Análisis de FIFA 16 (PS4, Xbox 360, PS3, Xbox One, PC)
Parece que fue ayer cuando Xbox One y PlayStation 4 se pusieron a la venta, pero dentro de poco van a cumplir su segundo año en el mercado, y este es el tercer FIFA que aparece para ellas. Quizás por eso cuando se anunció FIFA 16 y lo probamos por primera vez, esperábamos un poco más, ya que sus novedades y mejoras no son de esas que se noten a simple vista, y hay que dedicarle un buen número de horas para descubrir cómo ha mejorado en todos los aspectos.
Su jugabilidad es muy continuista, pero se han pulido y mejorado multitud de detalles, los modos de juego son los mismos de las dos últimas entregas, pero todos cuentan con novedades interesantes, y los gráficos apenas han evolucionado, pero son sutilmente mejores.
Sí, se le puede tachar de ser un juego excesivamente continuista, y más de uno pensará que EA Sports se ha dormido en los laureles, pero indiscutiblemente FIFA 16 es un gran juego de fútbol, completísimo y capaz de satisfacer a todo tipo de jugadores, desde los que quieren una experiencia entretenida y no demasiado complicada, a los que buscan un complejo y profundo simulador deportivo.
Mejorando en todas las zonas del terreno de juego
La novedad jugable más destacable para los que le dedican un buen número de horas cada año a FIFA es la defensa. Los defensores cierran mejor los espacios que por cualquier motivo haya podido dejar un compañero, reaccionan más rápido ante un cambio de posesión, y son más ágiles y rápidos en el uno contra uno, ya no es tan fácil que un delantero rápido o habilidoso se vaya de un defensa solo por potencia o velocidad. Esto se traduce en que los pases en profundidad al delantero ya no sean tan efectivos, una de las mayores quejas de FIFA 15.
Además a la hora de defender contamos con nuevas animaciones, como los amagos de entrada, entradas a diferentes alturas, o la nueva entrada rasa, en la que si volvemos a pulsar el botón detenemos el deslizamiento por el suelo encogiendo la pierna y nos levantamos rápidamente, por lo que ya no estamos tan vendidos al realizar una entrada fuerte. Una acción que se vuelve más útil que nunca si sabemos utilizar.
Los nuevos porteros del año pasado, que sorprendían con su habilidad en multitud de acciones, aunque decepcionaban con algún que otro fallo, ahora están mucho más pulidos, cuentan con más recursos y apenas hemos visto cantadas o acciones extrañas, y sí muchos paradones espectaculares, así como una gran iniciativa para salir a despejar balones aéreos con los puños. Como es habitual en FIFA cuando se introduce una novedad importante, es al año siguiente cuando funciona perfectamente.
En el centro del campo se ha mejorado la inteligencia artificial de los centrocampistas para que intercepten mejor los pases del equipo rival, teniendo que elaborar más las jugadas para pasar por esa zona del terreno de juego, habiendo perdido eficacia los pases en profundidad de decenas de metros. Ahora hay que ser más preciso en el toque, tener más paciencia para buscar una oportunidad de pase, y se producen más barullos y batallas en esta zona del terreno de juego, lo que nos parece más realista.
Para compensar esto tenemos el nuevo pase raso potente, también conocido como pase con propósito o pase envenenado, que se realiza manteniendo apretado el botón de tiro de calidad más el pase raso, y que nos ha gustado mucho, tanto que ahora lo echamos de menos al volver a echar una partida a un FIFA anterior. Se trata de un pase muy potente y rápido que lleva una trayectoria complemamente recta, al que le podemos dar distintos usos. Por ejemplo nos ha parecido muy eficiente para montar contraataques rápidos, o para crear algún que otro barullo en el aérea.
Este pase al ser tan fuerte al receptor le cuesta más controlar el balón –dependiendo de la habilidad del futbolista claro-, y se le va unos centímetros del pie, aunque también le pasa lo mismo a los defensas que intentan interceptarlo. Una de esas novedades que no parecen demasiado importantes sobre el papel, pero que enriquecen muchísimo la jugabilidad y cambian nuestra manera de jugar.
En la delantera tenemos el nuevo regate sin balón, que con RB/R1 nos permite realizar fintas y cambios de dirección sin tocar la pelota, despistando a los defensas, como hacen jugadores tan habilidosos y rápidos como Messi. Esta nueva habilidad para que no rompa el juego tiene una ejecución bastante compleja, no es fácil sacarle partido, así que imaginamos que lo acabarán usando pocos jugadores, aunque ya hemos visto hacer cosas muy chulas con este movimiento.
