Análisis The First Berserker: Khazan, el mejor discípulo de Nioh y Sekiro en un emocionante RPG de acción (PS5, Xbox Series X, PC)

Una espectacular aventura de rol y acción tipo Souls que se destapa como una de las grandes sorpresas del año gracias a unos jefes que ya pueden presumir de ser de lo mejor de todo el género.
The First Berserker: Khazan
·
Actualizado: 9:42 24/4/2025
Análisis de versiones PS5, Xbox Series X y PC.

Vamos a empezar este análisis siendo claros y contundentes: The First Berserker: Khazan es el mejor juego de rol y acción inspirado por la fórmula Souls que se ha hecho nunca fuera de los paraguas de FromSoftware y Team Ninja. Sí, dista de ser perfecto, pero la propuesta de Neople no solo sabe encontrar su identidad para brillar con luz propia y diferenciarse de sus principales referentes, sino que también entiende a la perfección qué es lo que los jugadores buscamos en este tipo de propuestas, dando como resultado una aventura apasionante que cuenta con algunas de las mejores y más épicas batallas que hemos vivido jamás en videojuego alguno.

PUBLICIDAD

El viaje de venganza de Khazan

Lo primero que debéis saber es que estamos ante un título ambientado en el universo de Dungeon Fighter Online (DNF) que tiene lugar 800 años antes del juego original, aunque podéis estar tranquilos, ya que la historia se entiende perfectamente sin la necesidad de haber jugado a nada previamente.

De este modo, nos toca acompañar a Khazan, un general caído en desgracia que es acusado falsamente de traición por el emperador del Imperio al que servía.

Por azares del destino, nuestro protagonista es poseído por un misterioso espectro mientras cumple su condena y ambos forman un pacto con el objetivo de colaborar y ayudarse mutuamente, dando así comienzo un viaje en el que debemos descubrir la verdad que se oculta tras el complot que hubo en nuestra contra y, de paso, averiguar cuál es la causa de que el reino de los vivos y los muertos se hayan desequilibrado, un hecho que está causando innumerables calamidades en todo el mundo.

El guion como tal es increíblemente sencillo y no va mucho más allá de hacernos partícipes de una misión de venganza con giros y revelaciones muy predecibles, aunque si os somos sinceros no creemos que necesite mucho más, ya que lo que nos cuentan resulta más que suficiente para mantener vivo nuestro interés y justificar cada uno de los pasos de nuestro camino.

Un detalle muy llamativo es que la obra de Neople huye por completo de las habituales narrativas fragmentadas de esta clase de producciones y apuesta por un enfoque mucho más directo y explícito, con secuencias de vídeo tradicionales que van explicando con pelos y señales lo que ocurre en cada momento de la trama, por qué vamos a cada sitio, quiénes son esos jefes que se oponen a nosotros y qué relación guardan con Khazan o con nuestra misión.

La historia es muy sencilla y predecible, pero resulta amena y justifica bien nuestras idas y venidas.
La historia es muy sencilla y predecible, pero resulta amena y justifica bien nuestras idas y venidas.

Obviamente, hay algunos documentos que amplían el trasfondo argumental y si queréis llegar al final verdadero y descubrir en detalle el pasado y las motivaciones del villano principal vais a tener que explorar bastante, pero es un título que permite que nos enteremos de todo sin necesidad de realizar una labor de arqueología virtual. Además, puede presumir de tener unas secuencias cinematográficas muy resultonas, especialmente cuando usan el propio motor gráfico del juego.

Un "niohlike" con su propia identidad

Centrándonos ya en el juego como tal, nos ha sorprendido encontrarnos con un título que en vez de fijarse en los Souls de FromSoftware ha preferido mirar de frente a los Nioh de Team Ninja, algo que se nota especialmente en su estructura. Así pues, en vez de tener un mundo interconectado, se apuesta por una serie de fases independientes a las que podemos acceder desde el mapa principal y que podemos repetir todas las veces que queramos. Y sí, también hay cierta obsesión por el loot con montones de piezas de equipo de diferente rareza cuyos atributos son aleatorios, aunque la cantidad de ellas que recibimos no es tan exagerada como en los juegos de Team Ninja.

