Análisis Maid of Sker, infiltración terrorífica (PS4, PS5, Switch, PC, Xbox One)
En los últimos años, los juego de terror salen de debajo de las piedras. Tanto que es difícil seguirles la pista. De mano de Wales Interactive nos llega ahora Maid of Sker una aventura bastante tradicional que se inspira en leyendas galesas para ofrecernos una entretenida historia con algunos puntos mejorables.
Metal Gear Susto
Maid of Sker es un juego de terror e infiltración en primera persona que toma cierta inspiración de los Resident Evil clásicos para ofrecernos una aventura, en general, bien planteada, a pesar de que tiene ciertos problemillas que no nos terminan de convencer y que comentaremos más adelante.
A nivel narrativo, nos lleva 1898, y nos cuenta la historia de Elisabeth Williams, atrapada en un hotel donde están pasando cosas muy extrañas, y donde la clave de todo parecen ser una grabaciones musicales con poderes que no terminamos de entender. Nuestro objetivo, por supuesto, recuperarlas y salvar a Elisabeth. Es una premisa interesante, y nos ha parecido original y entretenida; diferente de la típica historia de terror.
En lo jugable, es un juego centrado en la exploración y la infiltración. Como decimos, se inspira en el diseño de la saga de Capcom; tanto que no hay puntos de guardado automáticos (de hecho, en difícil las veces que podemos guardar son limitadas) y el hotel está completamente conectado, pero para ir accediendo a nuevas zonas tendremos que conseguir llaves y objetos que la desbloqueen. Nos ha parecido que Wales Interactive ha hecho un buen trabajo en este aspecto, y se agradece mucho contar con un escenario bien planteado en un juego así.
También nos han gustado mucho los puzles. Son relativamente sencillos, y normalmente la clave está en ver ese pequeño detalle que nos da la pista. En lugar del típico «aquí hay un puzle, aquí hay una pista, averigua cómo resolverlo», llegamos a una zona que claramente requiere que hagamos algo, y tenemos que buscar el elemento que nos va a guiar. Hay algunos más tradicionales, si bien en general nos ha convencido esta propuesta más orgánica.
A los controles, es un título muy sencillo. Los enemigos, por normal general, sólo pueden oírnos. Nuestro protagonista tendrá que aguantar la respiración cuando se encuentre cerca, pero si la aguanta durante demasiado tiempo tendrá que coger aire rápidamente (o morirse), haciendo ruido y llamando su atención. Ciertos elementos, como el polvo o el humo, nos harán toser, por lo que tenemos que planear nuestras rutas con cabeza para seguir siendo auténticos ninjas. Aquí es, pensamos, donde se produce sus mayor error.
Como hemos mencionado, los puntos de guardado son limitados, y no abundan. Esto nos parece genial... si ciertas zonas estuviesen mejor diseñadas. En un Resident Evil, aunque los puntos de guardado no sean automáticos, normalmente siempre tienes opciones para escapar, pero aquí las criaturas son más rápidas que tú, y un error suele ser letal. Esto se traduce en que secuencias que, si se te atascan por algún motivo, vas a repetir en muchísimas ocasiones, y en función de dónde esté el punto de guardado, a lo mejor te ves repitiendo la misma media hora una y otra vez.
Nos gusta el acercamiento a la infiltración, contener la respiración y encontrar la ruta menos peligrosa por el escenario, pero creemos que puede ser bastante exigente. No vamos a decir que sea algo malo, simplemente pensamos que se podría haber hecho de otra manera (darnos más herramientas para huir, por ejemplo), y está en manos del jugador decidir si se le apetece este desafío o no. Si no, siempre se puede jugar en fácil, aunque creemos que la dificultad ayuda a aprovechar (y extender) las cuatro horas que dura.
Hotel de cinco estrellas
En lo audiovisual, Maid of Sker ha sido una agradable sorpresa. La versión de Xbox One X, la que hemos analizado, se ve muy bien. Tanto en lo artístico como en lo técnico está a muy buen nivel. Quizás los enemigos sean un poco genéricos, pero los escenarios nos han encantado, y son bastante variados teniendo en cuenta las limitaciones de la ambientación. Además, rinde muy bien, a 30 imágenes por segundo estables. Como curiosidad, tiene una extraña latencia en la respuesta que nos ha llevado a reducir la velocidad de movimiento de la cámara, pero nada particularmente grave.
Lo sonoro también está genial, con una enorme cantidad de pequeños efectos de sonido que nos llegan por todas partes y que nos mantienen en tensión constante. Os recomendamos, como es habitual en el género, jugar con auriculares, ya que salvo que tengáis un buen sistema de sonido es posible que os perdáis parte de esa experiencia envolvente y opresora que busca. Nos llega con voces en inglés y textos en castellano.
Terror exigente
A pesar de que, siendo sinceros, es otro juego más de miedo, la ambientación, la historia, sus buenos valores de producción, el diseño residentevilesco y su dificultad (opcional) han hecho que lo disfrutemos mucho. Es cierto que ciertos momentos pueden ser frustrantes, que puede castigar demasiado nuestros errores y que la infiltración podría estar más elaborada, pero podemos argumentar que todo esto aumenta la tensión. Y si no queréis tanta tensión, tenemos niveles de dificultad para elegir. En general, es un título muy recomendable si queréis pasar miedo y os gusta esconderos en la sombras.
Hemos realizado este análisis en Xbox One X con un código de descarga proporcionado por Wales Interactive.