Análisis de Marvel vs. Capcom 3 (Xbox 360, PS3)

Por fin estamos en la semana del lanzamiento de Marvel vs Capcom 3, una continuación que se ha hecho de rogar más de diez años, el tiempo que llevan esperando los que disfrutaron de la divertida y alocada segunda parte. Llega en un momento en el que hay un sentir general de que la lucha en dos dimensiones está viviendo una segunda juventud, gracias a dos títulos tan importantes como Street Fighter IV y BlazBlue, que han hecho las delicias de los amantes de las peleas bidimensionales en los dos últimos años.

Capcom ha tenido mucha parte de culpa en volver a poner de moda entre el público generalista este tipo de juegos, y tras reeditar Marvel vs Capcom 2 en el verano del 2009 para Xbox Live Arcade y PlayStation Store, y comprobar gracias a unas excelentes ventas que aún era un título del agrado de los jugadores, se pusieron manos a la obra para ofrecernos esta tercera entrega, que llega con algunos cambios, pero que mantiene en gran medida el espíritu y la base jugable de aquel, aunque con unos personajes más trabajados.

Además del incesante goteo de vídeos presentando nuevos personajes desde su anuncio oficial -algo agotador y que ha lastrado un tanto el factor sorpresa-, el juego ha pasado por diversas ferias a lo largo de estos meses donde lo hemos ido probando -incluso los aficionados españoles lo pudieron disfrutar en el pasado Gamefest celebrado en Madrid-, y después de la beta de la que os hablamos en enero, en la que catamos 30 personajes, está claro que a estas alturas a nadie le sorprende que nos encontremos ante un título excelente. Pero la excelencia tiene grados, y en este caso dependen de los modos de juego, las opciones, y el plantel final de personajes, que veremos si es lo suficientemente completo, compensado, y no se notan recortes pensados para hacernos pasar por caja mediante contenidos descargables de pago, ya anunciados antes de su lanzamiento y causa de bastantes mosqueos por parte de los aficionados.

Un plantel de 36 personajes muy completo y variado, en el que todos echaremos de menos a alguien

Al final la lista de personajes es la siguiente: Wesker, Tron, Zero, Super-Skrull, MODOK, Dormammu, Chris, C.Viper, Chun-Li, Thor, Iron Man, Doctor Doom, Trish, Dante, Ryu, Captain America, Spiderman, Storm, Amaterasu, Spencer, Viewtiful Joe, Wolverine, Deadpool, Magneto, Arthur, Morrigan, Felicia, X-23, Hulk, She-Hulk, Haggar, Phoenix, y desbloqueables en el propio juego Akuma, Taskmaster, Hsien-Ko y Sentinel, tarea que se consigue reuniendo puntos en los distintos modos de juego, y que no nos costará mucho lograr. Pagando podremos desbloquear a Jill Valentine y Shuma-Gorath, y mucho nos tememos que son los primeros de una generosa lista que les acompañará en los próximos meses.

Cuando hablamos de dos universos tan ricos en protagonistas como son los de Marvel y Capcom, es imposible que al hacer una selección se pueda satisfacer a todo el mundo, y muchos echarán de menos a clásicos como Ken y Megaman, otros más actuales pero que se han ganado el favor de los aficionados como Frank West, y eso sin querer entrar en el universo Marvel, con una inabarcable lista de posibles que se podían haber incorporado (esos Gambit, Cyclops...). Aunque curiosamente casi hemos oído más quejas entre los fans por los que sobran que por los que faltan, pero una vez se profundiza en el juego se comprueba que todos los personajes tiene un sentido, con sus puntos fuertes y débiles, estando todos bastante bien compensados, sin destacar ninguno demasiado para bien o para mal, o casi.

Cualquier personaje puede llegar a ser letal con los apoyos adecuados, por lo que es más importante la formación de un buen equipo que simplemente elegir tres luchadores muy buenos, ya que como podréis comprobar, un trio de perfil bajo si se complementa bien puede llegar a ser mejor que un equipo formado por personajes por encima de la media pero que no "congenian" entre ellos. Incluso con los que peores sensaciones o falta de simpatía tengamos en un principio, si les damos una oportunidad, descubriremos que no son tan malos, y si les arropamos con dos compañeros adecuados nuestra opinión cambiará de ellos.

