Análisis de Monster Hunter Tri (Wii)
Monster Hunter Tri abre la veda en Wii trayendo a tu salón unos cotos de caza en los que te enfrentarás a los animales de tú a tú; un mundo más completo aún que títulos anteriores de la serie con un nivel técnico impresionante y una jugabilidad emocionante. Ya juegues en solitario, con otro amigo o formes parte de una partida de caza, sentirás la excitación del acecho y la intensidad de la lucha.
También es un título rompe-mitos. Wii arrastra desde su salida al mercado varios sambenitos: se considera que los usuarios no esperan calidad gráfica, que los desarrolladores no intentan hacer juegos hardcore porque el público mayoritario no suele jugar mucho tiempo y que no hay posibilidad de jugar online comunicándose de forma satisfactoria con otros sus usuarios (con alguna honrosa excepción de títulos de Nintendo).
Tri ofrece los mejores gráficos vistos hasta ahora en la consola, tiene en cuenta a los jugadores menos expertos sin perder un ápice de personalidad y ofrece un juego online en el que podrás interactuar como desees con el resto de los jugadores.
Como iniciar en la caza a los jugadores menos experimentados
La cinegética en Monster Hunter no es tan sencilla como coger un arma, ir a por un animal y atacarle sin parar. Para lograr el éxito hay que conocer a la presa, su hábitat y sus costumbres, llevar el equipo adecuado y seguir la estrategia correcta en los ataques. Todo esto sería abrumador si no fuera porque Capcom ha establecido una curva de aprendizaje modélica.
La serie tiene un éxito arrollador en Japón, pero en Europa no ha conseguido aún atraer a un número alto de jugadores. Si hay un título que puede lograrlo es Tri. Capcom ha realizado un esfuerzo titánico en introducirte en las normas de la caza sin que te aburras ni un momento ni te sientas sobrepasado por la magnitud del juego y los elementos que contiene. Pero aunque te hayas cobrado rathian en títulos anteriores de la serie no te sentirás constreñido con Tri, porque lograrás avanzar más rápido. Es el precio que hay que pagar por intentar que la serie llegue a un mayor número de jugadores.
No obstante, no hay que confundir el interés en cuidar a los cazadores inexpertos con la benevolencia. Puede que Tri no sea tan implacable o ponga a prueba tu tolerancia a la frustración como los títulos anteriores, pero sigue castigando a los impacientes y premiando la constancia y el temple. Deberás trabajar duro, recorrer innumerables veces los diez mapas del juego y desarrollar la estrategia adecuada para convertirte en un cazador avezado e ir consiguiendo un buen equipo.
El arsenal de la serie es famoso por su inmensa variedad, con espadas pequeñas y grandes, hachas, lanzas, arcos, ballestas... En Tri tienes además el hacha espada, que puede cambiar entre esos dos tipos de arma consiguiendo características diferentes en cada momento. Como todo en Monster Hunter, la ideoneidad en el equipo que debes llevara cada misión no depende tanto de tus preferencias personales como del enemigo al que tienes que enfrentarte.
Para mantener la emoción en el modo historia, el hilo argumental te muestra desde el principio tu objetivo principal en el modo historia, el lagiacrus. Cuando tengas que entrar en su ecosistema no podrás evitar mantenerte en tensión, con un ojo vigilando siempre tu espalda para no ser el cazador cazado.
Todo guerrero debe tener un lugar para descansar. En Monster Hunter Tri está en Moga, una pequeña aldea destruida al principio del juego y que ayudas a reconstruir obteniendo recursos en el bosque. No sólo percibes que cada vez son mejores tus habilidades de caza, sino que ves que contribuyes a hacer de Moga un lugar próspero. También tu vida será cada vez más fácil: envías barcos que pesquen por ti, obtienes en la granja útiles hierbas para tus pociones…
Aunque inicialmente cuesta un poco acostumbrarse a la burocracia (todas las misiones tienen que pasar por el gremio de cazadores y debes visitar a Junior siempre que desees convertir los recursos) transcurridas unas cuantas horas de juego agradecerás los ratos que pasas en Moga comprando, intercambiando, forjando armaduras o incluso decidiendo cómo colocar el mobiliario de tu casa.
