Análisis de Mario y Sonic en los Juegos Olímpicos de Invierno (NDS)
¡Alcemos nuestros brazos para vitorear de nuevo a nuestros héroes! Los mitómanos amantes de las mascotas de Sega y Nintendo están de enhorabuena: volvemos a ver a Sonic y a Mario juntos en un espectacular juego basado, en esta ocasión, en las populares Olimpiadas Invernales, que se celebrarán en febrero del año que viene en la ciudad de Vancouver, Canadá, donde el frío ya se deja notar, ciertamente. Misteriosamente, a nadie parece extrañarle ya que las dos mascotas de compañías antaño enfrentadas se paseen por un videojuego juntas e, incluso (como es el caso en el título que hoy nos ocupa), colaboren por el bien común. Pero estamos ante otra generación de videojuegos: el exclusivismo de otras décadas ha pasado a mejor vida, cosa que, por otro lado, ha acabado favoreciendo al que más nos interesa: el jugador (categoría en la cual, por supuesto, nosotros también nos incluimos).
Ya viéramos el año pasado a nuestros héroes favoritos compitiendo juntos en los Juegos Olímpicos de Pekín, en un fantástico título que hacía un completo recorrido por las categorías deportivas más importantes del evento. En esta ocasión, nos encontramos ante un juego que, pese a basarse en el mismo precepto que el título anteriormente citado, es sustancialmente diferente a aquél, dado que las pruebas invernales tienen un componente clave que define las características de las disciplinas deportivas que en el juego encontraremos: la nieve.
Frío, frío...
Bueno, la nieve y el hielo, claro, porque no sólo esquiaremos o iremos en trineo. Encontraremos un total de ocho disciplinas deportivas: esquí, patinaje, snowboard, bobsleigh, hockey sobre hielo, curling, biatlón y luge. Algunas de estas disciplinas, como el esquí o el patinaje, por ejemplo, contarán con más de una prueba en la que podremos participar. De esta manera, dentro de la disciplina de esquí tendremos la posibilidad de hacer esquí de fondo, pero también podremos hacer saltos en trampolín o slalom, entre otras pruebas. Además, contaremos con la inclusión de un buen número de pruebas Fantasía, en las cuales podremos competir en diferentes disciplinas deportivas decoradas y reinventadas para la ocasión, como las carreras de skicross, en las que deberemos de competir contra diferentes personajes de Sega y Nintendo sorteando todos los enemigos y obstáculos que se nos pongan por delante, y utilizando objetos que nos ayuden a ganar, al más puro estilo del clásico Mario Kart.
Podremos embarcarnos dentro de cada una de estas pruebas en el modo de juego individual jugando una partida rápida contra la máquina, jugando a un torneo de varias rondas, así como compitiendo contra los datos que hayamos creado previamente con nuestro perfil, en el modo fantasma. Esto no es más que una competición contra uno mismo, intentando superar nuestras propias marcas en las diferentes pruebas a las que hayamos jugado con anterioridad, compitiendo con un personaje que, de hecho, no hará más que calcar nuestras habilidades en el terreno de juego, para servirnos como punto de referencia a la hora de competir.
Tendremos también la posibilidad de jugar a algunos minijuegos, los cuales han sido añadidos más que nada para desviar un tanto nuestra atención del modo principal de juego y permitirnos, así, relajarnos entre prueba y prueba. Tendremos tres pruebas dentro de este apartado, las cuales nada tienen que ver con disciplinas deportivas: podremos jugar al bingo, a las cartas o a la rueda de la fortuna con los personajes de Sega y Nintendo, cosa que ha entrado en el juego un poco con calzador, ya que son minijuegos que no pegan ni con cola con el resto de pruebas. Eso sí, dado que el contenido principal del juego es excelente, es de agradecer la aportación de material y contenidos adicionales que den mayor variedad de contenidos y, por tanto, una mayor rejugabilidad y duración al juego (el cual, de hecho, ya cuenta con mucho contenido disponible de por sí).
Contaremos, además, con la posibilidad de jugar a un notable modo multijugador, en el cual podremos adentrarnos junto a otros tres jugadores más, tanto si éstos cuentan con la tarjeta de juego original como si no, gracias al sistema de descarga de datos de nuestras consolas. Por otra parte, tendremos una tabla de récords y puntuaciones a nuestra disposición, tanto a nivel local como a través de internet, a la que podremos acceder a través de la conexión inalámbrica de la Nintendo DS.
¡A la aventura!