Por tanto, nos parece que los personajes está muy trabajados y bien pensados -bastante más que en el título anterior-, y no creemos que sobre ninguno y todos son disfrutables a su manera. Incluso algunos cuentan con sus propias particularidades jugables, siendo uno de los mayores ejemplos el personaje de Phoenix, que si se dan las circunstancias apropias resucita de sus cenizas...

Aunque por más que hayamos jugado contra la máquina -o con otras personas- no hemos notado grandes desequilibrios, seguro que una vez esté el juego en la calle con miles de jugadores disfrutando del modo online empiezan a aparecer los trucos y los personajes que por algún motivo desnivelan la balanza, aunque esperamos eso no ocurra de manera tan exagerada como en Marvel vs Capcom 2, pero la verdad es que uno de los nuevos ya nos da mala espina.

En las impresiones de enero comentamos que la selección de luchadores estaba muy bien compensada, sin ninguno que marcara las diferencias, pero entonces no estaba Sentinel, un personaje que nos tememos traerá bastante polémica. En un combate entre expertos jamás resultará determinante -o al menos no si no cuenta con un buen equipo detrás que le respalde- ya que sabrán contrarrestarlo, pero en combates entre jugadores medios puede que cause estragos, debido a lo poderoso de sus ataques y el gran espacio del escenario que puede llegar a cubrir sin problemas. Seguramente no acabe siendo el único personaje "truquero" –hay alguno más que nos huele que se prestará a ello-, pero no queramos lanzar acusaciones tan temprano.

Accesible para los nuevos y los menos habituados, profundo para los más expertos

El control es sencillo: ataque débil, medio, fuerte y especial, más los dos botones R y L para llamar a nuestros compañeros, ya sea para darnos el relevo o para realizar un ataque. Antes de elegir a nuestros personajes tendremos que elegir el sistema de control, entre normal o simple –aunque se puede desactivar en el menú de opciones-. Con este último realizamos ataques especiales pulsando un solo botón, y la verdad es que no le vemos la gracia, ni para jugadores no muy habituados, ya que los golpes que nos facilitan con una sola pulsación son los más sencillos, que cualquiera y casi sin querer podrá realizar, así que el único sentido que le vemos es para jugadores que jamás hayan probado un juego de lucha, que suponemos, "haberlos haylos".

Luego, cada vez que elegimos a uno de los tres luchadores, debemos seleccionar el tipo de asistencia que van a realizar: alpha, beta y gamma. Cada una de ellas lleva una pequeña descripción en cuanto a su alcance y dirección, para que no tengamos que elegir ciegamente. Una vez en el combate las condiciones son las de siempre, siendo la mayor novedad el llamado "X Factor". Es una habilidad que podemos activar en cualquier momento pero solo una vez en cada combate durante un tiempo limitado, y nos permite realizar un ataque demoledor, pero cuya efectividad depende del momento en el que lo usemos, por tanto, se vuelve más efectivo cuando nos quedamos sin personajes y estamos desesperados, por lo que su uso le da un toque estratégico a los combates.

El sistema de combos, a diferencia de otros juegos de lucha más complejos –que no más profundos- logra satisfacer a todo tipo de público: desde el que se acerca por primera vez a un juego de este tipo, ya que podrá realizar vistosos golpes desde el principio sin muchos problemas, pasando por los que se echan unos vicios de cuando en cuando a un juego de lucha, y llegando al experto, que podrá hacer auténticas diabluras y rascar varias capas de complejidad inapreciables en un principio, realizando interminables combos donde a veces parece que el único límite es nuestra imaginación.

Especial cuidado habrá que tener en esta entrega con las asistencias, ya que a diferencia de la segunda parte, aquí nuestros compañeros son muy vulnerables cuando aparecen en el escenario para realizar un ataque, y si son víctimas de un especial de nuestro rival su barra de vida se verá muy mermada. Por lo que hay que medir sus apariciones y no invitarles a lo loco, y comprobareis como una mala gestión de las ayudas os costará más de un combate, siendo el juego poco permisivo con este tipo de errores.