Probablemente, uno de los puntos más flojos de Khazan lo tengamos en su diseño de niveles. Con esto no queremos decir que sea malo, pero sí muy plano, con unas rutas muy lineales que limitan mucho la exploración mientras crean atajos de formas un tanto burdas y predecibles. Hay algunas fases, especialmente en el último tercio, en el que el listón sube un poco, con mapas que se abren más o que esconden muchos más recovecos, desvíos y secretos de maneras más ingeniosas, pero lo habitual suele ser encontrarse ante misiones con un diseño meramente funcional.

El diseño de niveles hace que el título brille más como juego de acción que como aventura de rol.
El diseño de niveles hace que el título brille más como juego de acción que como aventura de rol.

A pesar de ello, explorar resulta divertido, ya que hay una serie de coleccionables que requieren que estemos mínimamente atentos a nuestro entorno para encontrarlos y que nos otorgan recompensas muy jugosas y que merecen la pena, como aumentos de la capacidad máxima de viales curativos, unas piedras que que nos dan acceso a ciertas mejoras, unos objetos que mejoran al espíritu con el que nos equipemos o unos seres escondidos en vasijas que nos permiten acceder a nuevos artículos en una tienda.

Casi todo lo importante lo hemos encontrado en la primera vuelta y apenas hemos tenido que rejugar 3 o 4 niveles para encontrar algo que se nos hubiese pasado por alto, lo que deja claro que el diseño de las fases no da tanto margen como el de Nioh o Dark Souls.

Ahora bien, en lo positivo queremos destacar que se ha hecho un muy buen trabajo a la hora de planificar las trampas y la colocación de los enemigos a lo largo de los niveles, propiciando siempre distintos tipos de situaciones y enfrentamientos únicos con los que tenemos que aprender a lidiar y que nos permiten convertir el propio entorno en un arma que podemos aprovechar en nuestro favor si tenemos algo de maña.

Los escenarios son demasiado parecidos entre sí en lo visual y no suelen destacar en lo artístico.
Los escenarios son demasiado parecidos entre sí en lo visual y no suelen destacar en lo artístico.

El bestiario es más amplio de lo que parece, hay criaturas élite y cada rival tiene sus propias características y peculiaridades, como asesinos invisibles, nomuertos que se vuelven a levantar si no los rematamos tras derrotarlos o arañas que nos paralizan y envenenan, por lo que siempre requieren que variemos nuestra estrategia a la hora de lidiar con ellos, ya sea priorizando objetivos o averiguando cómo combatirlos de la forma más segura atendiendo a las características del terreno. Todo esto ayuda a que el título siempre sea divertido y a que funcione especialmente bien como juego de acción, pues es en el combate donde encuentra su alma y su razón de ser.

Unos jefes legendarios

Y ya que hablamos del combate, nos vemos en la obligación de hacer un punto y aparte en este apartado, especialmente en lo referente a sus jefes. En líneas generales, contamos con las herramientas típicas de este tipo de juegos, como dos botones de ataque (flojo y fuerte) que podemos combinar y cargar para realizar combos, la posibilidad de bloquear y esquivar, habilidades especiales que consumen su correspondiente medidor de energía y una barra de resistencia que limita nuestras acciones para que no podamos atacar a lo loco ni defender eternamente. Además, podemos atacar a distancia arrojando unas útiles lanzas de luz y activar un modo especial que nos hace temporalmente inmortales y cambia nuestra forma de movernos y atacar, algo que solo podemos hacer si llenamos nuestra barra de furia.

A todo esto debemos añadirle que si bloqueamos justo en el momento que vamos a recibir un golpe realizaremos una parada perfecta que no consume nuestra estamina y nos permite dañar la vida y energía de nuestro oponente. Algo parecido ocurre con la esquiva, ya que esquivar en el momento justo también nos permite reducir el consumo de energía y acceder a otra serie de maniobras que dependen de que las desbloqueemos previamente en el árbol de habilidades.

La gestión de la barra de resistencia lo es prácticamente todo en este juego, ya que si se os agota os quedaréis completamente vendidos.
La gestión de la barra de resistencia lo es prácticamente todo en este juego, ya que si se os agota os quedaréis completamente vendidos.

