Análisis de AR-K: Sexo, mentiras y trabajos de clase (PC)
La mayoría de los videojuegos que se desarrollan en España siguen siendo responsabilidad de pequeños estudios, muchas veces independientes, como en el caso de esta producción de un estudio llamado Gato Salvaje, cuya sede está en A Coruña. Han apostado por la creación de una aventura gráfica que tendrá estructura episódica y que empieza con Ar-K: Sexo, mentiras y trabajos de clase.
Evidentemente, que sea una aventura gráfica es una buena noticia para un género que, aunque cuenta con la aportación regular de algunas compañías especializadas como Telltale Games, no puede presumir de una gran representación en el mercado actual. Toda esta concepción de juegos por episodios mediante distribución digital, que quizás nos resultó un tanto extraña cuando precisamente Telltale Games apostó por ella para resucitar la saga Sam & Max, ha sido el revulsivo que necesitaban las aventuras gráficas para empezar a reclamar de nuevo un papel relevante en el campo de los videojuegos para ordenador.
Para esta aventura se ha optado por dar un papel relevante al humor, algo que muchos ya habrán intuido por la intertextualidad derivada del título para el primer episodio. Cuenta con Alicia como protagonista, una joven estudiante de periodismo con un pasado que podríamos calificar como turbio, que se despierta tras una fiesta alocada en su cama pero sin recordar lo que sucedió el día anterior. Descolocada, y con un montón de preguntas en su mente, tendrá que usar sus habilidades como periodista para reconstruir los hechos.
De esta manera se introduce una trama de tintes detectivescos en los que la chica protagonista se mueve en un ambiente menos noir que el propio del género y permite que los enigmas a resolver sean más livianos que la resolución de un macabro crimen. Claro que habrá muchas cosas por descubrir y quizás no todo sea lo que parece.
La ambientación del juego es una combinación de estilos entre los que destacan toques futuristas con otros retro, aunque desde luego no se trata de un steampunk. Esto parece hecho para conseguir una mayor libertad artística y la inclusión de algunos lugares y personajes de lo más peculiar. Por ejemplo, pronto conocemos Frankie, el camarero de un bar con ambientación de los años 50, pero que nos recuerda a un minotauro, pues pertenece a una especie alienígena.
La estructura de desarrollo de Ar-k es muy clásica. Se plantea un puzle, un problema a resolver, como el hecho de que la melopea de nuestro compañero Nuno sea tan fuerte que no pueda ni despertarse, y tengamos que preparar un método para despertarle, en este caso un revitalizador que necesita varios ingredientes que debemos buscar y conseguir. Una cosa lleva siempre a la otra… y así es como se desgrana la historia, poco a poco, ante el jugador. Pronto se abre también ante nosotros El Arca, la ciudad en la que se ambienta el juego, y las opciones de juego y los puzles se van haciendo más complejos.
Como vemos, el juego coquetea con algunos temas que no son quizás los más indicados para los más pequeños (cierto consumo de alcohol y cosas así), pero lo cierto es que tiene una dificultad suficiente como para que esos jugadores tengan serios problemas a la hora de intentar superarlo por sí mismos, aunque la dificultad, en general no es tampoco muy elevada. El humor, además, se basa mucho en la intertextualidad, en los referentes a aspectos de nuestra sociedad, por lo que aunque su aspecto es desenfadado y alegre hay una madurez en el desarrollo de la trama que va más allá del hecho de que salga gente con resaca, la palabra "sexo" en el título, y cosas de ese estilo. Además, la trama resulta bien llevada y aunque responde a muchas de las preguntas que lanza en su planteamiento deja otras tantas abiertas a la espera del segundo capítulo.
El control de Ar-k es totalmente clásico, centrándose en la estructura de apuntar con el ratón y pulsar (el conocido como point & click), prescindiendo de demás elementos para el manejo de la acción en pantalla, teniendo que hablar con personajes secundarios, coger objetos, etc., todo ello usando una interfaz de opciones centrada en la imitación de una PDA en pantalla, lo que resulta bastante bien integrado en la estética y estructura del juego. Por supuesto, tenemos también un inventario en el que todos esos objetos se suman y podemos combinarlos o revisarlos, según sea necesario.