Un tanto decepcionante en cuanto a modos de juego

Después de varias tomas de contacto con él en diferentes ferias y la beta de enero en la que solo podíamos combatir una y otra vez, teníamos curiosidad por ver los modos de juego y las opciones, y la verdad es que en lo primero nos hemos llevado una pequeña desilusión. Al iniciar se nos delimitan claramente los modos sin conexión y online, y podemos acceder a nuestra licencia.

En esta vemos los puntos que hemos conseguido, nuestro estilo de combate, todas las estadísticas –desde las victorias y las derrotas hasta las veces que hemos usado a cada personaje-, elegir una imagen de jugador, podemos diseñar hasta tres equipos para luego usar en los combates, y también contemplar los títulos obtenidos. Estos son una especie de logros internos que se consiguen usando cierto número de veces un personaje o consiguiendo una cantidad determinada de puntos, y hay suficientes para mantenernos entretenidos durante una temporada consiguiéndolos todos -290-.

En los modos sin conexión encontramos Arcade, que no necesita presentación, en el que tenemos que superar varios combates hasta llegar al enemigo final, Galactus, un combate algo especial dividido en dos partes. En Versus tendremos la posibilidad de enfrentarnos a un colega de manera local, y en Entrenamiento podremos practicar todos los movimientos, siendo muy completo y versátil ya que nos dejan modificar multitud de variables, pero no hubiera estado de más un tutorial, para que los nuevos jugadores de la franquicia se familiarizaran con las dinámicas de juego. El modo quizás más original o atípico es Misiones. Aquí tendremos diez misiones por personaje, y estas consisten en realizar una secuencia de movimientos, siendo estos –lógicamente- cada vez más difíciles y complejos, y que nos pueden servir para entrenarnos y conocer más en profundidad a cada personaje.

Después de los espectaculares episodios en forma de vídeos que nos ha ofrecido Capcom estos meses, parecía que el juego iba a contar con una historia tras de sí, por primera vez en la serie, y que los hilos argumentales de ambos universos iban a quedar unidos de alguna manera, aunque fuera ligera, pero que muchos agradecerían. Es decepcionante comprobar que no hay apenas nada de eso, que solo se incluye un vídeo más que no habíamos visto –espectacular eso sí-, y que no se han atrevido, por pequeño que sea, a incluir un modo historia, ya que los finales de los personajes, que consisten en tres ilustraciones con unos textos, nos saben a poco, a pesar de que en algunos casos tienen su gracia y resultan sorprendentes (nos ha gustado especialmente, entre otros, uno en el que aparece Phoenix Wright).

El modo online en esta versión para la prensa funciona sin problemas, pero no podemos valorarlo, siendo el momento adecuado para comprobar lo bien que funciona cuando miles y miles de jugadores por todo el mundo le están pegando fuerte al juego. Si os podemos mencionar algunas de sus opciones, como la búsqueda y creación de lobbys, y como ya se viene diciendo, la decepcionante ausencia de un modo espectador, y también de repeticiones. Debido a esto y a que lo vemos un poco pelado en cuando a modos de juego y opciones –entre otras cosas- nos vemos en la obligación de transmitiros una corazonada, y es, a pesar de no querer ser mal pensados, que volvemos a intuir –al igual que con los personajes- la alargada sombra de los contenidos descargables de pago, ya que da cierta sensación de que han levantado el pie para no incluir ciertos modos, para ser incluidos posteriormente.

Las opciones de configuración son muy completas, y podemos modificar a nuestro antojo la posición del HUD, cambiar las voces por defecto de nuestros personajes de manera individual, ya sea al inglés o al japonés –solo con los personajes de Capcom-, configurar los efectos de sonido y la música como clásicos o dinámicos, activar o desactivar los comentarios en los combates, configurar el mando cómo queramos, en fin, unas opciones muy completas donde no echaremos en falta nada. Por último nos queda mencionar la galería, que alberga todos los vídeos, biografías, finales, arte y sonido que incluye el juego, y que se va completando poco a poco.

