después, una campaña para el Pacto-, pero su multijugador y su modo escaramuza, así como los nuevos logros, son más que suficientes para ofrecernos unas buenas horas de juego, recordándonos tiempos pasados y sirviéndonos como un más que notable entretenimiento mientras llega Halo Wars 2 en Xbox One y PC.
Hemos analizado este título en su versión para Xbox One gracias a un código para descarga digital facilitado por Microsoft.