Análisis de Battlefield 2142 (PC)
Hablar de la serie Battlefield es hacerlo de una de las sagas más exitosas del mundo del PC gracias, en parte, a su impecable sistema de juego que permite a decenas de jugadores enfrentarse en una gran variedad de entornos de combate a través de Internet. Sin embargo, y pese a que los seguidores de la serie llevan ya unos años pidiendo más innovaciones en la franquicia de Electronic Arts, no ha sido hasta ahora, con este nuevo capítulo, cuando sus desarrolladores, Digital Illusions, han dado un paso adelante. Y es que hasta la fecha, sus creadores se habían limitado únicamente a cambiar el escenario bélico y a incorporar una serie de pequeñas modificaciones, no variando en exceso el sistema de juego, ni incorporando nuevas formas de disfrutar de la acción. Ahora, por el contrario, nos encontramos con un título ambientado en un mundo futuro devastado por las guerras y el frío, y una impresionante nueva modalidad de juego que sin duda se convertirá en la reina de Internet durante los próximos meses.
Como en el resto de títulos de la serie, el escenario de batalla, tanto en la modalidad clásica llamada Conquista como en la novedosa Titán, se dividirá en una serie de puntos de control que deberemos ir conquistando junto a nuestros compañeros para alzarnos con la victoria. Por supuesto, ésta no será una tarea sencilla puesto que el bando contrario también tendrá que cumplir este mismo objetivo, lo que nos obligará a hacer un uso intensivo de la gran variedad de vehículos de combate con los que contaremos, y del gran arsenal del que hablaremos a continuación. Además, tampoco podemos olvidar a los distintos tipos de soldados con los que nos encontraremos, aunque como decíamos, en esta ocasión su número se reduce a cuatro: equipo de reconocimiento, asalto (médicos), ingeniero y apoyo.
Cada una de estas unidades, lógicamente, cumplirá una función determinada dentro del campo de batalla, lo que obliga a cada equipo a nivelar sus fuerzas para así tener, por ejemplo, a varios médicos que restablezcan la salud a los heridos, o a las tropas de apoyo para que repartan paquetes de munición constantemente. Del mismo modo, las fuerzas de ingenieros pueden reparar los vehículos permitiendo así al grupo avanzar con cierta seguridad dentro de los carros de combate, mientras que las unidades especializadas en las labores de reconocimiento pueden eliminar a los enemigos desde la distancia, o colocar paquetes explosivos en determinados lugares del escenario.
Estas cuatro unidades, nada más comenzar la partida, tendrán un arsenal tremendamente reducido lo que hace que los principiantes o recién llegados al juego tengan que sufrir el imponente arsenal de los jugadores más experimentados, lo que en ocasiones puede llegar a ser realmente frustrante. Y es que en los primeros combates no dejaremos de morir a manos de otros usuarios con armas mucho más poderosas, y artilugios para realizar sus funciones mejores que los que tendremos al inicio. Y esto no sería malo si el equipamiento inicial no fuera tan pobre, ya que ni siquiera contaremos con unas simples granadas de fragmentación, lo que sin duda supone una verdadera desventaja con respecto a otros jugadores.
No obstante, esta situación irá mejorando pronto ya que conforme vayamos cumpliendo objetivos de relativo mérito, como matar a algún rival, defender posiciones aliadas con efectividad, o capturar puestos de control enemigos, las armas y objetos se irán desbloqueando, así como nosotros ascenderemos de rango hasta llegar, con mucho esfuerzo, a ser comandantes del ejército. En este último caso, como ya ocurriera en Battlefield 2, siendo comandantes tendremos que dirigir a nuestras tropas usando para ello los distintos edificios especiales que habrá en cada escenario, pudiendo pedir bombardeos en zonas determinadas del escenario, o lanzar una gran bomba de impulso electromagnético, lo que terminará con la vida de cualquier aparato tecnológico que se encuentre en su radio de alcance.
