Análisis de Formula One 2005 (PS2)

Han sido varios los pilotos españoles que han pasado por la parrilla de la Fórmula 1, el sector puntero de cualquier tipo de deporte motor, y el más caro y lujoso del mundo. Ninguno había tenido la trascendencia de Fernando Alonso en su primer año, pero ahora que asistimos al tercero como piloto oficial de Renault podemos verle liderando la tabla de clasificación, algo totalmente impensable para cualquier aficionado hace solo un par de años y de esta manera nos damos cuenta del potencial de este deporte en España.

En vista de lo cual ¿hay acaso mejor licencia posible para vender juegos que ofrecer la imagen del piloto asturiano? Si contemplamos las ventas llegamos a la conclusión de que el juego se vende por esos motivos, si no nos tememos que meramente por su calidad debería encontrarse en la zona media de cualquier estante porque no merecería ocupar ningún lugar privilegiado, sobre todo si vemos la escasa evolución que el juego ha sufrido desde que Sony adquirió la licencia exclusiva de la FIA (Federación Internacional de Automovilismo).

En su afán continuista, los estudios de Liverpool de Sony han tenido claro que si algo se vende, ¿para qué cambiar? Lo malo es que eso debería aplicarse a algo más que a las portadas o dos circuitos nuevos y a las pegatinas de los patrocinadores de los coches. Fijaos si es continuista que el coche a batir en este Formula One 2005 es el Ferrari 2005 diseñado por Aldo Acosta, sí, ése que tan buenos resultados está dando, muy criticable por tanto la actitud de los programadores de no haber sido un poco realistas en función de como se ha ido desarrollando la temporada presente, donde se aprecia a leguas que los Renault y los Mclaren-Mercedes son los coches más equilibrados, en la teoría y en la practica, donde corriendo un gran premio menos ocupan los dos puestos mas altos en la tabla de constructores.

Si hay algo que no se puede desmerecer en este juego es que aprovecha los detalles que son los que encandilan a los seguidores, desde los diferentes cascos de cada piloto hasta la palpable diferencia estética cuando la aerodinámica del coche cambia según el tipo de circuitos por los que nos toque conducir, por lo tanto no es lo mismo el omnipresente circuito de Mónaco, que el de Canadá (donde los frenos tienen una desgaste máximo) o el de Monza (donde cogeremos las mas altas velocidades de todo el mundial). Los diferentes tipos de ruedas para el tipo de asfalto, sobra decir cuando está seco o está mojado, y muchos otros detalles que hacen de F1 un juego muy trabajado estéticamente hablando, que no gráficamente, puntualizamos…

El motor gráfico parece ser el mismo que hace 3 años, con los mismos fallos, calcados, os enumeraremos algunos de ellos por si no los recordabais: Cada vez que pasemos por un guardarrail podremos apreciar cómo son cuadrados y terminan en pico (¿un efecto un tanto extraño, verdad?), los aficionados no se pueden mencionar ni como monigotes, ya que para llegar a ese término deberían poder distinguirse un poco mejor, el antialiasing sigue brillando por su ausencia porque cada vez que atravesemos una zona con vallas o cualquier sitio con formas pequeñas cantarán los bordes dentados de una manera inimaginable, las texturas se marcan un buen baile de vez en cuando y no es precisamente porque hayan adquirido una calidad nunca vista, sino que son simples a más no poder. Como podéis ver seguimos en la misma situación, muchas cosas por perfeccionar que año tras año nos acompañan. Sería muy fácil para nosotros deciros que es una experiencia absolutamente gratificante jugar a este F1 2005, pero sería jugar con vuestra inteligencia.