La novedad más importante es la introducción de ecosistemas desérticos (que requieren armaduras y pociones especiales para resistir las temperaturas) y marítimos. De hecho, el lagiacrus es el rey de las profundidades marinas.
Esto ha permitido establecer una jugabilidad vertical. Ahora podrás esquivar en cualquier dirección espacial y atacar a los animales desde arriba, aunque las distancias son algo diferentes y la velocidad se ve mermada. El control del personaje es bastante preciso y aguantas bajo el agua el tiempo suficiente como para que no sea un problema acuciante casi nunca. La cámara, algo difícil de controlar en ocasiones, es un poco más rebelde bajo el agua, sobre todo cuando estás cerca de las paredes marinas.
Un multijugador soberbio, ya sea con un amigo o formando parte de un grupo
A lo largo de decenas de horas te irás convirtiendo en un cazador cada vez más experimentado y hábil. Tu caja se llenará de munición, equipos y pociones. Pero, aunque la caza en solitario es divertida, más emocionante es formar parte de una partida de caza para conseguir mejores recompensas o hacerte con las presas más difíciles.
Sabedor de que la gran fuerza de Monster Hunter reside en compartir la caza con otros jugadores, Capcom ha preparado uno de los multijugadores más completos y bien diseñados que se puede ver actualmente, y estamos en un momento dorado para este modo de juego. No ha sido posible probarlo con los servidores de jugadores reales, de modo que lo que aquí se diga puede sufrir modificaciones cuando entres en Loc Lac, pero las partidas de prueba han sido formidables. Tri permite que muestres al resto de jugadores tu interés por un tipo determinado de partida, puedes formar partidas privadas o abiertas, enviar mensajes a otros jugadores incluso antes de formar un grupo.
Cuando ya está en marcha la partida de caza de hasta cuatro jugadores es posible utilizar chat de voz con Wii Speak, aunque ya entran en juego los códigos de amigo. Pero quien no la tenga podrá seguir comunicándose con el resto de jugadores mediante chat de texto, frases predefinidas y múltiples gestos. Es importante elegir bien a los miembros del grupo porque si uno se va no será posible sustituirlo por otro ni se le puede echar.
Por si todas estas opciones no fueran suficientes, hay dos detalles decisivos: no costará nada jugar en España a Monster Hunter Tri (en Japón es preciso pagar una cuota mensual) y Capcom ha anunciado eventos que se desarrollarán de forma cíclica que permitirán obtener armas especiales no disponibles de otra forma (como las tres diseñadas por jugadores de la serie). El tablón de anuncios de Loc Lac servirá tanto para ver los grupos que están disponibles como los eventos activos en cada momento.
Una de estas misiones especiales consiste en luchar contra el Jhen Mohran, un inmenso gusano que vive en un mar de arena y que constituye una rareza en Monster Hunter. La lucha se divide en dos partes. En la primera el grupo va sobre un barco al que ataca la mole animal. El ataque se realiza con las armas que tiene el barco: balas de cañón y balistas para dispararle a distancia, taladradoras laterales para cuando el animal se acerque a la nave para barrer al grupo de la superficie y un arpón vertical para herirle cuando salte sobre el barco.
En ocasiones también será posible subirse sobre el Mohran para golpearle o para picar en su superficie y obtener recursos. La lucha es dura y consiste en resistir mientras se le causa el mayor daño posible para llamar su atención. Si te caes del barco deberás volver hasta él avanzando por una cuerda.
En la segunda parte de la lucha, el barco está varado y Jhen Mohran se yergue ante el grupo de cazadores como una montaña. Es la hora de pasar al armamento habitual en el juego e intentar acabar con él. La misión es espectacular y constituye una refrescante novedad.