Cuando entramos por la banda para centrar nos ha gustado mucho las nuevas trayectorias para atacar el balón que realizan los delanteros, que ya no buscan el remate solo en línea recta, y buscan la mejor opción para golpear la pelota de manera muy natural, con diferentes tipos de desmarques. Y hablando de remates, ahora los futbolistas golpean el balón de nuevas maneras, con diferentes orientaciones del pie y colocando mejor el cuerpo. Esto se traduce en por ejemplo espectaculares disparos con el balón en el aire al borde al área tras producirse un rechace, con tiros tan bonitos como realistas.
Como veis no son grandes cambios o revoluciones jugables, pero sí muchas pequeñas mejoras que en conjunto hacen de FIFA 16 una de las mejores entregas de los últimos años. Si son o no suficientes novedades ya es algo que debe juzgar cada uno, y para ello hay una demo que cualquier puede probar de manera gratuita. Como siempre una buena manera de notar cómo ha mejorado es volver a FIFA 15, que se nota mucho más rápido y artificial, con un ritmo menos realista. Creemos que en FIFA 16 se ha bajado un poquito el ritmo de los partidos, y eso junto a unos defensas que se posicionan mejor y que son más efectivos en el uno contra uno hace estemos ante un juego mucho más equilibrado.
Los mismos modos de siempre, aunque con algunos añadidos interesantes
Una de las novedades más promocionadas de esta entrega es el fútbol femenino, y que independientemente de que os parezca más o menos interesante hay que reconocer que al menos se lo han currado, y no se ha introducido de cualquier manera. Tenemos 12 selecciones nacionales para elegir, y además de amistosos podemos jugar un campeonato. A la hora de jugar se nota la diferencia con los hombres, con un ritmo de los partidos más lento, y pases y controles menos precisos, empujándonos a elaborar más las jugadas y depender menos de las acciones individuales. Es curioso cómo te encuentras ante un FIFA diferente, más pausado, y os invitamos a probarlo.
Otra novedad es el FIFA Trainer, un visor en tiempo real que podemos activar en cualquier modo de juego y que mientras jugamos nos dice de manera activa las distintas opciones que tenemos de pase, tiro, etcétera, mostrándonos al lado de nuestro jugador la combinación de botones. Un tutorial dinámico, por así decirlo, que se supone puede servir tanto para un jugador novato como para uno experto, ya que hay seis niveles de estas indicaciones, para acciones cada vez más complejas.
Sí nos parecen mucho más apropiados para aprender a jugar los Juegos de habilidad, más variados que nunca con la nueva categoría de ‘básicos", con los que asimilamos todos los conceptos jugables, que son muchos, mientras nos entretenemos haciendo puntos y nos picamos en los marcadores en línea con nuestros amigos o jugadores de todo el mundo. Si eres de los que juega a FIFA de Pascuas a Ramos, te recomendamos mucho echar un rato en estas pruebas y refrescar la memoria, lo que también sirve para aprender las nuevas acciones que incorpora esta edición.
Como comentábamos antes no hay nuevos modos de juego, lo que un año más nos decepciona un poco, no nos creemos que no tengan nuevas ideas, aunque sí que se han mejorado los más importantes que ya estaban presentes. El gran protagonista sin duda vuelve a ser Ultimate Team, y su gran novedad es el FUT Draft, un modo en el que tenemos que crear un nuevo equipo eligiendo para cada posición entre cinco jugadores, con los que jugaremos de manera temporal en una serie de partidos.
Primero tenemos que elegir la dificultad de los partidos, luego entre una de las cinco formaciones, y luego elegir nuestro capitán entre uno de los cinco jugadores que salen de manera aleatoria, siempre grandes futbolistas. En cada posición nos darán a elegir entre cinco jugadores, y tendremos que poner a prueba nuestra habilidad realizando equipos en FUT, con la mejor química posible. Después jugaremos cuatro partidos, pudiendo jugar offline o con jugadores de todo el mundo, y dependiendo de lo lejos que lleguemos obtendremos mejores o peores recompensas. Jugar a este modo tiene un alto precio, 15.000 monedas o una ficha de FUT Draft, que podemos obtener en los sobres, y nos parece una gran idea para disfrutar de Ultimate Team de una manera diferente, jugando siempre con nuevos equipos y buenos jugadores.