Es una elección acertada la de poder escoger muchas opciones haciendo la conducción mas fácil a aquel que lo desee, pero es peor todavía cuando alguien busca tener que apurar las frenadas para no salirse ni perder tiempo y ver cómo se puede ir tranquilamente con el pedal a fondo gran parte del tiempo. Control de tracción, de frenos, incluso consejos de conducción son algunos de los múltiples atractivos que hacen el juego más gratificante a aquellos que huyen de las complicaciones dejando el juego en poco menos que un arcade, tal vez los daños sean aquello que impliquen prestar más atención en carrera sino queremos quedar fuera a la segunda vuelta pero nos parece un bagaje bastante pobre, ¿dónde ha quedado aquella simulación de los juegos de EA?. La intro anterior ha dado paso a una secuencia CG de gran gusto amenizada con una estupenda música que acaba desembocando en unos menús simples y atractivos idénticos a versiones anteriores. Lo que sin duda alguna vuelve a ser el punto fuerte es el sonido, no solo de los monoplazas en carrera sino incluso cuando entran a boxes, todo se ha tratado con bastante mimo aunque quizás la diferencia con el año anterior sea nula, pero tampoco se puede mejorar algo que ya es bueno de por si.

Los comentarios de carrera de Antonio Lobato y Gonzalo Serrano, incluso de Fernando Alonso comentando cómo transcurre la carrera estarán a la orden del día, realmente se agradecen y ambientan muy bien haciendo que obviemos algunos de esos fallos que ya os hemos comentando previamente. Incluso podríamos decir que algunas veces van más acordes que en la realidad, porque a los comentaristas no se les puede decir que no tengan devoción pero tal vez a veces se despistan un poco por llamarlo de alguna manera.

En la parte de Inteligencia Artificial habría que resaltar que funciona decentemente, muy parecida a la de años anteriores, desde luego que sus desarrolladores han dicho que el coche ahora tiene unas prestaciones mucho mas trabajadas según su peso y su velocidad para hacer mas realista la conducción, pero desde luego en la jugabilidad no se nota, y creemos que eso es lo importante. Los efectos de lluvia y humo están bastante bien, logrando mejorar algo los ya vistos, pero nada que nuestra vista no pueda tolerar debido a su belleza.

En la edición 2005 por fin podremos competir online demostrando que somos intratables en un circuito y no tendremos que conformarnos con subir nuestros mejores tiempos a la red, ¿para qué conformarme con saber que machacas a alguien si puedes hacerlo directamente? Eso sí, de uno en uno porque si soñabais con carreras de 20 pilotos podéis seguir esperando, por ahora iros conformando con la mitad. Lleva imponiéndose bastante tiempo en los juegos deportivos este sistema de juego, tal vez para transmitir mayor profundidad o simplemente como añadido pero lo cierto es que es muy adictivo en la mayoría de los casos y aquí no lo es menos. Comenzaremos como un anónimo piloto, batiendo el cobre en Minardi intentado hacer cosas decentes para que así podamos ir subiendo escalones hasta llegar a un lugar privilegiado dentro del circo de la F1. Mejorando nuestros tiempos y yendo al limite conseguiremos nuestro cometido, y es que aquello de lo importante es participar a veces resulta un poco difícil de creer. Para los que quieran seguir probando suerte en los modos contrarreloj, un gran premio o el mundial entero sobra decir que ahí siguen presentes. Resulta gracioso que los modelos no se correspondan ni lo mas mínimo con la realidad visto el gusto por el detalle conseguido en los coches, pero como chocante nos encontraremos el multijugador al que podríamos calificarlo de injugable porque si los escenarios no son lo mas vivo de este mundo con un solo jugador, a pantalla partida seremos testigos de unas ralentizaciones y un popping increíble ¿Conclusión? Mal trabajado el motor gráfico porque no da más de sí.

Seria muy torpe no darse cuenta de que va ser uno de los juegos más vendidos de este año aunque no por méritos propios. Al menos seguro que los jugadores casuales (que serán sus compradores en el 80 % de los casos) lo disfrutan y contribuirán a que el mercado de los juegos se extienda, todos contentos, pero a final de año cuando se recuerdan los juegos que más han hecho disfrutar a la multitud de fans de este mundillo tened por seguro que este F1 no se encontrará entre ellos.