Pero además, antes de iniciar cada combate tendremos la oportunidad de equipar libremente a nuestro soldado, usando para ello todos los artilugios y armas desbloqueadas con el paso de la acción. En este sentido, deberemos tener en cuenta el peso del material que equiparemos al soldado, así como la función que realizaremos dentro del campo de batalla. Y es que en ocasiones puede resultar útil llevar un gran cargamento de granadas y una buena escopeta, para luego, en otras situaciones y entornos distintos, centrarnos en armas de largo alcance y corazas protectoras para evitar morir a las primeras de cambio por culpa de los francotiradores enemigos. Son este tipo de opciones las que hacen que pronto nos olvidemos de la reducción en la plantilla de combatientes, puesto que las posibilidades serán amplísimas (más de 40 objetos que equipar). No obstante, no hubiera estado de más que los desarrolladores, en vez de reducir el número de soldados, los fuera ampliando con nuevas clases o especialidades.
Otras de las novedades que saltan a primera vista es la nueva ambientación, que en este caso hará que nuestro estilo de juego varíe considerablemente. Y es que pese a que en las entregas anteriores también se ha ido cambiando el entorno de guerra, ya fuera Vietnam o el mundo actual, en este caso en concreto nos encontraremos con nuevos tipos de vehículos y armas que, pese a mantener cierto grado de realismo, nos obligarán a adaptarnos a las nuevas condiciones de combate que los desarrolladores nos proponen. De este modo, en un mundo futuro en el que la Tierra ha sido asolada por una nueva edad de hielo, y en la cual los bandos citados con anterioridad se disputan a muerte los últimos recursos disponibles en el planeta, tendremos que pilotar una serie de vehículos como los tanques o jeeps, que básicamente tendrán un comportamiento similar al visto en el resto de capítulos de la serie, y otros más innovadores como los populares tanques verticales, conocidos como los Mechas, que se convertirán en los reyes de la partida.
Y es que mientras que los otros dos vehículos seguirán las mismas directrices que en el resto de títulos de la saga (varios jugadores se encargarán de controlar las armas, pilotar o viajar como pasajeros), los Mechas avanzarán a toda velocidad por el entorno disparando sin cesar, lo que les convierte en unas máquinas letales. Sin embargo, siempre contaremos con una serie de armas que podrán derribarlos, como los lanzamisiles de los ingenieros, o las bombas de impulsos electromagnéticos que algunos vehículos tendrán equipados, y que dejarán al Mecha inhabilitado durante unos segundos, momento que todas las fuerzas del equipo podrán aprovechar para abatir al enemigo.
Y es que como decíamos, la estrategia de equipo en Battlefield 2142, como en el resto de la saga, será fundamental. Cada vehículo destacará por una serie de virtudes, pero ninguno en solitario será capaz de resistir al bando contrario, por lo que siempre tendremos que estar pendientes de los avisos de médicos, ingenieros y demás para actuar en consecuencia. Y si nos metemos de lleno en el novedoso modo Titán, todavía más, ya que en este caso en concreto nuestro objetivo primordial no será capturar los distintos puntos de control repartidos por el escenario, que también, sino centrarnos en la destrucción de la fortaleza flotante enemiga, su titán, para así conseguir la victoria en el escenario.
El problema, y a la vez su bendición ya que nosotros también tenemos una Titán que proteger, radica en que cada una de estas naves tendrá unos fuertes escudos protectores que las defenderán de los misiles de tierra que tendremos que ir lanzando desde los silos repartidos por el entorno. Si vemos que esta misión resulta imposible, puesto que el enemigo puede tener bien protegidos los silos de misiles (cada cierto tiempo se puede lanzar un nuevo cohete), podremos afrontar un asalto masivo con toda la infantería en la fortaleza volante, llegando a la misma a través de las distintas naves de transporte, o usando unas geniales cápsulas que nos lanzarán por los aires y, cuando lleguemos al suelo/objetivo, se abrirán dejándonos salir. Estas mismas cápsulas, por cierto, nos permitirán escapar de los vehículos en los momentos críticos, salvando así la vida si conseguimos escapar antes de que exploten.
