Análisis de MotoGP 15 (PS4, Xbox One, PS3, Xbox 360, PC)
Un año más, Milestone nos ofrece el juego oficial de MotoGP con su edición de 2015. La desarrolladora domina –por falta de competencia- el género de la velocidad sobre dos ruedas, y aunque con Ride –lanzado hace escasos meses-, intentó ofrecer algo un poco diferente al mundo de MotoGP, estamos en las mismas: está en manos del estudio italiano y las similitudes son más que evidentes.
Lo cierto es que MotoGP 15 no es malo, pero aporta muy poco respecto a 2014 o 2013, año en el que la saga al menos dio un pequeño paso hacia adelante tras una temporada en manos de Capcom. Parte de la culpa la tiene la alta productividad de títulos, a ritmo anual, que derrocha la cartera de Milestone en los últimos tiempos: MXGP –motocross-, WRC –rally-, Sébastien Loeb Rally Evo y hace no mucho SBK. Es casi inevitable, como sucede con otros lanzamientos deportivos, cierto estancamiento gráfico y de innovación que poco a poco quema las licencias con actualizaciones casi "legacy" –aquellas que apenas cambian la base de datos-.
La principal ventaja del juego –sobre todo porque es el único en su clase- es el gran uso de pilotos, escuderías –MotoGP, Moto2 y Moto3-, marcas, los 18 circuitos, eventos de la competición que se pudieron vivir en 2014, pilotos históricos, marcas y productos reales –guantes, cascos- para editar a nuestro piloto. Si deseas estar a la última y valoras la fidelidad con lo que sucede los fines de semana, es esto o ver las carreras por televisión.
MotoGP 15 incluye las modalidades indispensables. Carrera instantánea configura un piloto y circuito de manera aleatoriamente para saltar a la pista en pocos segundos. Gran premio y Campeonato se describen por sí mismos, competir contra rivales en uno de los circuitos o hacer toda la temporada; Contrarreloj nos propone para hacer récords, y Bate el tiempo es luchar contra el crono de los campeones con sus mismas reglas: moto, reglajes y circuito. Esto último es una de las novedades de 2015, aunque como vemos, tampoco es nada rompedor.
Más interesante para los aficionados a este deporte del motor son los Eventos reales, que recogen las situaciones más espectaculares o difíciles del último campeonato, por ejemplo ser penalizados con un drive-through y después quedar entre los diez primeros puestos. En Eventos de dos tiempos revivimos ese tipo de retos con pilotos de otras épocas, aunque hay muchas situaciones ficticias. El multijugador puede ser a pantalla partida y online, para 12 jugadores.
En Carrera MotoGP tenemos el típico modo deportivo que nos pone en la piel de un desconocido que va subiendo escalones desde la Moto3, una competición que pese a la relativa baja velocidad la competencia es muy dura, las diferencias las marca la técnica y no tanto la moto. Los consumidores de otros lanzamientos de Milestone tendrán una idea de cómo funciona Carrera MotoGP, porque va en esa línea. Escuchamos ofertas desde un rudimentario despacho, conseguiremos patrocinadores y por primera vez, también podremos configurar nuestro propio equipo con unas opciones de personalización un tanto limitadas. Este es uno de los puntos más destacados en la promoción del juego, lo cual da una idea del grado de cambios que aporta este año.
Si es tu primer juego de motos, MotoGP 15 tiene un breve tutorial donde se explica el control. También te permite probar el manejo con los diferentes perfiles de simulación, con más o menos ayudas a la estabilidad de estas máquinas. Practica bastante, porque a mejor categoría más potencia y errores más penalizados, especialmente sobre terreno mojado, donde el riesgo para patinar y salir despedido es muy alto. Si aun así tienes dificultades, está disponible el rebobinado de los últimos segundos antes de una mala maniobra o accidente para enmendar el error; no es una función muy realista pero ayudará a los novatos.
La cuestión es que tantos los modos como el estilo de conducción son, en líneas generales, los del año pasado. Teóricamente –y no lo discutimos- la inteligencia artificial se ha retocado para que el resto de la parrilla cometa más fallos a grandes velocidades, la simulación de los neumáticos es más precisa y hay cambios en la física de la moto. A la hora de pilotar la experiencia es muy similar y, al menos sólo por esta cuestión, no justifica el paso desde MotoGP 14 a no ser que consideres vital el contenido ajustado a 2015.
MotoGP 15 es entretenido y no hace falta ser un gran fanático de este deporte para disfrutarlo, o para empezar a coger el gusto a las dos ruedas. Ofrece suficientes opciones para ir directamente al plato fuerte de la gran cilindrada si es lo que buscas, y Carrera MotoGP muestra la evolución que podría tener el próximo Valentino Rossi. Ni simulador puro ni arcade, con un control un poco pulido en la toma de curvas y nuevas animaciones para los motoristas, se adapta bien al perfil de cualquier seguidor de las carreras virtuales sin sobresalir en ningún aspecto.
Que Milestone sea muy conservadora –digámoslo así- también se nota para mal en los gráficos. Existen versiones para la anterior generación, por tanto en las plataformas más potentes el resultado es claramente el de un título "remasterizado", es decir, la base parece de PlayStation 3 y Xbox 360 con más definición, mejores texturas, pero la inexistente competencia y la falta del consecuente pique sano por pulir efectos y detalle se nota muchísimo. La iluminación nunca parece real, basta ver las escenas del piloto en el box para darse cuenta de la ausencia de sombras en los personajes.
Los circuitos tampoco destacan demasiado, aunque en honor a la verdad, las pistas oficiales la mayoría de ocasiones no son el paisaje más fotogénico del mundo. A nivel jugable esto no afectará para nada y muy probablemente la trazada sea idéntica a la real, al milímetro. Pero, claro, si dispones de una plataforma potente, es lógico pedir que exprima un más el sistema.
En concreto, funciona a 30 imágenes por segundo –en la actual generación de consolas-, una tasa que se puede aceptar en juegos de velocidad que realmente justifiquen este sacrificio. En MotoGP 15 no hay explicación posible. Bajo la lluvia el juego sube un peldaño más en espectacularidad, aunque muy lejos de la recreación vista en los títulos de coches. Definitivamente, se echa en falta más ambición gráfica.
El juego está traducido y doblado al español con una cantidad de diálogos que se reduce a los tutoriales, presentación de la pista y final de la carrera –secuencias que saltarás una vez las conozcas-. El sonido, similar a la impresión que nos causó Ride, con las motos más potentes suena mejor, pero no es un apartado que impresione demasiado. Milestone tiene mucho margen para mejorar.
Conclusiones
La edición de este año se encuentra en un punto delicado: muy pocas novedades respecto al año pasado que justifiquen el salto al usuario fiel, y no las suficientes para tentar al usuario que está expectante de un lanzamiento fuerte. MotoGP 15 cae en ese error que termina por devaluar una licencia tan jugosa como es el motociclismo. La desarrolladora todavía está a tiempo de asentar su nombre en el género aprovechando la ausencia de rivales, pero para ello necesita sacudir la saga de arriba abajo, incluso a costa de tomar un tiempo extra de producción.
Quizás el punto más interesante se encuentra en que esta edición si llega a Xbox One –no así la de 2014-. Por lo demás, un título moderadamente entretenido que arrastra demasiado del pasado y no arriesga lo suficiente.