Lo realmente importante aquí es que Neople ha creado un sistema de combate que funciona a la perfección y que resulta enormemente gratificante a los mandos: la sensación de impacto está muy conseguido, los controles responden de maravilla y con una precisión impecable y acciones como las paradas perfectas o las esquivas resultan tremendamente satisfactorias cuando las realizamos bien. Además, estas dos últimas tienen un timing bastante generoso en su ejecución, evitando así caer en frustraciones y animándonos constantemente a que intentemos hacer uso de ellas para aprender a dominarlas, ya que el equilibrio entre los riesgos y las recompensas de ambas mecánicas es perfecto. O dicho de otro modo, es un juego que logra que hasta el jugador menos habilidoso le pierda el miedo a los parries y se atreva a usarlos.

Ojo, que el margen de error sea amplio no quiere decir que os vaya a resultar fácil ejecutarlos bien, ya que los enemigos son capaces de realizar grandes cadenas de golpes con amagos y variaciones en el ritmo de los ataques que os van a exigir que aprendáis sus patrones a la perfección, aunque este es otro aspecto que nos ha gustado mucho, ya que las animaciones que tienen nos indican sin atisbo a dudas y con el tiempo suficiente cuál es el siguiente movimiento o combo que van a utilizar, lo que sumado al patrón rítmico que siguen sus secuencias de ataque (incluso con sus variaciones y retrasos de golpes) hacen que sean relativamente fáciles de memorizar, lo que deriva en duelos en los que nos exigen constantemente que reaccionemos adecuadamente y con rapidez a lo que hacen nuestros rivales. Dudad un segundo y probablemente deis con vuestros huesos en el suelo.

Todo esto alcanza su máxima expresión a la hora de hacer frente a sus numerosos jefes, unas batallas que por sí solas justifican la compra de este videojuego y para las que solo tenemos buenas palabras. Tal y como podéis suponer, son unos enfrentamientos largos y tremendamente duros que exigen que demos el 120 % de nuestras capacidades como jugadores para superarlos, hasta el punto de que nos atreveríamos a decir que tiene alguno de los duelos más difíciles que hemos jugado nunca en todo el género.

Sin embargo, jamás se perciben como injustos, más bien al contrario, gracias a unos patrones perfectamente estudiados para los que siempre encontramos una forma de responder. Si un jefe nos mata, será únicamente por un error nuestro, error del que siempre seremos muy conscientes y que se acaba por convertir en una valiosa lección que nos anima a volver al ruedo para intentarlo una vez más y poner en práctica lo que acabamos de aprender.

Todo esto ayuda a que se produzca auténtica magia durante el proceso de derrotar a cualquiera de sus jefes, pues cada intento nos hace crecer como jugadores. Lo más probable es que la mayoría os destrocen en vuestro primer intento contra ellos, que recibáis golpes por todas partes, que os enfrentéis a mecánicas nuevas y desconocidas con las que no sabréis lidiar y que cuando os derroten apenas le hayáis bajado un pequeño porcentaje de su barra de vida. De hecho, casi seguro que se os llega a pasar por la cabeza tras ese primer contacto que es un combate imposible, que se les ha ido de las manos la dificultad y que nunca lograréis derrotarlo. Y puede que la segunda vez os vuelva a pasar lo mismo, pero también que hayáis bloqueado y esquivado con mayor efectividad y que la barra de vida del jefe haya bajado algo más. Al tercero ya os empezaréis a acostumbrar a sus movimientos y animaciones y veréis los huecos en su defensa más claros, lo que os permitirá bajar su vida a la mitad para descubrir que el combate tiene una segunda fase, y así, un intento tras otro, progresaréis en el duelo hasta lograr la ansiada y merecida victoria.

Es un juego en el que nuestro progreso como jugadores es tan constante que siempre lo hemos hecho mejor en cada intento y nunca nos ha dado la impresión de que los enemigos hagan algo que se escapa a nuestro control y que al no tener forma de evitarlo nos pueda llevar a una muerte gratuita a pesar de estar jugando bien, lo que habla genial del trabajo de equilibrio que ha hecho Neople. Es brutalmente adictivo librar estas batallas y os podemos asegurar que no nos habría importado que el juego hubiese consistido en un simple boss rush.

Los jefes de esta aventura son absolutamente increíbles. No hay ni uno solo que podamos considerar como malo.
Los jefes de esta aventura son absolutamente increíbles. No hay ni uno solo que podamos considerar como malo.

