Análisis The Alliance Alive HD Remastered, un buen JRPG (PS4, PC, Switch)
Después de un año y medio haciendo disfrutar a los, mucho nos tememos, escasos usuarios de Nintendo 3DS que le dieron una oportunidad, NIS nos trae a PS4 y Switch la edición en HD de The Alliance Alive. Un título que pasó bastante desapercibido en su momento y que se "perdió" dentro del extenso catálogo de juegos de rol de la portátil de Nintendo pero que, al margen de eso, consiguió integrar mecánicas de juego bastante sugerentes y un apartado visual muy atractivo para tratarse de una obra humilde de carácter digital.
Para sorpresa de muchos de nosotros debido a su carácter nicho, sus creadores han querido dar la oportunidad a los usuarios de PS4 y Switch (en PC llegará a lo largo del año que viene) de disfrutar de una versión remasterizada en HD de ese mismo título.
Una edición que ya os avisamos que es exactamente la misma que ya se dejó ver en 3DS pero con el salto a la alta definición, ni más ni menos.
Un JRPG muy cautivador
Como ocurre en la mayoría de títulos de este mismo estilo, en The Alliance Alive HD Remastered nos convertimos en un grupo de héroes que debe solventar una situación extrema. La historia nos traslada hasta un mundo ficticio en el que reinan los demonios, que en esta odisea reciben el nombre de Daemons. Tiempo atrás dicho mundo fue dividido en diversos reinos custodiados por dichos monstruos para mantener la paz entre los humanos. Pero, a fin de cuentas, se trata de una paz malsana debido a que dicha humanidad vive bajo el desprecio de los Daemons, unos seres de aspecto humanoide pero naturaleza animal.
Una narrativa que resulta bastante sugerente… una vez discurren las primeras horas, porque es de esas que tardan un tanto en arrancar de verdad y puede resultar algo lenta para ciertos usuarios. Y debemos indicar que estamos ante una aventura que no ha sido ni tan siquiera traducida a nuestro idioma, por lo que todos los textos de los menús, conversaciones entre los personajes y demás están en inglés, así que tened esto en cuenta porque al tratarse de un JRPG, los diálogos son abundantes.
Uno de los ingredientes fundamentales que dan empaque a este título son los combates. Dichos enfrentamientos tienen lugar por turnos, pudiendo alterar la velocidad a la que se desarrollan los mismos, una característica que puede parecer menor pero que, teniendo en cuenta la inmensa cantidad de batallas que debemos afrontar a lo largo del juego, se agradece mucho.
Los combates están muy bien llevados y se convierten en uno de los puntos fuertes del título, y eso que adolecen de la espectacularidad que actualmente poseen la inmensa mayoría de los mejores exponentes de su género (no olvidemos que, al fin y al cabo, estamos ante una remasterización de un juego de 3DS). Y conviene resaltar que en esta ocasión las batallas no suceden de manera aleatoria, es decir, que vemos venir a los rivales en la mayoría de las ocasiones.
En función del arma que empuñe el personaje (los cuales pueden equiparse con dos de ellas a la vez), sus ataques y aptitudes cambian de manera significativa. Y conforme usamos unas y otras armas podemos ir aprendiendo nuevos movimientos mediante los llamados Awakens, un factor muy importante a lo largo del título. Además podemos elegir la formación que deseamos que tenga nuestro grupo de personajes (es posible pelear con hasta cinco simultáneamente), lo cual añade un factor estratégico bastante acentuado a unos ya de por sí muy interesantes y dinámicos enfrentamientos.
La exploración libre también es un componente primordial del juego. Podemos aventurarnos a recorrer escenarios abiertos concebidos en plan mapamundi, si bien al llegar a determinadas zonas importantes la perspectiva y la tónica cambia, permitiéndonos deambular tranquilamente sin miedo a ser atacados por monstruos y demás criaturas que campean por el mundo abierto. Y en estos lugares nos podemos recrear visitando posadas para descansar y guardar la partida, entrar en diversas tiendas para comprar medicinas y armamento o entablar conversación con los lugareños que allí se encuentren. Para agilizar estos viajes podemos echar mano de ciertos vehículos y animales que nos sirven como monturas, característica bastante tradicional en este tipo de obras.
Otro de los aspectos más interesantes de todos los que posee la aventura es la posibilidad de establecer alianzas (de ahí el nombre del juego) para ayudarnos en nuestra tarea de acabar con los Daemons. De esta manera podemos obtener información importante acerca de los monstruos, recibir ayuda en pleno combate y demás acciones que nos facilitan un tanto las cosas y nos hacen sentir partícipes de un equipo. Existen hasta cinco guilds distintas, y su apoyo es fundamental.
Tampoco podemos olvidarnos de los puzles, un ingrediente menos habitual en este tipo de producciones pero que tiene su hueco en esta aventura. No son ni muy numerosos ni demasiado originales (empujar objetos, activar o desactivar luces, etc.), pero a pesar de eso aportan diversidad a la estructura básica del título.
Por todo esto estamos ante un juego bastante entretenido y variado que ofrece muchas horas de diversión, unas 25-30 al menos, y que posee las suficientes cualidades como para entretener a cualquier aficionado al género. Más allá de no llegar traducido, lo cual echará para atrás a ciertos usuarios, el mayor problema que encontramos con esta producción es su escasez de novedades. De hecho, aquellos usuarios que disfrutaran del título primigenio de 3DS apenas van a encontrar justificación alguna como para repetir, y más teniendo en cuenta la diferencia de precio de unas versiones y otras, siendo claramente más barata la entrega original.
El cambio más evidente que posee esta edición es el técnico, aumentando la resolución y modificando la apariencia de ciertas texturas para mostrar una apariencia más llamativa. El problema es que todo lo demás es idéntico, y cuando nos encontramos deambulando por el minimapa es posible contemplar un popping demasiado evidente en la creación de los fondos y un modelado pobre en las estructuras que forman los escenarios. De hecho, parece un juego perteneciente a la pasada generación, aunque por lo menos su línea artística sigue siendo muy agradable. El apartado sonoro se ha mantenido también inalterable, sin voces para los personajes y efectos más bien escasos, pero a cambio disfrutamos de una sensacional banda sonora.
Y otro cambio muy palpable tiene que ver con la remodelación de la interfaz, adaptando el contenido de la pantalla adicional de la versión de 3DS de forma bastante satisfactoria y modificando los menús de manera apropiada para tal fin. Cambios en cualquier caso menores.
Una revolución cautivadora
Sin ser la remasterización que esperábamos, seguimos estando ante un JRPG que merece mucho la pena y que posee numerosas cualidades como para atraer a los seguidores del género. Es una pena que no se hayan traducido al menos sus textos (en inglés) y que los desarrolladores se hayan mostrado rácanos a la hora de incluir innovaciones, por lo que los jugadores que ya disfrutaran del título original pueden ahorrarse esta versión perfectamente.
Hemos realizado este análisis en su versión de PS4 con un código proporcionado por Bandai Namco.