El otro modo de juego al que más horas solemos dedicar es el modo Carrera, que trae como mayor novedad los torneos de pretemporada, algo que veníamos pidiendo desde hace años y que por fin han incorporado. Antes de empezar la temporada oficial podemos disputar diferentes torneos amistosos por todo el mundo, con más o menos dificultad y premio económico, y en ellos podremos probar a toda la plantilla sin limitaciones, al no haber límite de cambios, mientras obtenemos suculentos ingresos extra.
Otra novedad del modo Carrera es poder entrenar a los jugadores entre partidos, potenciando sus atributos, simulando estas actividades o siendo nosotros quienes las disputamos mediante los Juegos de habilidad. También hay otra serie de pequeñas mejoras que venía pidiendo la comunidad, como un valor de los jugadores y presupuesto de los clubes más parecido a la realidad, y que no sea tan habitual ver a los grandes futbolistas ir de un club a otro, también buscando el realismo.
Estancado gráficamente
Ya el año pasado dijimos que nos decepcionaba el salto gráfico de FIFA en la nueva generación, y otra vez tenemos que repetir el discurso, ya que las mejoras son muy pocas en lo que se refiere a lo puramente técnico. Una vez más vuelve a funcionar a 1080p y 60fps en ambas consolas, y en esta edición se ha mejorado la iluminación, lo que se nota en los rostros, ahora bastante más realistas, también porque han retocado 350 caras, como los principales jugadores del Real Madrid.
Las animaciones mientras jugamos siguen siendo igual de buenas que siempre, con nuevas incorporaciones, aunque tenemos que pegar un grave tirón de orejas por las cinemáticas y las repeticiones durante los partidos, que a veces se ven a tirones, con brusquedad en las animaciones, un detalle que afea muchísimo el resultado final, y que no esperábamos para nada en la nueva generación y de un producto como este. Quizás la saga para dar un verdadero salto gráfico de calidad necesite un nuevo motor gráfico, veremos con qué nos sorprenden el año que viene.
La presentación y todo lo que envuelve a los partidos es excelente, cada año mejor, tanto en lo gráfico como en lo sonoro, con grandes detalles por todas partes, como los nuevos tatuajes de los jugadores, como el que se ha hecho Messi en el brazo, recreado con todo lujo de detalles, o el haber incluido el spray que ahora usan los árbitros para marcar en las faltas al borde el área la posición de la balón y de la barrera, una pintura blanca que incluso se borra poco a poco. Hay un nuevo y útil menú de repeticiones de las mejores jugadas, que podemos utilizar ahora en los descansos, y hay nuevas condiciones climáticas como brumoso, parcialmente nublado, muy nublado y lluvias y nevadas intermitentes.
El sonido también es excelente, con 900 cánticos reales de estadios de todo el mundo, y en los comentarios en la versión española vuelven a estar al frente Manolo Lama y Paco González, periodistas deportivos que gustarán más o menos, pero hay que reconocer la enorme cantidad de líneas de diálogo que incluye el juego, realizando comentarios muy acertados, por ejemplo del transcurso de nuestro club a lo largo de la temporada en los distintos modos de juego. La banda sonora vuelve a ser muy completa y variada, y como siempre adelanta algunos de los temas que seguro que convertirán en un éxito en los próximos meses.
Sinónimo de calidad
Nos guste o no el ritmo al que progresa la saga, en EA Sports parece que tienen bastante claro que las novedades se deben introducir poco a poco para no romper el juego, y aunque en esta edición no hay grandes revoluciones, todos los cambios nos parecen acertados, y mejoran en todos los aspectos la experiencia. Si bien entendemos que sea conservador en lo jugable, con una fórmula que funciona y no quieren estropear, no nos parece correcto que sea igual de conservador en cuanto a modos de juego o el apartado gráfico, donde creemos que sí podrían ser un poco más ambiciosos.
Pero dejando a un lado lo lejos que podrían llegar si apretaran un poquito más el acelerador, lo que sí tenemos claro es que FIFA 16 es un grandísimo juego de fútbol, muy completo mire por donde se mire, y que ofrece una compleja simulación y contenidos para estar entretenidos durante varios meses. Será más de lo mismo, pero para aquellos que lo exprimen al máximo cada año, pocos videojuegos hay más rentables.