Los puzles que se introducen en el juego no son particularmente endemoniados, pues algunas aventuras gráficas (sobre todo las más clásicas) han apostado por lanzar al jugador retos que no se podían solucionar usando la lógica, sino de maneras muy estrambóticas. En algunas funcionaba bien por el estilo y humor de esos clásicos, pero en otras ocasiones era claramente un simple recurso para entretener al jugador y alargar artificialmente la duración del título. Aquí eso no se da, y cuando nos encontramos con un obstáculo más difícil es porque hay que pensar un poco más. Con todo, no se trata de un juego que podamos describir como difícil, aunque en algún momento habrá que pararse a pensar cuál debe ser nuestro siguiente paso.
Los diálogos y los personajes son, posiblemente, su punto fuerte. El título está íntegramente en español y algunas salidas de tiesto en las conversaciones son muy divertidas. La mayoría de los puntos más socarrones los protagoniza la propia Alicia, que ha recibido mucha atención para otorgarle una fuerte personalidad y suele meter puntillas en sus observaciones, un viejo truco del género que siempre ayuda a cogerle cariño al personaje que manejamos.
A nivel técnico, el título luce bien en pantalla gracias sobre todo al trabajo artístico, que es donde más se pueden lucir. En lo estrictamente tecnológico el género, por sus propias características, no se da por lo general a grandes lucimientos, pero cumple con nota y, de hecho, está bastante bien compensado como para obtener buenos resultados en pantalla incluso en ordenadores con potencia comedida. En este terreno en concreto han presentado en Gato Salvaje una sensibilidad muy loable: habrá una versión denominada "ligera" que ofrecerá mejor rendimiento en los ordenadores menos potentes, pensando especialmente en netbooks. Lo único que le falta es conseguir dar el salto a Mac y Linux, como han hecho otros estudios independientes, aunque quizás en proyectos no tan ambiciosos.
En cuanto al sonido, las voces son lo mejor. Han contado con profesionales como la actriz María Castro (conocida por series como Sin tetas no hay paraíso en televisión, y películas como Días azules, habiendo trabajado también en doblaje de películas de animación). Además, como muestra de la cuidada producción, apostarán también por ofrecer el juego en versión internacional con textos en inglés, alemán e italiano, y nuevos doblajes: inglés y gallego. Quizás esta opción pueda parecer rara a algunos lectores, pero se trata de un juego español desarrollado en Galicia, así que presentarlo en el otro idioma de su tierra nos parece una muestra de mimo para el público muy destacable.
Conclusiones
Con este primer episodio, Ark-K se presenta como un proyecto muy prometedor que, al terminar, nos deja con ganas de más. Es agradable jugarlo, la historia resulta atractiva y está bien llevada, y el diseño de puzles es inteligente, tres pilares fundamentales para una buena aventura gráfica. La estructura por episodios les permite cobrar menos de seis euros, un precio que, suponemos, se mantendrá en los siguientes. El riesgo de los episodios es el de siempre: hay que mantener la tensión narrativa, conseguir que la historia se desgrane al ritmo adecuado, y saber cuándo hay que echar el cierre para no dejar que el proyecto marchite, al tiempo que, por ese mismo marchitar, debe haber regularidad en las apariciones de las entregas. ¿Qué es la esfera que encuentra Alicia? ¿Esconde algo en su interior? ¿Será solo un McGuffin? Queremos tener esas respuestas lo más pronto posible.
Gato Salvaje ha mostrado un gran potencial en un juego que, esperamos, vaya incluso a mejor en las próximas entregas. Quizás lo más difícil sea conseguir algo de atención en un mercado copado de producciones exageradas y fuera de canales de venta digital que pueden servir de gran apoyo promocional en determinadas situaciones. El título se adquiere desde la página web del estudio por 5,95€, y quienes decidan apostar por este universo entrarán en una aventura que, a buen seguro, les encantará.