Algo que también nos ha gustado mucho de estas peleas es que van más allá de simplemente resistir incesantes cadenas de golpes que tenemos que memorizar para bloquear y esquivar, ya que todos los enfrentamientos son completamente únicos y tienen mecánicas propias cuyo funcionamiento debemos averiguar para contrarrestarlas. ¿Un jefe se cura o se potencia? Muy probablemente tengas una forma de evitar que lo haga, aunque no sea algo evidente de primeras. ¿Otro te desespera porque no para de bloquear con un escudo? Te tocará encontrar la forma de romper su defensa o pillarle la espalda. ¿Un enemigo te sube la barra de estado alterado al bloquear sus ataques incluso con una parada? Tendrás que reconocer qué golpes van impregnados de la sustancia nociva para evitarlos con una esquiva.

Además, con sus diferentes fases esconden montones de sorpresas que le dan un cariz único, como cierto homenaje al "momento mono" de Sekiro que nos hizo entrar momentáneamente en pánico. Sumadle a todo esto una puesta en escena maravillosa y os quedan unos jefes épicos y variados que se os van a grabar a fuego en la memoria, cada uno de ellos por diferentes motivos, pero todos por haberos ofrecido auténticos combatazos cuya victoria os habréis labrado con sangre, sudor y lágrimas.

Aquí no os van a regalar nada y todos los avances que hagáis van a ser por vuestros propios esfuerzos, lo que resulta tan gratificante como adictivo. Un apunte importante es que si bien no vais a tumbar a ningún jefe hasta aprenderos sus rutinas, las peleas contra ellos ofrecen cierta flexibilidad, ya que el sistema de combate nos da numerosas opciones para que encontremos nuestro estilo de juego y nuestra propia forma de responder a los embates del enemigo. ¿No se os dan demasiado bien los parries? Probad a combinar esquivas y bloqueos simples y probablemente encontréis otra manera de vencer.

Un detalle muy interesante: si morimos contra un jefe, el juego nos regalará puntos de experiencia. De este modo, se nos invita a que sigamos practicando la pelea sin tener que pararnos a subir de nivel.
Un detalle muy interesante: si morimos contra un jefe, el juego nos regalará puntos de experiencia. De este modo, se nos invita a que sigamos practicando la pelea sin tener que pararnos a subir de nivel.

Esto se logra gracias a un interesante árbol de habilidades que nos permite desbloquear montones de técnicas especiales y habilidades pasivas que resultan extremadamente útiles en la batalla, pudiendo así configurar la forma de luchar de Khazan a nuestros gustos y necesidades.

Curiosamente, los elementos roleros referentes al equipo y la subida de atributos nos han parecido algo menos decisivos, ya que las mejoras que nos dan las armas y armaduras rara vez llegan a marcar la diferencia y al escalar cada tipo de arma con un atributo concreto no hay demasiado margen para diseñar nuestras builds, así que olvidaos de crear una configuración rota que os permita arrasar en el campo de batalla y derrotar a los jefes de tres espadazos, ya que el título está diseñado de tal modo que no vamos a poder suplir nuestras carencias con simple fuerza bruta.

Hablando de dificultad, se han incluido un par de sistemas para hacernos las cosas más llevaderas en el caso de que el enorme reto del juego nos intimide. El primero de ellos es lo que para muchos será un sacrilegio y para otros una bendición: un Modo Fácil. Por lo que hemos podido probar tras terminar la aventura principal, si jugamos de esta manera solo obtendremos una mejora invisible en los atributos de Khazan para hacernos más fuertes y resistentes, dándonos así un mayor margen de error, lo que no quita que los jefes sigan requiriendo de un aprendizaje, por lo que las batallas tampoco son coser y cantar.

Superar el juego en Normal y sin invocar NPC es un reto muy desafiante, pero uno que merece mucho la pena intentar por la sensación de logro y triunfo con la que nos recompensa al final. Se nota mucho que los jefes han sido diseñados para que los combatam
Superar el juego en Normal y sin invocar NPC es un reto muy desafiante, pero uno que merece mucho la pena intentar por la sensación de logro y triunfo con la que nos recompensa al final. Se nota mucho que los jefes han sido diseñados para que los combatam

Por otra parte, podemos invocar unos NPC para que nos ayuden contra los jefes, los cuáles pueden mejorarse para que resulten más efectivos en la batalla. Si bien son una ayuda considerable, nos ha dado la impresión de que desvirtuan la esencia de estos enfrentamientos, ya que se nota que están diseñados para el 1 contra 1, por lo que tener a un espíritu por ahí despistando al jefe para que nos dé la espalda se percibe como algo que está completamente fuera de lugar y rompe las espectaculares coreografías que se dan cuando nos enfrentamos a ellos en solitario. Además, pasarse el juego sin invocar recompensa con un trofeo o logro según la plataforma en la que juguemos, por lo que os animamos a que intentéis evitar la tentación de pedirles ayuda para tumbar a estos duros rivales. Nosotros lo hemos hecho así y la sensación de triunfo al llegar a los créditos ha sido indescriptible.