Aunque del modo cooperativo se ha hablado menos, resulta también muy atractivo, aunque está más limitado. La caza se lleva a cabo en la arena, donde tu compañero y tu os enfrentáis al enemigo elegido con unos equipamientos predefinidos jugando a pantalla partida.
Lo más interesante es que puedes llevarte en el mando uno de tus personajes y jugar unas cuantas misiones en casa de otra persona, de forma que cuando vuelves a casa descargas los objetos y medallas que hayas conseguido con tu personaje en su hogar de Moga. La pantalla partida en horizontal te permite tener un amplio campo visual. Capcom no ha descuidado ni este modo, que suele ser uno de los grandes olvidados o menospreciados.
Un reto técnico que Capcom supera con excelencia gráfica y controles a gusto de todos
Se entiende que los equipos internos de Nintendo estén cohibidos tras ver gráficamente Monster Hunter Tri. Los vídeos son de una calidad excepcional. Utilizan con habilidad diversos trucos técnicos para ofrecer un aspecto bellísimo. Mantienen la identidad gráfica de la serie y, aunque no son de alta resolución porque el hardware no lo permite, dejan sin argumentos a los que hablan de limitaciones gráficas en Wii y ponen el listón muy alto a estudios acostumbrados a liderar la calidad en las imágenes de las consolas de Nintendo.
El destacado nivel gráfico no se limita a los vídeos. Tri constituye todo un ecosistema vivo, y es importante que muestre el esplendor de sus paisajes y de los seres que lo habitan. Las cacerías a la luz de la luna incitan a disfrutar de la luz de la luna, y casi sientes la brisa marina mientras te lanzas al agua. Por fin podemos ver bien un juego de Wii en pantallas superiores a 32", sin sufrir dientes de sierra por doquier.
Ryozo Tsujimoto, productor del título, ha dicho en varias ocasiones que la calidad que intentaban conseguir compensa los tiempos de carga entre las distintas zonas del mapa. Es cierto. Pese a las dudas iniciales sobre si sería aburrida la espera constante, el tiempo de carga no es excesivo –el más largo es cada vez que vuelves a Moga- y merece la pena.
Lograr un control satisfactorio en Wii probablemente haya constituido más de un quebradero de cabeza. En línea con el espíritu de un juego que pone en manos del jugador miles de opciones para elegir, Capcom ha incluido tres controles diferentes: uno utiliza el mando de Wii y otros dos emplean el mando clásico (atacando con los botones o con el joystick derecho). En todos ellos hay que utilizar el Wiimote para una función especial que consiste en "atrapar" con el puntero a los monstruos que aparecen en pantalla para incorporarlos al cuaderno del cazador.
Pese a que es fama que el mejor control es utilizando el mando clásico atacando con los botones, la opción del Wiimote quizás sea más accesible para los nuevos jugadores, aquellos que no estén tan acostumbrados a los mandos habituales. Lo bueno es que son tan variados y diferentes que sin duda uno de ellos se amolda a las preferencias del jugador. Y no es sencillo en un juego en el que debes manejar a la vez el arma, el movimiento del personaje, la cámara y controlar el contenido de la bolsa, pero la experiencia en PS2 y, sobre todo, haber superado con nota la prueba de PSP, ha marcado el camino.
Capcom ha realizado un trabajo excelente y muy afinado, intentando encontrar el equilibrio entre hacerse accesible a los jugadores que no se han atrevido con el título por complicado y aquellos cazadores amantes de dicha complejidad y dificultad. Es cierto que mantiene el espíritu de la caza en grupo y del esfuerzo en solitario, y si algún juego puede conseguir superar esa barrera inicial de los que no se atreven es Monster Hunter Tri.
Monster Hunter Tri para Wii, compatible con Wii Speak, sale a la venta el 23 de abril a un precio de 49,95 €. El precio del pack con el mando clásico pro es 59,95 €.