Análisis de Skylanders SWAP Force (Wii, Wii U, PS3, Xbox 360)
Dice el refrán que quien golpea primero, golpea dos veces. Y Skylanders lo ha hecho no dos, sino tres veces antes de que sus posibles competidores hayan reaccionado. Es probable que Disney Infinity se asiente rápidamente respaldado por toda la fuerza de un emporio lleno de personajes conocidos, pero los skylanders forman ya parte de la imaginería de esta generación de chavales, y por méritos propios. Sin películas ni decenas de años a las espaldas, los defensores míticos de Skyland han cautivado a los más jóvenes.
Activision fue la primera en utilizar la tecnología NFC como base para un juego, diseñando figuras que se convierten en personajes del juego poniéndolos en una plataforma que se llama "Portal de poder". La figura guarda los datos del personaje, de forma que puedes llevártela a casa de un amigo y jugar subiéndola de nivel y luego usarla en tu propio juego.
Por tercer año la serie ofrece un título excelente que parte de una historia trabajada para que sea apetecible y que se incluye con lógica en la mitología de Skyland, el ficticio mundo en que se ambienta.
Vicarious Visions, que se encargó de las versiones de las consolas de Nintendo en los dos primeros juegos, se encarga ahora de las de PS3, Xbox 360 y Wii U. La versión de 3DS difiere de las demás, con niveles distintos, otra historia y un personaje diferente, por lo que queda fuera de este análisis.
En Swap Force encontramos los elementos que definen ya la serie, como el bravucón y en parte ingenuo capitán Flynn, las ovejas que campan por Skyland y son achicharradas (una seña de identidad que recuerda a las gallinas pateadas de Fable), el malvado Caos, enemigos menores como los Greble, zonas que se desbloquean sólo para uno de los ocho tipos de skylander que hay o, lo más importante, un nuevo tipo de skylander en cada título.
El año pasado fueron los skylander gigantes, este año llegan los intercambiables. Según la leyenda, un grupo de estos guerreros míticos defendía las islas flotantes Rompenubes. Tras una erupción del volcán que hay en las islas hubo una pelea y los guerreros quedaron atrapados. La magia que quedó prisionera también dentro del volcán les otorgó nuevos poderes, convirtiéndoles en la Swap Force, de forma que podían intercambiar las partes superiores e inferiores de su cuerpo para crear un nuevo guerrero.
En la práctica esto se traduce en 16 nuevas figuritas que combinan sus dos partes para lograr en total 256 personajes. Más o menos, porque en realidad el nuevo personaje mantiene las características de sus partes en lo referente a los ataques, y tendrá el nivel (y el dinero) de la parte superior del cuerpo. Y si ésta se queda sin puntos de vida, lo hará en todas las combinaciones con otras partes inferiores también.
Un diseño cuidado de las figuras intercambiables
Físicamente, el diseño de estas nuevas figuritas está cuidado hasta el mínimo detalle. Se unen ambas partes con dos imanes, de forma que es muy rápido el cambio de cuerpos. Frente a la variedad de colores en los skylanders anteriores, en esta ocasión la patrulla nueva se mueve entre el dorado, el azul y un suave rojo.
Aunque puede dar la sensación de que queda monótono, es todo un acierto ya que consigue que la combinación de partes superiores e inferiores no chirríe casi nunca y quede bonita. El Pack de Inicio incluye dos figuras Swap Force: Blast Zone, un robot que lanza bombas y tiene un potente ataque de fuego, y Wash Bucker, un pulpo pirata armado de una espada y una pistola.
Ambos son figuritas atractivas y se mueven muy bien en pantalla, pero –uno de los pequeños desajustes del juego- el robot es más mortífero a la hora de atacar, sobre todo cuando no están muy desarrollados los personajes, lo que puede inclinar rápido la balanza en las luchas competitivas en la arena. Al intercambiar sus cuerpos aparecen Wash Zone y Blast Bucker.
La tercera figura del pack es Ninja Steel Elf, una nueva encarnación de una skylander ya conocida. Y es que junto a las 16 nuevas figuras saldrán otras de juegos anteriores en otras posiciones y colores.
Para convertir una figura en personaje simplemente debes ponerla en el nuevo portal de poder que sustituye a los anteriores, ya que no estaban preparados para la tecnología intercambiable de la Swap Force. En cualquier momento puedes cambiar la figura y en menos de cinco segundos se ve reflejada la modificación en la pantalla.
La historia es la habitual lucha contra Caos, un malo que tiene la peculiaridad de tener que soportar a una madre dominante y bastante insoportable, que ha construido con la oscuridad petrificada unos dispositivos malificadores que pretende convertir a los cuatro elementales en seres propagadores del mal.
El aspecto infantil del juego y su humor blanco encajan perfectamente con el público juvenil al que se dirige, pero si lo imaginamos con otra ambientación y unos gráficos más adultos todos los elementos encajarían sin problemas. Swap Force tiene una jugabilidad excelente, una curva de dificultad con pocos picos bruscos. Es un juego largo que consigue mantener la emoción, que incluye variaciones en los niveles para no resultar aburrido, y que combina las arenas con partes de plataformas, puzles y acción.
