Análisis de El profesor Layton y la llamada del espectro (NDS)

La saga protagonizada por el profesor Hershel Layton y su discípulo Luke Triton se ha convertido en una de las insignias más ilustres de Nintendo DS. Tras la sorpresa que supuso la llegada de su primera entrega, gracias a la combinación de un argumento apasionante lleno de misterios y giros argumentales inesperados, con una gran cantidad de ingeniosos puzles, la fórmula se ha ido mejorando y perfeccionando con nuevos títulos. Sin embargo, a pesar de que esta cuarta parte sea probablemente la mejor de todas, empieza a mostrar graves síntomas de agotamiento y la necesidad de nuevas ideas que revitalicen la serie con urgencia.

"Cuando la llamada de la flauta resuene por el pueblo, el espectro aparecerá..."

En esta ocasión, la historia actúa a modo de precuela y nos sitúa antes de los sucesos de los tres juegos anteriores, para mostrarnos como el inseparable dúo formado por Luke y Layton se conoció. Todo comienza cuando un día como otro cualquiera, nuestro carismático profesor recibe una carta de un antiguo conocido suyo solicitando su ayuda, pues una gigantesca sombra aparece por las noches en el pueblo de Misthallery destruyéndolo todo a su paso. No tardaremos en descubrir la relación de estos sucesos con una leyenda local que habla de un antiguo espectro que antiguamente protegía al pueblo. A partir de aquí, acompañaremos a Layton, su ayudante Emmy Altava y a Luke en otra aventura donde tendremos que resolver el gran misterio que se cierne sobre Misthallery.

El estilo narrativo vuelve a ser el mismo de siempre, manteniendo vídeos de anime de una calidad excepcional compaginados con ilustraciones de personajes con bloques de textos con lo que dicen. También se mantiene el característico estilo de serie de televisión para cuando cargamos partida, con un breve resumen de los acontecimientos hasta el momento.

Respecto a la historia, le cuesta arrancar un poco más que en anteriores entregas, pero se trata de una de las más interesantes y redondas que ha dado la saga y se convierte probablemente en el mayor reclamo que justifique su compra para los fans, por encima incluso de los nuevos puzles. Tampoco podemos dejar de mencionar el genial elenco de personajes creados para la ocasión, a la altura de lo que se espera de esta saga. Otro detalle que gustará mucho a los fans es la tremenda cantidad de guiños que hay a las aventuras anteriores. Como novedad en este apartado mencionar que podremos desbloquear unas escenas que nos muestran un poco más sobre el trasfondo de los personajes.

Ya entrando en lo que es su jugabilidad, volvemos a encontrarnos con exactamente lo mismo que llevamos viendo durante años. Es decir, nos moveremos por unos escenarios estáticos hablando con personajes e investigando cada rincón con el fin de encontrar pistas, puzles, alguna clase de objeto o monedas. Para interactuar con algo simplemente tendremos que tocarlo. Es de comentar que no hace falta haber jugado a ningún juego anterior para disfrutar de este, ya que está plagado de tutoriales que nos enseñarán a jugar y que resultan de lo más práctico.

En la Llamada del Espectro nos encontramos con la mejor selección de puzles hasta la fecha, siendo la más equilibrada y variada. Eso sí, también adolece de cierta sensación de repetitividad, ya que un gran número de ellos repite las mismas mecánicas ya vistas en entregas anteriores, por lo que volveremos a tener que resolver acertijos de ecuaciones matemáticas, de agudeza visual, de mover piezas, de seleccionar entre varias opciones según el enunciado del puzle, etc. Los hay nuevos, pero son pocos y en esencia se parecen mucho también a los clásicos. Esto consigue que los más veteranos puedan sentirse como que realmente están jugando a una simple expansión, y es en este punto donde más queda patente que la fórmula empieza a dar síntomas de agotamiento y que necesita algún tipo de renovación.

También se vuelve a mantener el sistema de Picarats, mediante el cual se nos puntuará según los fallos que hayamos tenido en cada puzle y que al final nos servirá para desbloquear material extra. Otra cosa que ha mantenido Level 5 es el sistema de pistas mediante el uso de monedas, en caso de que nos quedemos atascados con algún puzle, aunque usar esta opción no la recomendamos demasiado, ya que le quita parte de la gracia al juego y de la sensación de satisfacción al poder con uno que a primera vista nos parecía literalmente imposible de resolver.

