Análisis de OneChanbara: Bikini Samurai Squad (Xbox 360)
Hay videojuegos que destacan por su historia, por su jugabilidad, por su concepción. Títulos que albergan unos personajes que enamoran desde el primer momento, giros inesperados que rompen los esquemas o incluso nuevos géneros que van apareciendo año tras año con el fin de innovar en la industria del videojuego. Poco a poco hemos sido testigos de la evolución de los guiones, de la historia de los videojuegos, enriqueciéndose hasta niveles que antes no eran posibles, comparándose en algunas ocasiones con las súper producciones del cine. Quizá sea por eso, o por el planteamiento totalmente repetitivo y vacío, que la inclusión de las hermanas de sangre envenenada a la nueva generación de videoconsolas -tras un discreto paso por Wii- no acaba de cuajar entre el catálogo.
Una vez más, Tamsoft se encarga de mostrarnos a las chicas más seductoras y atrevidas del momento, armadas con todo lo necesario para conquistar el corazón de los jugones y, de paso, arrancar el corazón de todos los enemigos inimaginables en un juego que, pese a tener ese sabor añejo de machaca botones, no logra encandilar al jugador más de una hora.
¿Quieres mi sangre? ¡Ven a buscarla!
La serie Onechanbara siempre se ha caracterizado por ofrecer una jugabilidad tremendamente arcade y directa, dejando a un lado la historia y todo lo demás para centrarse puramente en los desmembramientos y el modelado de las chicas. Esto se ve desde el primer momento del juego, pues la casi inexistente historia nos incitará a preguntarnos -sin obtener respuesta, por supuesto- lo qué está ocurriendo en la ciudad de Tokyo, lugar donde transcurre la aventura.
No obstante la historia nos devuelve a las dos hermanas más sangrientas del mundo, cuya sangre está endemoniada. Tras el rescate de Saki en la anterior entrega de la serie, las dos hermanas viven tranquilamente en su piso amueblado de la ciudad japonesa. Lamentablemente la paz y tranquilidad de este dúo dura más bien poco, puesto que en pocos días aparece un nuevo brote de zombis en la ciudad dispuestos a arrasar con todo lo que haya por delante. Poco a poco iremos desvelando los misterios de esta sangre tan peculiar, a la vez que conocemos a enemigos que quieren hacerse con ésta, aunque también contaremos con la ayuda de una aliada muy especial, Annna, un soldado de las fuerzas estadounidenses que hará uso de su artillería más potente.
Por otra parte los breves acontecimientos históricos que aparecerán entre misiones nos dejarán un sabor de boca un poco agridulce al mostrar un cóctel de serie b -cuyos seguidores agradecerán- con clichés clásicos que no sorprenderán ni al más pequeño de la casa, aunque en ocasiones tendremos el honor de presenciar unas discretas y escuetas conversaciones entre los enemigos y las heroínas del juego, cuyo papel interpretativo está a la altura de la nueva generación, no así como los diálogos. También veremos secuencias para los momentos más dramáticos del juego, aunque dado el tiempo que lleva el título en la calle -hay que recordar que el juego salió acompañando la videoconsola en el país del sol naciente- no sorprenderán a nadie.
Buffet libre de zombis
Una vez que el usuario acepta que la historia es un convenio entre clichés y ausencias, poco tardará en averiguar que la jugabilidad que ha propuesto la desarrolladora japonesa es simple y adictiva, aunque por desgracia carente de profundidad lo que, sumado a un desarrollo totalmente repetitivo hará que más de uno aparque el juego en mitad de una partida.
Tanto las hermanas como Annna tienen un repertorio de movimientos de lo más escueto, aunque no harán falta más que dos botones para comprender que acabar el juego puede ser un paseo, siempre y cuando tengamos la paciencia suficiente como para no dejarlo de lado. La jugabilidad es directa, con el mítico botón que aporrearemos a mansalva para terminar con todos los enemigos en pantalla, mostrando combos automáticos con los que podremos acabar hasta con los enemigos más poderosos. En esencia, Onechanbara Bikini Samurai Squad no requiere más que un par de movimientos para terminar con los enemigos, pues no solo estamos ante unos contrincantes de dudosa inteligencia artificial, sino que además los enemigos finales tampoco supondrán un reto mayor.
Ya en pleno juego, tomaremos el control de un personaje, el que nosotros escojamos -siempre que el guión lo permita-, teniendo un segundo personaje en la retaguardia con el que apoyarnos en el caso de que estemos en las últimas. Sin embargo, en algunas ocasiones veremos que estamos solos ante el peligro, por lo que habrá que andar con pies de plomo si no queremos que se acabe la misión repentinamente.
Contaremos, además, con un medidor especial, cuya función principal será otorgarnos un poder superior con el que acabar con los enemigos, tal y como ocurre en series tan conocidas como Devil May Cry. De esta manera tendremos ataques devastadores que enviarán a decenas de enemigos al infierno, pese a que nuestra salud se verá resentida ante tal poder, por lo que habrá que usarlo sabiamente.
