Análisis de L.A. Noire: La Edición Completa (PC)

Nota: Este análisis está principalmente enfocado a los puntos que son diferentes en la versión de PC respecto a la de consolas, por lo que si queréis profundizar en detalles podéis consultar nuestro análisis de la versión de consolas.

Tras varios meses de diferencia respecto a las versiones de consola, los usuarios de PC por fin van a poder disfrutar de una de las aventuras más originales y que más ha dado que hablar este año. Esta conversión trae consigo algunas novedades, especialmente en el terreno gráfico, donde si disponemos de un equipo a la última disfrutaremos de una experiencia muy satisfactoria.

La obra póstuma del Team Bondi sigue manteniendo toda su esencia, con una jugabilidad única que nos sumerge de lleno en un thriller policiaco ambientado en Los Ángeles de 1947. Un juego que no es del gusto de todos, pero que hay que probar al menos una vez en la vida, amén de contar con las mejores expresiones faciales vistas hasta la fecha.

Con mando mejor que con teclado y ratón

L.A. Noire nos pone en la piel del detective Cole Phelps, un ex combatiente de la Segunda Guerra Mundial. A lo largo del juego iremos pasando por distintos departamentos de la policía resolviendo todo tipo de casos, muchos de ellos basados en algunos reales. A pesar de lo que pueda parecer en un principio al tener una enorme ciudad por delante para explorar, no nos encontramos ante un sandbox, sino que su estilo de juego está a camino entre la aventura gráfica y la película interactiva.

Su jugabilidad tiene varias partes bien diferenciadas. En algunos momentos tendremos que buscar pistas en los escenarios del crimen para conseguir avanzar en la investigación. La intensidad de la música nos indicará cuando hay una pista cerca, y si tenemos un mando este también vibrará para señalárnoslo. Estos momentos son pausados y nos requerirán paciencia y estar pendientes a todos los detalles. Otras de las situaciones claves serán los interrogatorios, donde con las pistas que hayamos recopilado y fijándonos en sus reacciones y expresiones, tendremos que decidir si los testigos o acusados nos mienten o dicen la verdad, presentando las pruebas pertinentes cuando sea necesario para desmontar sus argumentos.

En contrapartida a esto, también encontramos momentos de acción. Estos se dividen a su vez en tres: peleas cuerpo a cuerpo, tiroteos y persecuciones. Ninguno de estos resulta especialmente brillantes, pero se agradecen ya que aportan algo de variedad y ritmo a la aventura. Por último, se nos permitirá explorar la ciudad para encontrar algunos objetos coleccionables ocultos, aunque esto no resulta especialmente recomendable hasta terminar la historia principal, para no perder el hilo argumental.

Esto sería, dicho de una manera muy resumida, las claves de la jugabilidad del título. Como comentamos al principio de este texto, ahora vamos a centrarnos en las diferencias que hemos encontrado en esta versión respecto a la original de consolas, por lo que si queréis profundizar más en este apartado podéis consultar el análisis que hicimos destinado a estas plataformas.

Con esto dicho, lo primero que llama la atención son sus controles con teclado y ratón. No terminan de ser todo lo precisos y cómodos que nos gustarían, a pesar de poderlos configurar a nuestro gusto. No decimos con ello que sean malos, ya que se deja jugar bastante bien, pero notaremos una gran diferencia si introducimos un mando para jugar, dejando claros sus orígenes consoleros. Además, el hecho de que la vibración del mando nos ayude a encontrar pistas suma puntos a la hora de decantarse por esta última opción.

Otra de las novedades de esta versión es que incluye todos los contenidos descargables que han ido apareciendo para consola, de ahí la coletilla "La edición completa" que trae consigo el título del juego. Estos casos también están basados en hechos reales y están a la altura del resto del juego, por lo que gracias a ellos, hay que sumarle unas cinco o seis horas a la ya de por sí amplia duración de la historia principal, algo que se agradece y que justifica en cierta medida el retraso sufrido.

Ligeras mejoras visuales

Gráficamente L.A. Noire no puede decirse que pueda competir con los grandes exclusivos de PC o con los juegos pensados originalmente para la plataforma. Eso sí, con un equipo último modelo podremos disfrutar de la mejor versión del título en cuanto a términos visuales. Todo está mucho más definido y el aumento de la resolución de las texturas se nota. Las sombras ahora lucen bastante bien y la distancia de visionado aumenta. Así mismo, las animaciones faciales siguen sin tener rival a día de hoy, incluso tras varios meses desde su lanzamiento, lo cual dice mucho del magnífico trabajo conseguido por el Team Bondi en este campo. Y es que no es algo puramente estético, sino que está implementado a las mil maravillas con la jugabilidad del título, ya que las expresiones de los personajes en los interrogatorios pueden darnos pistas sobre si mienten o no.

También hemos notado que ha habido ciertos efectos que se han mejorado, así como varios elementos de los escenarios, como la vegetación por ejemplo. Además, se eliminan completamente los dientes de sierra si activamos los filtros AA y anisotrópicos. En cuanto a la tasa de de imágenes por segundo, podemos decir que en esta ocasión Rockstar ha hecho un buen trabajo, aunque mejorable.

En un PC último modelo el juego va como la seda y muy fluido, arreglándose así de un plumazo los problemillas de ralentizaciones que sufría su contrapartida para consolas. Con un equipo de gama alta también conseguiremos un rendimiento más o menos estable, aunque en los momentos de conducción sí que notaremos pequeñas bajadas en la tasa de imágenes. En cambio, un equipo de gama media sufrirá bastante para moverlo bien incluso con las opciones gráficas más bajas, desmereciendo algo que pensamos que con un mejor trabajo de optimización se podría haber solucionado perfectamente, ya que como hemos dicho, el título no explota en ningún momento toda la potencia que un compatible puede ofrecer.

En líneas generales, este L.A. Noire para PC mantiene la genial ambientación y recreación de la época que ya gozaba en consolas, así como unos excelentes diseños en el modelado tanto de la ciudad como de los personajes. Con todo esto, es innegable que se ve mejor, pero tampoco mucho más que en PlayStation 3 o Xbox 360, ya que el salto gráfico a pesar de ser patente tampoco es muy grande. Por último, otras de las novedades en este sentido es que es compatible con la tecnología 3D Visión de Nvidia.

Por último el sonido se mantiene al mismo gran nivel en todos los sentidos. La música acompaña a las mil maravillas la acción y se ajusta como un guante a la ambientación de la época. Eso sin olvidarnos de la cuidadosa recreación de los efectos de sonido y del tremendo trabajo de doblaje realizado (en inglés), con unas interpretaciones sencillamente magistrales.

Conclusiones

L.A. Noire es un título que no está destinado para todo el mundo, ya que su disfrute o no depende mucho del jugador y de lo que busque. Eso sí, gráficamente en PC se queda algo por debajo de lo que la plataforma puede ofrecer, a pesar de ser la versión con mejor acabado visual del título, y su optimización, aunque loable, podría haber dado más de sí. Con los controles pasa algo similar, aunque con teclado y ratón se maneja bien, si tenemos un mando probablemente nos acabemos decantando por esta opción.

Si ya se ha jugado anteriormente en consolas, no hay ningún motivo real que vuelva a justificar su compra, aunque si no lo hemos hecho, disponemos de un equipo lo suficientemente potente como para moverlo de forma fluida y queremos una buena aventura de investigaciones criminales, distinta a lo que hay actualmente en el mercado y con un estilo cinematográfico envidiable, se convierte automáticamente en una oportunidad inmejorable para hacerse con este magnífico thriller.