Pero uno de los mayores alicientes del título en su versión para Nintendo DS es la inclusión de un modo aventura, en el que deberemos de meternos en la piel de Mario y Sonic en una línea argumental que, de una manera un tanto estrafalaria, pretende aunar todas las pruebas del juego y permitirnos jugar a ellas planteándonos diferentes retos, como competir contra determinados personajes o conseguir la victoria en un tiempo determinado. En la aventura, veremos como los sempiternos enemigos de nuestros héroes, el malévolo Bowser y el maquiavélico Dr. Eggman (alias Dr. Robotnik) han raptado a los Espíritus de la Nieve, dejando a la ciudad de Vancouver sin la posibilidad de celebrar sus Juegos Olímpicos, como estaba previsto. De hecho, los dos archienemigos más famosos del videojuego se han hecho con toda la nieve del mundo para celebrar sus propios Juegos Olímpicos, raptando a los Espíritus de la Nieve (responsables de la aparición del blanco elemento en nuestro planeta) para poder amañar las Olimpiadas a gusto (cualquier cosa con tal de ganar...).
En este momento, entran en escena nuestros héroes: Mario y Sonic deberán, en compañía del único Espíritu de la Nieve que ha quedado libre, encontrar al resto de espíritus y enfrentarse, una a una, a todas las pruebas y contrincantes que les proponga el juego. En este caso, a pesar de que nos encontraremos con diversos aliados y personajes secundarios de ambas series de videojuegos, sólo podremos manejar en la aventura y en las pruebas al erizo azul y al fontanero, mientras que en las otras modalidades de juego se nos permitirá competir con cualquiera de los veinte personajes que se nos ofrecen para la ocasión. Si bien la aventura no es más que una excusa para darle un poco más de vidilla a la experiencia de juego, la verdad es que ha sido muy correctamente diseñada, y constituye un elemento muy interesante dentro del título, dado que deberemos ir desbloqueando poco a poco las diferentes disciplinas deportivas, encontrando cofres del tesoro y nuevas zonas a explorar, en las cuales conversaremos con algunos de los personajes más importantes de ambas franquicias.
Apartado técnico
Los gráficos del juego nos ofrecen unos modelos de personaje muy bien diseñados, en unas notables figuras tridimensionales en las que cada personaje vendrá con sus características físicas más características expuestas al detalle. Si bien en las pruebas de equipo, como las de hockey sobre hielo, los personajes no lucen tanto (debido a su inferior tamaño), en las pruebas individuales podremos ver no sólo la calidad de su diseño, sino también el buen número de animaciones con las que cada uno de ellos cuenta. Lamentablemente, la calidad de los fondos y del entorno no se encuentra al mismo nivel, dando en ocasiones una impresión de vacío generalizado, aparte de una calidad de texturas por debajo de lo que cabría esperar.
La música del título, muy dentro del corte de la banda sonora fílmica, es variado, dentro de las limitaciones impuestas por el espacio destinado a tal efecto dentro de la tarjeta del juego, con una excelente instrumentación orquestal digna de las mejores producciones de la factoría Disney, y con una calidad de sonido envidiable.
Por último, cabe mencionar que la sencillez del sistema de juego (a través del lápiz táctil, principalmente, así como algunos de los botones de la consola) es el principal motivo por el cual el juego resulta tan divertido y entretenido. No es sólo que contemos con una gran cantidad y variedad de pruebas para jugar, aparte de un amplio repertorio de modos de juego que nos mantendrán horas y horas enganchado a la consola, tanto jugando solos como con otros usuarios de la portátil. Es que, además, el control es extremadamente sencillo, y nos permitirá hacernos con el juego en apenas unos minutos, sea cual sea la prueba en la que compitamos. Por otro lado, el hecho de que se hayan incluido una gran cantidad de tutoriales en vídeo para cada una de las pruebas es muy de agradecer. En estos vídeos podremos ver los diferentes controles básicos para cada una de las especialidades deportivas, así como algunos consejos prácticos para mejorar nuestros resultados en competición.
Conclusiones
La nueva apuesta olímpica de nuestros héroes preferidos ha resultado ser uno de los mejores títulos deportivos hasta la fecha dentro del sistema portátil de Nintendo, al menos en lo que a categorías olímpicas se refiere. La gran variedad de pruebas, el amplio número de personajes (cada uno con sus características y habilidades) y los diversos modos de juego (entre los que destacamos el multijugador y el modo aventura) ofrecen una gran cantidad de contenido jugable a los usuarios de Nintendo DS, los cuales encontrarán un título entretenido, de fácil aprehensión para todo tipo de jugadores, completo y, sobre todo, divertido a más no poder.