Con todo esto, ya os podéis hacer una idea de las batallas que se librarán en los inmensos escenarios de los que hace gala Battlefield 2142. Como en el capítulo anterior, cada escenario, que estará basado en ciudades o zonas actuales transformadas por el paso de los años y el caos desatado por la guerra, se dividirá en tres niveles distintos que se corresponderán al número de usuarios que luchen en ellos. De este modo, si son pocos los jugadores el tamaño del mapa se reducirá, mientras que se ampliará al máximo si alcanzamos la cifra de los 64 jugadores que hay de límite. Pese a su magnitud, el nivel de detalles en cada entorno de combate será más que notable, encontrándonos con una gran cantidad de unidades tanto aéreas como terrestres moviéndose por el entorno, mientras que las explosiones y las ráfagas de disparos se suceden sin cesar.
No en vano, hablamos del motor gráfico ya empleado en Battlefield 2, que el año pasado se convirtió en uno de los más punteros dentro del género en el que se enmarca el juego. Sin embargo, las novedades gráficas no son las esperadas, puesto que básicamente los desarrolladores se han dedicado a cambiar por completo la ambientación, y a pulir ciertos efectos gráficos como los efectos de partículas y luces, o mejorar muy ligeramente el modelado de cada unidad. Aún así, seguimos estando ante un título de un gran nivel gráfico con unas exigencias en cuanto a los requisitos mínimos del sistema algo elevadas y, sobre todo, con unos tiempos de carga extremadamente largos, no ya sólo en la pobre modalidad de juego individual, sino también para acceder a las distintas partidas online, que funcionan a la perfección, eso sí., lo que hace que cargar un nuevo mapa se convierta en un verdadero suplicio. Al menos, eso sí, la música resulta de gran calidad, lo que hace que no nos aburramos del todo en la pantalla de carga.
Y es que como ya es tradicional en la serie, el apartado sonoro de Battlefield 2142 rayará a un nivel sobresaliente, con unas melodías para los menús muy animadas y pegadizas, lo que hará que tarareemos constantemente el tema principal del juego. Del mismo modo, los efectos sonoros para representar las armas, los pasos de las unidades o el rugir del motor de cada vehículo serán espectaculares, destacando su gran realismo y contundencia. Además, si se dispone de un sistema de sonido 5.1, disfrutaremos de un ambiente sonoro de lujo, con unos entornos inmensos en los que no dejaremos de escuchar tiros en la lejanía, explosiones por los laterales, y gritos de nuestros aliados en la retaguardia pidiendo ayuda. En este sentido, pocas pegas se le pueden sacar al apartado sonoro en esta nueva obra de Digital Illusions.
En definitiva, Battlefield 2142 mantiene todas las virtudes de los capítulos anteriores, ofreciendo un sistema de juego online directo y tremendamente adictivo, lo que le convierte en un gran título de acción. Además, la nueva modalidad Titán ofrece ese toque de innovación que tanto se le ha estado exigiendo a la saga desde hace años, aunque aún se siguen echando en falta más mejoras y que la plantilla, tanto de ejércitos como soldados, no siga reduciéndose con cada capítulo que se lanza. Y es que pese a que la incorporación de personajes totalmente personalizables en cuanto a su equipamiento resulta un gran acierto, no lo es tanto si consideramos que sólo hay cuatro tipos de soldados distintos, comenzando su andadura en el juego con un arsenal realmente pobre, lo que hace que los menos expertos sufran más de la cuenta las acometidas rivales.
Por tanto, esta virtud se torna también un defecto en las primeras horas de juego. Por último, tampoco podemos olvidar la pobre modalidad para un solo jugador, que sigue siendo una de las lacras de la serie, pese a que su punto fuerte se encuentra lógicamente en el multijugador. Tal vez más tiempo de desarrollo y la intención de revitalizar la saga hagan que Battlefield vuelva próximamente con más fuerza que nunca. De momento tenemos otro nuevo capítulo de la serie, con una gran calidad y opciones jugables realmente divertidas, pero falto de novedades realmente impactante, lo que hace que los ya veteranos en la serie puedan no estar tan interesados en la compra del mismo. El resto, sin duda encontrarán un referente de la acción multijugador en este Battlefield 2142.