En cuanto a la duración, nos ha sorprendido que se trata de un juego bastante largo. Sin usar guía, hemos tardado unas 50 horas en llegar a su final verdadero completando todas las misiones secundarias, por lo que es un título que requiere tiempo y que os va a tener entretenidos durante una larga temporada, especialmente si decidís darle alguna vuelta adicional o sacar todos sus logros y trofeos (aunque en PS5 nos hemos llevado la desagradable sorpresa de que algunos no terminan de funcionar como deberían a pesar de cumplir los requisitos para desbloquearlos).

Si vais a por el final verdadero, preparaos para librar una de las batallas finales más duras de vuestra vida como jugadores.
Si vais a por el final verdadero, preparaos para librar una de las batallas finales más duras de vuestra vida como jugadores.

Aprovechando que hemos mencionado las misiones secundarias, decir que estas beben mucho de las de Nioh, ofreciéndonos unos niveles más cortos que reciclan escenarios, jefes y enemigos de las principales, lo que resulta un tanto decepcionante. Eso sí, os recomendamos hacerlas, ya que aportan muchos detalles argumentales de interés y sus recompensas merecen bastante la pena. De hecho, cosas tan básicas como el herrero solo las desbloquearemos si hacemos estas tareas opcionales.

Un interesante estilo anime

Entrando ya en lo que es su apartado gráfico, tal y como podréis apreciar por las imágenes estamos ante un título que dista mucho de ser algo puntero a nivel técnico, pero que logra destacar gracias al diseño de sus personajes, criaturas y enemigos, todos ellos bien modelados y con un toque anime que les sienta genial y les da algo de personalidad respecto a otros títulos del género.

En cambio, los escenarios nos han dejado bastante fríos: tremendamente genéricos, sosos, muy poco inspirados y con una dirección de arte tan monótona que hace que cueste distinguir unos niveles de otros. Además, aquí se notan más las costuras, con unas texturas un tanto pobres y elementos con poca carga poligonal. Hay algunos destellos de brillantez de vez en cuando, especialmente en las salas en las que nos enfrentamos a los jefes, pero es un juego que dista de maravillar con sus paisajes.

A nivel gráfico el título brilla de verdad al luchar contra los jefes. Las batallas contra ellos son todo un espectáculo tanto jugable como visual. Puro cine.
A nivel gráfico el título brilla de verdad al luchar contra los jefes. Las batallas contra ellos son todo un espectáculo tanto jugable como visual. Puro cine.

Nosotros hemos jugado en PS5 Pro y lo cierto es que cuesta encontrar las diferencias entre el Modo Rendimiento y el Modo Calidad con la tasa de imágenes por segundo desbloqueada, ya que en ambos casos muestra una imagen muy nítida con una alta tasa de fotogramas bastante estable.

Finalmente, comentar que la banda sonora nos ha gustado mucho. Por lo general suele tender a las orquestas con coros y a la épica pura y dura, aunque también se atreve a incluir de vez en cuando instrumentos modernos e incluso leves toques de rock. Todos sus temas nos han parecido que ambientan de maravilla la épica de cada combate y el hecho de que muchas veces parezcan sincronizar sus ritmos con los ataques de los jefes ayuda a realzar la experiencia hasta llevarla a un nuevo nivel. El diseño de audio también nos ha convencido, ya que usa muy bien los efectos de sonido para transmitirnos información importante de lo que está ocurriendo durante la pelea (por ejemplo, que el enemigo se prepara para intentar agarrarnos con un movimiento que no podemos bloquear) y el doblaje nos llega en inglés y japonés con textos en un español de Hispanoamérica bastante neutro.

Conclusiones

The First Berserker: Khazan es un juego que nos ha encantado. Tiene sus fallos, pero sabe tapar sus carencias hasta conseguir que casi nos olvidemos de ellas gracias a su buen hacer en combate, ya sea luchando para abrirnos camino a través de los niveles o batallando contra sus increíbles jefes, el punto donde más destaca, más alto vuela y más personalidad demuestra.

