Análisis Tormented Souls, Alone in Evil Hills (PS5, PC)

Todo es cíclico. Después de usar hasta la saciedad el diseño de Alone in the Dark que popularizó Resident Evil, la mayoría de juegos de miedo evolucionaron de una manera similar a la de Resident Evil 4. Ahora, cuando parece que la moda de los indies en primera persona en los que estás indefenso empieza a cansar hasta a los propios desarrolladores, vemos el retorno de los clásicos. Tormented Souls es un una vuelta a esos orígenes.

Survival horror clásico, clásico

Tormented Souls es un juego de terror de los que veíamos en la generación de los 32 y los 128 bits. Pensad en cualquier Resident Evil clásico y os podéis imaginar perfectamente cómo se juega. Tanto es así que si jugamos con la cruceta tenemos controles tipo tanque, mientras que con el stick tendremos movimiento 3D.

Mantén pulsado un botón para sacar el arma y otro para disparar, haz lo mismo para usar el arma cuerpo a cuerpo... Seguro que os hacéis a la idea. El combate es tosco, pero al final es aprender a jugar como antaño y a hacerte a los controles. De hecho, pasado el periodo de adaptación, todos los enemigos son muy fáciles de derrotar.

Por supuesto, tenemos una mansión a nuestra disposición en la que (sorpresa, sorpresa) están pasando cosas raras. La historia, como el propio juego, parece beber un poco de Silent Hill y Resident Evil, y nos ha parecido predecible desde el minuto uno, pero cumple perfectamente con su cometido, con personajes que parecen ajenos a todo lo que está pasando y una historia que poco a poco vamos desvelando a través de documentos y una especie de viajes temporales.

El juego es un clarísimo tributo a los principales iconos del género, con momentos en los que cuesta distinguir entre el homenaje y el plagio, con secuencias en las que viajamos a una especie de realidad paralela cubierta de óxido y rejas. En cualquier caso, no nos ha molestado, sino todo lo contrario. Ha conseguido transportarnos a la época en la que todas las empresas se mataban por tener su survival horror, y ha sido una experiencia que hemos disfrutado mucho.

Los puzles y la mansión

Siempre criticamos lo fáciles que son los puzles de los juegos de terror prácticamente desde hace una década, y Tormented Souls nos ha cerrado la boca. Por una parte, ya no estamos acostumbrados a pararnos a pensar, y cuando tenemos que leer un documento y entender qué nos está diciendo, nuestro cerebro cortocircuita. Aun así, la gran mayoría de los puzles son difíciles pero lógicos. Otros, la verdad, nos han parecido un tanto rebuscados, generalmente porque recibes más información de la que necesitas, con ciertas partes que te confunden y te distraen de las pistas.

Hemos hablado con los desarrolladores porque hemos necesitado alguna pista y nos han dicho que son conscientes y están investigando cómo hacer los puzles menos crípticos. Esto no va a ser un problema para la mayoría de los jugadores, ya que si se quedan demasiado atascados podrán encontrar guías y vídeos en internet, pero nosotros, que lo hemos jugado antes de su lanzamiento, hemos pasado horas dando vueltas por la mansión es busca de algo que pensábamos que necesitamos para avanzar... pero no.

Esto nos lleva a otra parte que nos deja sensaciones enfrentadas. La mansión está bien diseñada y bien conectada, pero no bien «explicada». Como cabe esperar, vamos a recorrerla mil veces en busca de ciertos objetos y dónde usarlos, y al hecho de que no hay un botón para abrir el mapa –tenemos que abrir el inventario, cambiar dos veces de pestaña, elegir el mapa y seleccionarlo, y luego girarlo con el stick para verlo de frente–, hay que añadirle que no hay ningún tipo de guía de nuestro progreso. No sabemos en qué habitaciones hemos estado y en cuáles no. De hecho, a veces ni los nombres son representativos. ¿La habitación con el único ordenador útil de todo el juego? No se llama "habitación del ordenador", sino un nombre cualquiera que nada tiene que ver.

Si bien entendemos que se quiera mantener una nomenclatura «realista» para las habitaciones, creemos que habría sido útil, al menos, dar otras ayudas visuales al jugador. Varios juegos clásicos dibujaban un icono en las habitaciones con puntos de interés, algo que podría haber sido una solución perfectamente válida, o incluso dejar que el jugador tome sus propias notas sobre el mapa. Esto, unido a lo «complicado» que es ver el mapa, hace que explorar la mansión pueda acabar siendo muy tedioso y frustrante, y más siendo un juego larguito para los estándares del género, y que puede superar fácil las diez horas a poco que te atasques en alguna parte.

El terror en 3D

Tormented Souls es un juego que visualmente está a un buen nivel. Los escenarios, totalmente en 3D, son geniales, mientras que los personajes tienen bastante más margen de mejora. Curiosamente, esto le da un toque «auténtico», como de una época en la que los escenarios prerrenderizados se veían mejor que los personajes. En cualquier caso, creemos que acierta con la ambientación, y nuestra única pega es que a veces la oscuridad puede jugar malas pasadas. Nuestra protagonista no puede estar totalmente a oscuras, y hay veces que entras en una habitación totalmente a oscuras, te crees que está cargando y de pronto tu personaje empieza a morirse. O una habitación sin apenas luz en la que hay un cambio de cámara y ni te enteras. Esto se soluciona cuando conseguimos la linterna, pero son varias horas de juego hasta que la recibimos.

En lo sonoro, tenemos voces en inglés –que también parecen sacadas de un survival horror de antaño–, y una buena colección de efectos de sonido para acompañar la experiencia. La banda sonora también es muy acertada, y si bien es cierto que después de unas cuantas horas echamos de menos algo de variedad en ciertas zonas que visitamos todo el tiempo, no podemos ponerle muchas más pegas.

Saca papel y lápiz y prepárate para un viaje de nostalgia

Tormented Souls nos ha gustado mucho, pero también nos ha frustrado bastante. Creemos que clava la ambientación y las sensaciones de un survival horror clásico, pero los errores a la hora de presentar algunos puzles o lo increíblemente torpe que es acceder al mapa consiguen romper esa diversión en varios puntos concretos del juego. Esto no quita que siempre nos haya dejado con ganas de seguir jugando, con la sensación de que lo que necesitas está ahí y puedes encontrarlo, sólo que sería más divertido si no tuviese que hacer cinco pulsaciones de botones y mover un stick para ver el mapa, por ejemplo.

Muchos de estos problemas se solucionarán cuando lo juguéis porque habrá guías y vídeos en internet (aparte, los desarrolladores nos han confirmado que están haciendo ajustes todavía), pero os recomendamos que, si sois fans de los clásicos, lo juguéis tan a ciegas como sea posible y le deis una buena oportunidad a todos los puzles antes de buscar las soluciones. Al final, Tormented Souls nos ha dejado buenas sensaciones y creemos que si el estudio sigue trabajando sobre esta base podrían tener entre manos una saga de terror a tener en cuenta. Por ahora, si estáis listos para disfrutar del terror como lo hacíamos antes, dadle una oportunidad a este título.

Hemos realizado este análisis en PS5 con un código de descarga proporcionado por Meridiem Games.