El sistema de aumentos de la obra nos permitirá mejorar los atributos de las protagonistas para hacer el juego más fácil, aún si cabe. A medida que vayamos superando misiones y acabando con los enemigos -cuyos cuerpos dejarán experiencia- podremos mejorar la vida de las hermanas, así como la fuerza, resistencia y nivel de habilidad, que, como no, hará que aprendamos nuevas habilidades exclusivas de cada seductora.
Por otra parte, los escenarios que propone el juego son un cúmulo de pasillos cerrados que harán bostezar a más de uno debido a su repetición constante en el juego. Bastará con fijarse en el mini mapa que tendremos en la interfaz del juego y localizar a los enemigos para darse cuenta de lo pequeño que es el entorno en el juego, imposibilitando la libertad de movimientos y haciendo tediosa un tarea que, a priori, debería ser divertida, como es matar zombis.
Modos de juego
Onechanbara: Bikini Zombie Squad pone a disposición del jugador una serie de modos de juego para completar la -por desgracia pésima- experiencia de juego. Más allá del modo historia, en el que tendremos diversos niveles de juego (cada cual más fácil), la obra se completará con varias propuestas, unas más interesantes que otras.
Sin duda, lo más divertido del juego es el modo cooperativo, que pese a no incluir un modo online, nos dará la oportunidad de jugar con un amigo, llevando uno a cada protagonista. Por desgracia el contenido online es inexistente, por lo que tendremos que conformarnos a jugar a pantalla partida, con la pérdida de visión que eso supone; eso sin contar que por causas del guión en ocasiones no podremos jugar en su vertiente multijugador, sino que tendremos que esperar a que la historia lo permita.
Profundizando un poco en la temática machaca botones, Tamsoft nos ofrece los modos de juego libre y práctica, donde podremos hacernos con los controles de las hermanas sin temor a que perdamos vidas. Es aconsejable comenzar con el modo práctica, pues el modo historia se desentiende de tutoriales, y hay detalles (como por ejemplo la inutilización de las armas cuando están recubiertas de sangre).
Por otro lado, uno de los modos que más gustará a los seguidores de la seducción tridimensional será el modo vestimenta, en el que podremos vestir a las protagonistas con multitud de trapitos y complementos, ideales para hacer la guerrera de nuestros sueños.
¿Título de salida?
Antes de hablar del apartado técnico del título hay que aclarar que el juego a desembarcado de Japón con un "ligero" retraso de tres años, pues el juego lleva en territorio japonés desde diciembre de 2006, por lo que la técnica, que ya en su día no era muy destacable, se verá mermada al competir con una cantidad impresionante de software que deja a la altura del betún el modelado de las chicas, por muchos pechos que tengan.
De esta manera nos encontramos con uno de los títulos más pobres técnicamente del catálogo de Xbox 360. Poco tardará en darse cuenta el jugador de que todos los recursos técnicos se los ha llevado el modelado de las mujeres, en pos de ofrecer un apartado completamente desfasado en todo lo demás. Es decir, las mujeres lucen bien, con su buena dosis de sensualidad, movimientos y "atributos" correspondientes, cuyos ataques acabarán con unos zombis repetitivos, que piden a gritos un repaso gráfico y más variedad, pues parece que siempre nos estemos enfrentando a los mismos enemigos una y otra vez.
Pese a todo, los desmembramientos y amputaciones que veremos desde el primer minuto de juego no están mal del todo. Podremos partir a nuestros enemigos por diversos ángulos, hacer que se queden sin cuerpo -siendo atacados por unas piernas, todo sea dicho-, etc, con un festival de sangre que pocas madres tolerarán.
El sonido, por otra parte, cuenta con melodías cañeras que incitarán a terminar con los enemigos en un lapso de tiempo relativamente corto. Sin embargo, el problema lo tienen los efectos de sonido, que no solo están completamente desfasados, sino que además estarán sonando constantemente, molestando al jugador y obligándole, en muchas ocasiones, a bajarlos desde el menú de opciones. Los gritos de los zombis, el crujir de la carne muerta y el sonido de los pájaros son claros ejemplos de ello. Esta entrega contará también con un más que correcto doblaje original japonés, con el que se narrarán los -pocos- acontecimientos vividos en la aventura, conformándonos con unos textos en completo inglés.
Conclusiones
Pese a que la serie de Onechanbara lleva ya mucho tiempo en la industria del videojuego, parece ser que el desembarco de las hermanas en la nueva generación no ha llevado consigo esa calidad mínima que se necesita. Es por eso que nos encontramos ante un título soso, carente de profundidad y con una historia que hará reír a más de uno, y no precisamente por sus toques de ironía -que no la hay-. Además, el género no es que pase desapercibido en la consola, sino que existen multitud de alternativos mucho mejor planteadas y llevadas a cabo que este Bikini Samura Squad.
En definitiva, un título que sólo gustará a los más seguidores de la serie, las personas cuyo entretenimiento audiovisual se base en ver a muchachas ligeras de ropa masacrando enemigos y aquellos quienes quieran acabar con zombis gastando poco dinero, pues el juego ha llegado a las tiendas a precio reducido, un pequeño detalle a tener en cuenta.