Sí, es una aventura de rol y acción exigente como pocas que no nos regala nada y que intimidará a muchos, pero que sabe recompensar a lo grande nuestros esfuerzos para hacernos crecer como jugadores. Y todo ello mientras se rige por unas reglas justas, bien diseñadas y perfectamente equilibradas que impiden que podamos echarle la culpa de nuestros errores a otra cosa que no sea nuestra propia habilidad con el mando.

Si buscáis un buen desafío que os lleve al límite y os deleite tras cada victoria con una sensación triunfal de logro y satisfacción, os apasiona el género y estáis dispuestos a dejaros la piel en cada combate, aquí encontraréis una propuesta que no os podéis perder y que estamos convencidos de que os va a gustar tanto como a nosotros. No dudéis en darle una oportunidad.

Hemos escrito este análisis gracias a un código de descarga para PS5 que nos ha facilitado Forty Seven.

Carlos Leiva
Redactor

NOTA

8.5

Puntos positivos

El sistema de combate: flexible, preciso y muy satisfactorio.
Los jefes son una verdadera maravilla y de lo mejor de todo el género.
La disposición de las trampas y los enemigos está muy bien estudiada.

Puntos negativos

El diseño de niveles es un tanto plano.
Le falta algo de profundidad a sus elementos roleros.
Los escenarios, en lo visual, no están muy inspirados.

En resumen

Una intensa, desafiante y tremendamente gratificante aventura de rol y acción que hace de sus espectaculares batallas contra jefes todo un arte.
En forosComentar en nuestros foros

En forosComentar en nuestros foros

Últimos análisis de PS5, Xbox Series X y PC

American Arcadia - Análisis
American Arcadia - Análisis
Análisis
2025-05-15 15:15:00
Nos volvemos a poner en la piel de Trevor Hills en esta divertidísima propuesta desarrollada en suelo patrio y que tras su paso por PC llega a PS5, PS4, XSX/, Xbox One y Nintendo Switch.
Capcom Fighting Collection 2 - Análisis
Capcom Fighting Collection 2 - Análisis
Análisis
2025-05-14 17:00:00
Capcom reúne ocho clásicos de lucha, muchos de la etapa de Dreamcast, en un recopilatorio con joyas para todos los gustos.
The Precinct - Análisis
The Precinct - Análisis
Análisis
2025-05-13 15:00:00
En The Precinct nos ponemos en el lugar de la ley y el orden dentro de una ciudad repleta de delitos y con un elaborado planteamiento jugable.
Revenge of the Savage Planet - Análisis
Revenge of the Savage Planet - Análisis
Análisis
2025-05-12 16:20:00
Revenge of the Savage Planet profundiza en las claves de su predecesor para darnos una aventura de acción en tercera persona cargada de diversión y buenas ideas.
Age of Empires II: Definitive Edition - Análisis
Age of Empires II: Definitive Edition - Análisis
Análisis
2025-05-11 10:27:00
Uno de los mejores juegos de estrategia en tiempo real de la historia llega en su mejor versión a la consola de Sony.
Género/s: Action-RPG
PEGI +16
Plataformas:
PS5 Xbox Series X PC
Cancelado en PS4 XBOne

Ficha técnica de la versión PS5

ANÁLISIS
8.5
COMUNIDAD
7.58

The First Berserker: Khazan para PlayStation 5

10 votos

Ficha técnica de la versión Xbox Series X

ANÁLISIS
8.5
  • Fecha de lanzamiento: 27/3/2025
  • Desarrollo: Neople
  • Producción: Nexon Korea Corporation
  • Distribución: Microsoft Store
  • Precio: 60 €
  • Jugadores: 1
  • Formato: Descarga
  • Textos: Inglés
  • Voces: Inglés
  • Online: No
  • Requisitos PC
COMUNIDAD
-

The First Berserker: Khazan para Xbox Series X

Sin votos
Insuficientes votos para figurar en los rankings.

Ficha técnica de la versión PC

ANÁLISIS
8.5
Estadísticas Steam
COMUNIDAD
-

The First Berserker: Khazan para Ordenador

Sin votos
Insuficientes votos para figurar en los rankings.
Flecha subir