Análisis de Serious Sam HD XBLA (Xbox 360)

Más que un clásico intemporal de la acción en primera persona, Serious Sam es una especie de juego de culto, una bocanada de aire fresco que llegó a los PCs en el año 2000 completamente a contracorriente. Mientras que la acción en primera persona, ya por aquella dominante, estaba haciéndose cada vez más complicada, introduciendo más historia, cinemáticas, sigilo y demás, el hasta ese momento desconocido -y ahora de hecho también- estudio croata CroTeam lanzó un juego de acción salvaje, sin complicaciones, siguiendo la jugabilidad directa del primer Doom pero añadiendo armas, enemigos y explosiones a lo grande, con un ritmo de juego altísimo y un generoso sentido del humor.

Esta versión Xbox 360 del remake en alta definición de Serious Sam se ha hecho esperar bastante. Inicialmente prevista para otoño del año pasado junto con la versión para PC, el lanzamiento no fue simultáneo, pero por suerte no sufre de los bugs que plagaban la versión para compatibles. CroTeam se ha tomado estas semanas en serio la tarea de depurar el juego de Xbox 360 para que no se repitiesen las protestas y las críticas, y el resultado final para consola es mejor y más económico (1.200 puntos) que el de PC, manteniendo el frenetismo y los nuevos modos multijugador añadidos para la ocasión.

Se trata de un remake de la versión PC original del año 2000, y no tiene nada que ver con las versiones de consola lanzadas años después que no llegaron ni a la suela de los zapatos del original. Controlamos a Sam Stone, una especie de héroe estándar del mundo de los videojuegos, pero hipermusculado y con mala leche, con la misión de enfrentarnos a una raza de aliens que intenta invadir la Tierra comenzando por las ruinas del antiguo Egipto. Éste es el escenario de batalla perfecto para desplegar un largo y variopinto arsenal de armas con el que tendremos que dar cuenta de decenas y centenares de enemigos, que se acercan a toda velocidad para matarnos.

Éste sigue siendo uno de los puntos fuertes de Serious Sam, vigente de hecho casi diez años después de su lanzamiento. El original era una especie de homenaje y parodia de los primeros juegos de acción en primera persona, pero los superaba con creces en frenetismo y velocidad, y hoy en día, entre tanto motor gráfico e inteligencia artificial adaptativa, la alternativa que propone Serious Sam sigue estando sorprendentemente fresca. Los enemigos salen a montones y no paran de intentar matarnos, y nosotros nos movemos a toda velocidad usando un arsenal de armas variado y contundente para despellejarlos, moviéndonos a toda velocidad para estar a salvo, atacando sin parar, y evitando que los enemigos, algunos de diseño completamente absurdo, acaben con nosotros.

La fórmula funciona bien y no ha envejecido demasiado, y de hecho sería un gran juego igualmente si saliese hoy, por primera vez, para Xbox Live Arcade, porque es el shooter "más arcade" que uno se puede imaginar. Aunque puede volverse repetitivo, sus niveles abiertos, su arsenal de arma y lo carismático de sus enemigos (incluyendo el hombre bomba suicida) hacen que siempre sea divertido jugar unos minutos, un par de niveles, para descargar adrenalina e irritarse los ojos al estar sin parpadear un buen rato. Esto no quiere decir que Serious Sam sea un juego fácil, sin alicientes. A medida que avancemos las situaciones se irán haciendo cada vez más complicadas, pero para estar a la altura no tendremos que desarrollar ningún tipo de región de nuestro cerebro dedicada a la táctica; tendremos que ser más hábiles, ser capaces de manejarnos mejor ante oleadas de enemigos, y tener el gatillo más fácil, o aprovechar mejor cada disparo de nuestro lanzacohetes para hacer más daño. En esta versión para Xbox 360 se incluye además una función de ayuda al apuntado que resultará bastante útil para algunos, aunque simplifica demasiado el control y le quita al juego buena parte de su reto.

El modos multijugador sigue la misma premisa. Por desgracia, se ha eliminado el modo competitivo presente en la versión PC, manteniendo únicamente el modo cooperativo, aunque reduciendo su número a cuatro jugadores. Resulta verdaderamente interesante, permitiendo que cuatro jugadores se embarquen juntos en el modo principal del juego, liberando el antiguo Egipto de hordas de enemigos, y provocando aproximadamente cuatro veces más caos que en solitario. Aunque no aporta nada nuevo ni exige ningún tipo de coordinación entre los jugadores, de nuevo vuelve a ofrecer unas buenas horas de diversión salvaje, frenética y sin pausa. Es una lástima que no se haya mantenido el modo Deathmatch de la versión PC, aunque diese algunos problemas en ésta. No habría aportado nada asombrosamente nuevo, pero siempre es un añadido interesante.

A nivel gráfico Serious Sam ha recibido un más que notable lavado de cara. Su salto a la alta definición no lo sitúa a la altura de ningún referente actual, pero si coge todos los diseños originales y les da un buen repaso, poniéndolos a la altura de un juego estándar de hoy en día, si bien el motor gráfico puede resentirse cuando hay mucho movimiento en pantalla, especialmente en el modo multijugador. No resiste la comparación con cualquier otro título "de tienda" con algo de nombre, pero para tratarse de un juego descargable tiene un aspecto meritorio, y más si tenemos en cuenta que esta "revisión HD" podría haber sido mucho más cutre en la redefinición de modelos poligonales y texturas. La música y el sonido no han cambiado respecto al original... son un poco Serie B, pero pretenden parodiar a todo lo Serie B, así que quedan bien.

Esta remasterización, más que remake, de Serious Sam para la era de la alta definición tiene bastante que ofrecer para todos los jugadores. Los que ya jugaron en su día tienen una buena ocasión de repetir esos momentos de acción extrema, mientras que los que no lo hicieron, sean veteranos en los videojuegos o novatos, pueden quedar muy gratamente sorprendidos por lo que ofrece Serious Sam. No inventa la pólvora, no quita el hipo con sus gráficos ni será un juego especialmente memorable, pero su planteamiento extremo, directo e hiperpoblado de enemigos funciona a la perfección para quitarnos el estrés, o para multiplicarlo durante algunos momentos. Un juego muy apropiado para la distribución digital.