Una delicia visual, aunque no tanto musical

Antes de entrar en tecnicismos, decir que el juego luce espectacular, siendo uno de los títulos de lucha más vistosos que nos hemos echado a la cara nunca. Capcom vuelve a hacer uso de su motor gráfico creado para esta generación de consolas, MT Framework, con el que vuelven a demostrar su versatilidad y el ser una de las pocas compañías japonesas que se han sabido adaptar correctamente a Xbox 360 y PlayStation 3.

Seis personajes moviéndose a una velocidad endiablada, multitud de efectos, todo con un gran colorido, y el juego no parece nunca despeinarse, sin bajar -casi nunca- su tasa de imágenes por segundo. Si contemplamos más de cerca y con detalle los personajes nos daremos cuenta que no tienen unos modelados poligonales demasiado complejos, ni unas texturas deslumbrantes, pero a la hora de la verdad el acabado en pantalla es magnífico, por tanto, tienen un diseño muy efectivo y funcional, sin dejar de ser vistosos. Si acaso, nos han decepcionado un poco los trajes, ya que en casi todos los personajes no son más que un cambio de color, aunque en algunos en concreto sí cambia su diseño, y se agradece, pero se echa de menos que esto no pase en más ocasiones (¿hemos dicho DLC?).

Los escenarios están a la altura del resto del apartado gráfico, y son geniales, con multitud de detalles y con elementos en ellos que se mueven y van cambiando, aunque entre uno de los más sosos, Tricell Laboratory -de Resident Evil-, y unos de los más vistos y originales, Demon Village -Ghosts 'n Goblins-, hay un gran salto de calidad, aunque el número final, diez, nos parece un poco escaso.

El apartado sonoro es contradictorio, ya que los efectos de sonido tiene un nivel muy alto, pero la música no nos ha gustado, a sabiendas de que es posiblemente uno de los apartados más subjetivos en cualquier videojuego, y suponemos que a muchos les gustará, aunque no es nuestro caso. Es curioso ya que la banda sonora de Marvel vs Capcom 2 fue muy criticada en su día por su peculiar estilo, pero vista en perspectiva al menos tenía alma, carisma y cierta personalidad, pese a su excentricidad, pero aquí nos encontramos unas melodías electrónicas no muy inspiradas, que en ocasiones estropean grandes temas clásicos de Capcom convirtiéndolos en vulgares canciones "bacalaeras" sin ningún tipo de gracia. Salvamos algunas muy concretas, o las de los menús, y la verdad es que cuando estemos enfrascados en los frenéticos combates no las haremos mucho caso, ya que se las comen los efectos de sonido.

Con estos sí se ha hecho un gran trabajo, siendo variados y numerosos, contando todos los personajes de Capcom con voces en inglés y japonés. Son sorprendentes algunas interacciones entre los personajes, ya sea estando en el mismo equipo, ya que al darse el relevo se harán en ocasiones comentarios particulares -por ejemplo llamarse por el nombre de pila-, o enfrentándose en equipos diferentes, donde a veces escucharemos curiosas descalificaciones personales.

Espectacular y tremendamente divertido

Están de enhorabuena los amantes de la lucha ante la llegada de semejante juegazo. 36 personajes, que aunque son menos que los que traía su predecesor, están más trabajados, diferenciados y donde no sobra ni falta nadie, por lo que tendremos auténticos quebraderos de cabeza para formar equipos de tres. Una jugabilidad divertida hasta el extremo, que quizás no guste a los que busquen unas peleas más técnicas, pero que pese a su espectáculo visual esconde un título bastante profundo. El mayor aspecto negativo son sus modos de juego, tanto locales como online, que dan cierta sensación de que podían haber sido más generosos, y desentonan con lo cuidado que están el resto de apartados.

Muy recomendado para los aficionados a la lucha 2D, un obligatorio para los que disfrutaron de la entrega anterior, una excelente posibilidad de retomar un género que algunos abandonaron hace años, y una buena opción para otros muchos de descubrir un nuevo estilo de juego, de la mano de tan curioso y carismático plantel de luchadores.