Análisis Phoenix Point, exquisita estrategia por turnos (PC, PS4, Xbox One, PS5, Xbox Series X/S)
El pasado 3 de diciembre salió a la venta Phoenix Point, un juego de estrategia por turnos muy especial ya que uno de sus creadores es Julian Gollop una de las mentes que dio vida a la famosísima saga XCOM y que ahora vuelve a la carga a lomos de una nueva propiedad intelectual con buenas ideas, un desarrollo estratégico exquisito y algunos puntos que pulir sobre todo en forma de la cámara y la interfaz del juego. Durante las próximas líneas repasaremos todos estos detalles para comentaros qué nos ha parecido esta entrega.
Una extraña mutación alienígena que vuelve loca a la humanidad
En Phoenix Point nos encontraremos con que la Tierra asolada por un extraño virus bautizado con el nombre de Pandoravirus que han logrado convertir el mar en algo completamente alienígena provocando que, con el tiempo, la población humana se viera diezmada por una especie de nuevos seres de mutación alienígena reduciéndola a un puñado de facciones que controlan unos pocos refuigios por todo el mundo. Con esta premisa el Proyecto Fénix, una organización internacional creada para activarse cuando el mundo estuviera en peligro, vuelve a la vida para intentar averiguar el origen del Pandoravirus, combatir a los horrífidos mutantes e intentar unir y salvar a la humanidad en su camino.
Estrategia exquisita en combate
Phoenix Point se "divide" en dos vertientes estratégicas, una de gestión de unidades, exploración y diplomacia y otra puramente bélica, es decir, centrada en el combate, que es con la que vamos a comenzar a hablaros de los pormenores jugables de este particular título y que, de hecho, es su punto más fuerte.
En el campo de batalla el juego recuerda poderosamente a XCOM (algo nada sorprendente dado el origen del juego) y a otros títulos de este estilo, contando con distintas unidades que tienen unos determinados puntos de acción para moverse, atacar, rebuscar en el inventario, activar habilidades, cubrir una zona o curarse. Una vez gastamos los puntos de acción ese personaje no puede hacer nada más hasta el siguiente turno. Con esto en mente deberemos afrontar todos y cada uno de nuestros combates, siendo muy importante ir moviendo con inteligencia a nuestras unidades por los diferentes mapas, diseñados de forma bastante acertada para ofrecernos coberturas, puntos en los que montar emboscadas, trampas naturales del propio mapa (como derribar el suelo de algunos edificios o barriles explosivos) y otros detalles que hacen que, al menos para nosotros, el juego nos haya parecido exquisito en su vertiente de combate.
Algo muy importante a la hora de combatir es la posibilidad de apuntar a diferentes partes del cuerpo de nuestros objetivos, pudiendo, por ejemplo, disparar a la cabeza, el torso, alguna extremidad e incluso a sus armas para dejarlas completamente inutilizadas. El daño en cada parte del cuerpo afecta al objetivo (y a nuestros combatientes) de diferentes formas y es muy importante tenerlo en cuenta a la hora de ejecutar nuestros ataques pues puede decidir el curso de la batalla. Otro aspecto que nos ha gustado es el comportamiento de la inteligencia artificial enemiga, bastante acertado en la mayoría de los casos, buscando flanqueos, barriles explosivos para hacernos más daño o utilizando sus distintos poderes de forma bastante lógica haciendo que el juego, sobre todo en sus primeros compases, sea bastante desafiante. Hemos visto también algún comportamiento un tanto extraño pero, en líneas generales, estamos bastante satisfechos con el juego en ese sentido.
La crucial gestión fuera del campo de batalla
Fuera del campo de batalla se nos plantea una estrategia bien distinta que tiene que ver más con la gestión de nuestra base, de nuestras unidades, las investigaciones tecnológicas que queramos llevar a cabo, la exploración del planeta para contactar con diversas facciones, recolectar recursos, cumplir misiones o caer en emboscadas de enemigos y, por último, un toque diplomático bastante interesante que nos ha hecho bastante tilín.
En Phoenix Point tenemos un total de tres facciones bastante dispares entre sí que deberemos de intentar convencer para que apuesten por nuestra causa, ganándonos su favor para poder simplemente comerciar con ellos o, si movemos bien los hilos, incluso poder reclutar a algunos de sus miembros como combatientes de Phoenix Point. La forma en la que se nos presentan los tres pueblos, las decisiones de diálogos y como tendremos que caminar por la cuerda floja para intentar atraerlos a todos es un aspecto que nos ha gustado muchísimo, que además de hacernos darle al coco en el campo de batalla también nos hace pensar nuestras acciones con los respectivos pueblos para ganar "batallas diplomáticas" intentar que todos se sumen al Proyecto Fénix.
Más allá de esta diplomacia otro de los aspectos críticos del juego será gestionar nuestras unidades personalizándolas a nuestro gusto a medida que suben de nivel y obtenemos nuevo equipo para armarlas y llevarlas al campo de batalla con nuestra combinación favorita de objetos y tipos de combatiente para intentar garantizar el éxito en el combate.
Un aspecto técnico correcto con problemas de cámara e interfaz
Entrando en pormenores más técnicos Phoenix Point es un juego gráficamente correcto, con texturas, efectos y detalles en pantalla bastante decentes. No es un juego poderoso a nivel gráfico tanto por presupuesto como por querer llegar al máximo número de ordenadores posible, algo bastante habitual en los juegos de estrategia y, sobre todo, en las propiedades intelectuales más desconocidas.
Lo que sí nos ha chirriado en este sentido es la cámara durante el combate, un tanto extraña en algunas ocasiones y un tanto torpe cuando la manejamos para intentar ver todo el campo de batalla. Además, tampoco nos han gustado ciertos elementos de la interfaz sobre todo en lo que a la gestión de la base se refiere, que eran bastante sosos así como nos resultaron poco cómodos.
Fijándonos en el sonido el trabajo es bueno tanto en lo musical como en el doblaje y el audio en sí. El juego llega además con voces en inglés pero textos en castellano, por lo que no tendréis ningún problema para disfrutarlo si no domináis la lengua de
Conclusiones
Phoenix Point es otro claro ejemplo de que la estrategia y, sobre todo, la estrategia por turnos está en un momento excelente de forma, ofreciéndonos un título exquisito durante el combate, interesante en las tareas de gestión y muy divertido con su diplomacia, al que solo le haría falta una mejor cámara y algunos retoques en su interfaz para hacerla más atractiva, intuitiva y moderna para destacar. Si sois aficionados a XCOM o a la estrategia por turnos estamos seguros de que Phoenix Point os va a encantar. Si sois noveles en el género os vais a encontrar con un juego exigente en sus inicios, así que tomadlo con paciencia, jugad su tutorial y dejaos llevar, poco a poco, por la profundidad de la estrategia por turnos de Julian Gollop.
Hemos realizado este análisis gracias a un código del juego para PC proporcionado por Sandbox Strategies.