Minijuegos, puzles, coleccionable y oleadas de enemigos
Skylander ofrece al jugador diversas motivaciones para jugar. Por un lado, subir de nivel los personajes-figuras, conseguir dinero para mejorar sus características, completar los múltiples coleccionables que hay, subir de nivel como maestro del Portal de Poder…. Varios tipos de minijuegos suponen otro aliciente para seguir jugando, como abrir cofres con un puzle en el que hay que unir dos chispas. El contenido que ofrece el juego es inmenso y poco habitual en un juego destinado a chavales.
La primera vez que juegues a la campaña ya podrás subir de nivel unos cuantos personajes y conseguir desarrollar su (por otro lado corto) árbol de habilidades, pero hacerte con los coleccionables te llevará a visitar los niveles varias veces.
Si no quieres rejugar lo mismo una y otra vez tienes otras opciones, como participar en la arena en alguna de las vertientes que tiene: sobrevivir a oleadas de enemigos ya sea en solitario, en modo cooperativo o competitivo (logrando más puntos que el rival); como arena de combate estableciendo las condiciones de la pelea con el otro jugador; o un modo similar al sumo en el que debes echar del escenario a tu rival.
En cada fase hay zonas que se desbloquean sólo con un tipo de Skylander determinado (se dividen en ocho clases). Esto es típico de la serie, pero en este caso hay zonas mixtas, destinadas a la Swap Force, aunque también se pueden abrir si juegas en cooperativo y cada uno de los jugadores lleva un skylander normal de uno de los dos elementos necesarios.
Otra de las novedades de este año está en los pies de la Swap Force. Un símbolo en los pies de la figura indica una habilidad del personaje que lleve esos pies. En las fases hay zonas que sólo se abren a los skylanders que la tengan, ya sea un cohete o la habilidad de taladrar el suelo.
El juego cooperativo es uno de los fuertes de Swap Force. El modo campaña gana mucho aunque no puedes separarte mucho de tu compañero, pese a que en las partes de velocidad puede ser complicado. Por ejemplo, deslizarte a toda velocidad por unos raíles cuando el personaje que te precede es un gigante es garantía de que te vas a llevar por delante casi todas las minas que encuentres.
Hasta en los minijuegos en que sólo puede participar uno de los dos personajes es divertido el cooperativo, ya que el jugador que no tiene la característica necesaria para jugar puede ayudar a su compañero a llegar hasta la meta de distintas maneras, según sea la prueba.
Si quieres subir de nivel como maestro del Portal de Poder puedes hacerlo con cualquiera de estas opciones, ya que hay múltiples objetivos que te conceden las estrellas necesarias para subir de nivel. El hecho de que tengas que tener un nivel mínimo de Maestro para poder usar los pedestales de Madriguera de Madera con los tesoros legendarios es un buen incentivo.
Habrá chicos que tengan suficiente con el Pack de Inicio y los skylanders que tengan de juegos anteriores, y otros (tal vez no tan chavales) que necesiten tener todas las figuras y quieran probar las 256 opciones. El juego le dará a cada uno lo que quiera, porque el jugador decide la profundidad con la que quiere explorar las islas Rompenubes y si pasa mucho tiempo pescando o lo limita a las misiones que lo requieren. Si eres un jugador novato al que le han llamado la atención las figuras no tendrás problema en aprender el funcionamiento del juego, y si ya eres un veterano de la serie paladearás las novedades.
¿Las tres figuras del Pack de Inicio, o toda la colección?
Con títulos como los de esta serie es como se consigue crear un público para el futuro, con juegos que tratan a los más jóvenes con respeto como jugador. Las figuras suponen un dinero extra que hay que tener en cuenta, a 15 euros las de Swap Force y 10 euros las demás, pero quien sea un apasionado del juego sin duda amortizará el gasto teniendo siempre un Skylander que se adecúe a lo que necesitas en cada momento, ya sea porque en esa zona es más fuerte ese elemento o para abrir zonas nuevas.
Vicarious Visions ha logrado que la serie dé un paso en la dirección adecuada, ampliando las posibilidades, confiando en los jugadores, logrando que las figuras tengan más lógica que nunca, ya tengas solamente las tres del Pack de Inicio o las decenas de figuras de juegos anteriores y que también funcionan en el nuevo Portal de Poder.
El apartado gráfico, que en Giants era uno de los puntos más débiles, se ha visto reforzado; islas Rompenubes es emocionante, lleno de acción y enemigos. Los escenarios son muy diversos y con personalidad. Especialmente destacable es el diseño de los nuevos personajes; casi se puede adivinar una personalidad en cada uno de ellos. Sin parecer uniformes, los miembros de la Swap Force pueden presumir de funcionar sin estridencias con los demás skylanders y entre sí y son un derroche de imaginación
A veces, sobre todo en la arena, la pantalla se llena de rivales a los que debes eliminar y el juego resiste bien, quitando alguna caída ocasional de frame rate. Las llegadas a los niveles en los que está alguno de los elementales son especialmente vistosas. La música es un gran acompañamiento de lo que sucede en pantalla y ambienta cada momento de la acción con cierto. El guión es ágil y el doblaje muy bueno.
Este fin de año los jugadores más jóvenes (y alguno no tan joven pero que sabe ver la calidad en un juego) están de suerte con títulos de calidad como Pokémon X y Pokémon Y, y aún quedan por llegar nuevas entregas de otra buena serie: Invizimals. Las criaturas fantásticas tienen una buena pelea por delante estas navidades.