Otra novedad en el plano jugable es la posibilidad de recolectar objetos coleccionables escondidos por los escenarios tocando varias veces en un mismo sitio del que salga una nubecilla de polvo al tocar, lo que nos anima a explorar más a fondo todavía, pero que no aporta nada realmente. Nuevamente se han vuelto a introducir diversos minijuegos. En esta ocasión tendremos "El trenecito", donde tendremos que colocar vías para que el tren llegue a la meta, "El pez", donde tendremos que colocar burbujas en un acuario para ayudar a un pez a recoger monedas y "Las marionetas", donde deberemos representar una obra de teatro realizando los gestos que se adecuen a la narración.

Generalmente siempre tendremos muy claro hacia dónde nos tenemos que dirigir y resulta difícil perderse, ya que la historia siempre nos va llevando de la mano para que no perdamos el hilo argumental. Aunque intentemos centrarnos únicamente a ella, en determinados momentos de la aventura nos obligarán a tener resueltos un determinado número de puzles, lo que nos obligará a realizar también los secundarios. En caso de que nos saltemos alguno, podremos acudir al gato Felimino, que es el encargado en esta entrega de recolectar los puzles perdidos. Completar la historia nos llevará alrededor de 10 y 12 horas, aunque esta cifra es muy variable según la velocidad de resolución de cada jugador o de si se usan pistas o no. También hay que decir que como viene siendo ya habitual, podremos descargarnos nuevos puzles semanalmente.

Uno de los puntos más negros de esta nueva entrega lo encontramos en la inexplicable ausencia de London Life en la versión europea. Se trata de un modo extra incluido en la versión americana y japonesa del título, y que nos proponía un juego completo aparte, en el que podíamos crear nuestro personaje y realizar misiones. La cosa resulta más sangrante todavía viendo el desolador número de novedades de la aventura principal y que su inclusión habría supuesto ese punto de frescura que tanto necesitaba. La excusa para no traerlo ha sido que su complicada localización al castellano, aunque viendo el resultado final, habría sido preferible traerlo en inglés a no hacerlo directamente, como es el caso. Una decisión polémica y que dará mucho de qué hablar.

Un apartado audiovisual muy "laytonesco"

Con esta peculiar palabra define Emmy Altava todo lo que tiene que ver con Layton, lo cual nos viene de perlas para definir el apartado gráfico de la Llamada del Espectro, ya que se mantiene prácticamente intacto respecto a lo que hemos podido ver hasta el momento. Esto significa que a pesar de que los escenarios son completamente estáticos y los personajes no pasan de ser simples ilustraciones que mueven la boca y los ojos para hablar, el apartado artístico es simplemente sensacional, así como el diseño de personajes y el gusto por el detalle que inunda toda la obra.

También volvemos a mencionar lo que ya dijimos unas líneas más arriba, y es que los vídeos de anime están a un nivel realmente sobresaliente. Eso sí, técnicamente no es ningún prodigio, ya que recordemos que casi todo es estático. Además, los sprites de los personajes sobre los escenarios siguen sin terminar de convencer, ya que desentonan demasiado.

En el plano sonoro nos es imposible poner pegas, ya que la banda sonora vuelve a ser de gran belleza y se adapta como un guante tanto a la ambientación como al aura de misterio que lo rodea todo. En cuanto a los efectos sonoros vuelven a repetirse los mismos de siempre. Donde se ha vuelto a dar en el clavo es con el doblaje al español que se ha realizado, que vuelve a ser sencillamente impecable y sobresaliente, con una selección de voces muy acertada y digna de alabanzas. Eso sí, echamos de menos voces para todos los diálogos, que habría sido la guinda final para este apartado.

Conclusiones

El Profesor Layton y la Llamada del Espectro se trata de una divertidísima aventura completamente imprescindible para aquellos poseedores de una Nintendo DS que no hayan tenido ocasión de disfrutar de los títulos anteriores protagonizados por este caballero inglés. Para el resto, decir que si bien la fórmula sigue funcionando y enganchando igual que siempre, la sensación de estar ante simplemente más de lo mismo es constante y el mayor atractivo probablemente lo encuentren en la genial historia que nos narra. Layton viene con un juego cargado de virtudes y con muy pocos defectos, al que la falta de innovación y la pérdida de frescura le pasan factura este año, así como la inexplicable ausencia del modo London Life. Sin embargo, sigue siendo muy adictivo y una opción muy recomendable si seguimos ávidos de devorar puzles.